A toda velocidad, como lo demuestra su extensa y camaleónica trayectoria política de cincuenta años, Patricia Bullrich está convencida de que una nueva oportunidad se le abre para sus aspiraciones de imponerse como líder y acreedora de una cuota de poder más grande, ahora en la estructura de La Libertad Avanza (LLA), su nuevo lugar en el mundo.  

La ministra de Seguridad de Javier Milei se enfrentó a su exjefe/socio político en el PRO, el expresidente Mauricio Macri, y quedó en un lugar marginal del organigrama del partido amarillo, que lideraba hasta febrero de este año.

Desde entonces, en su entorno se encargan de remarcar que nada le importa más a la exmilitante montonera/ alianzista/ cambiemista que su función en el Gabinete “libertario”. Pero esto no la aparta de un próximo horizonte electoral y su papel como garante del pasaje de votos centroderechistas del espacio PRO al de La Libertad Avanza (LLA).

LOS NÚMEROS LA AVALAN

Desde que asumió en la nueva administración, Bullrich se mantiene con una imagen de dirigente férrea, basada en sus furibundos operativos policiales durante las manifestaciones opositoras a los planes del Gobierno.

Esto repercute en su alta valoración positiva, de acuerdo a los sondeos de las últimas semanas. Así se observa en la encuesta de las últimas horas publicada por la Consultora D'Alessio IROL Berensztein, basado en un relevamiento que se llevó a cabo entre el 29 y 31 de julio de manera online a 1.005 personas mayores de 18 años en todo el país.

Allí la exministra de Seguridad macrista quedó solo por debajo de la vicepresidenta Victoria Villarruel en el diferencial de imagen positiva y negativa, con un 50 por ciento de aprobación de su figura contra el 47 por ciento de rechazo. Incluso supera al propio Presidente.

Bullrich está atenta, al mismo tiempo, para aportar al crecimiento del espacio ultraconservador liberal libertario del que ahora forma parte. Una de sus misiones, además de aportar electoralmente, es la de asegurarse el apoyo de dirigentes “amarillos” para que se pasen de bando. En eso trabajan su ladero Damián Arabia, y también aportan a la causa las diputadas que le responden directamente, tanto Silvana Giudici, como Laura Rodríguez Machado.

EN EL OJO DE LA TORMENTA

Pero no todas son buenas noticias para la descendiente de la tradicional familia argentina de los Pueyrredón Luro. Por estas horas, Bullrich se enfrenta a una dura acusación de parte de una de las dos diputadas del oficialismo “arrepentidas/engañadas” de haber visitado a Alfredo Astíz y otros represores condenados de la última dictadura militar, en una comitiva de legisladores de LLA que encabezó Beltrán Benedit hacia el penal de máxima seguridad en Ezeiza.

Cuando Eduardo Feinmann inquirió a la diputada santafesina Rocío Bonacci por la vinculación de la vicepresidenta Victoria Villarruel por el tour libertario, Bonacci directamente apuntó contra Bullrich, que es la jefa operativa del Servicio Penitenciario, aduciendo que fue ella la que “dio el OK”. La denuncia de la otra diputada mendocina Lourdes Arrieta va en ese mismo sentido.

Los chats, que llegan a un total de 142 páginas, entre los diputados libertarios y el padre Javier Olivera Ravasi, principal articulador de la iniciativa de otorgar prisión domiciliaria a los condenados por crímenes de lesa humanidad, tienen consonancia tanto con la mirada del ministro de Justicia Mariano Cuneo Libarona, como con la de la propia Bullrich.

Expresó durante su visita al Banco de Huellas Genéticas de Mendoza: “El tema en este sentido es la igualdad ante la ley. Es decir, a los 70 años las personas que están condenadas y que han cometido todo tipo de delitos, asesinatos, crímenes de todo tipo, pueden salir. “Y en el caso de los delitos de lesa humanidad, uno ve personas de 90 años con enfermedades terribles que están en la cárcel”, comparó la funcionaria nacional.

Y no dejó dudas de su rol y su punto de vista. “Ahora, a mí me toca administrar la cárcel. Me parece que una cosa es cumplir con una condena y otra cosa es infligir a esa condena una situación de extrema gravedad, como es tener una persona con un cáncer terminal en una cárcel. Me parece que es un tema que hay que pensarlo”, lanzó.

LOS CAÑONES EN EL CONURBANO, PENSANDO EN LA CIUDAD

Bullrich se convence cada vez más de que los votantes que antes eran del PRO ya se pasaron a LLA. Aunque se concentra en su cartera ministerial, que la da centralidad política en un tema como la Seguridad, y además le garantiza trato cotidiano con el Presidente, no descuida el 2025 y sabe que si Milei se lo pide saldrá a jugar su carta en la Ciudad de Buenos Aires.

No se descarta que en vistas a ese escenario, Bullrich y Milei desembarquen en el Conurbano bonaerense en los próximos días. Bajo el ala de su aliado, Diego Valenzuela, se barajan opciones para la presentación: una es La Plata, la otra, en otro distrito que conduce el peronismo, como lo es su bastión electoral La Matanza.

Desde el equipo de Valenzuela sostuvieron a Diagonales que “no hay información de nada concreto en el municipio de Tres de Febrero”, liderado por el economista, historiador y presentador televisivo, aliado de LLA. “Sabemos que se barajan otros distritos”, informaron a este medio.

La organización del acto correrá por cuenta del bullrichismo y también de LLA. Bullrich decidió no romper toda la influencia que le queda en el PRO, y solo se desmembró su facción en la Provincia de Buenos Aires. Todavía no se puede dar el lujo de arrancar desde cero en el equipo de Milei.