Miguel Blanco es el titular de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), el organismo al que el Gobierno le encargó auditar los gastos de las Universidades Públicas. En las últimas horas, el funcionario tuvo un "salto a la fama" cuando aseguró que no puede llegar a fin de mes con un sueldo bruto de $3.200.000. 

“Estoy aportando todos los meses parte de mis ahorros para desempeñar esto porque por supuesto lo que cobro en Estado no me alcanza”, lanzó en una entrevista radial.

¿No le alcanza un salario de 3.200.000 pesos?, preguntó incrédulo el periodista. “No, no me alcanza porque tengo una hija en la facultad, tengo una hija en el colegio primario, tengo expensas, pago luz, pago electricidad y pago impuesto inmobiliario en la provincia de Buenos Aires que se ha duplicado”, lanzó en un intento por criticar a la gestión de Axel Kicillof aunque olvidó mencionar los tarifazos del Gobierno nacional. 

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Además, en otro intento por justificarse, aclaró que el monto superior a los 3 millones era de salario bruto y que en neto es de $ 2.900.000. 

Mientras tanto, los salarios de muchos docentes universitarios que no son titulares ni adjuntos de cátedra no llegan siquiera a los $200.000. 

“Pero el docente docente tiene otras actividades”, justificó Blanco aunque para empatar su sueldo un docente universitario debería tener más de diez trabajos similares. 

Mientras tanto, las Universidades exigen que se respete la autonomía universitaria y se respete la Ley de Educación Superior  (Ley 24.521) cuyo artículo 59 bis establece que “el control administrativo externo” de las universidades estatales “es competencia directa e indelegable de la Auditoría General de la Nación (AGN)”, que “dispondrá de un área específica (…) para llevar a cabo esta tarea".