Jubilados: La principal variable de ajuste del Gobierno
Milei celebra que en apenas dos meses de gestión alcanzó el superávit financiero, lo que no dice es que ello se logró a costa de licuar principalmente los ingresos de adultos mayores
En los dos meses meses de gestión de Javier Milei, jubilados y pensionados de la Argentina se convirtieron en la principal variable de ajuste del Gobierno. Durante ese tiempo, sus ingresos perdieron hasta un 28% de su poder adquisitivo.
En enero el presupuesto para jubilaciones y pensiones contributivas se redujo en un total de $885.074 millones. Según informes del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) y del Centro de Economía Política (CEPA), dicho recorte representa una baja interanual del gasto de casi el 33%. De esta manera, la licuación de los haberes jubilatorios fue el motivo mayor del superávit financiero que celebra el presidente Javier Milei.
El ajuste a los jubilados es tal que incluso un ex asesor del jefe de Estado, salió al cruce del mandatario. “Acabo de cobrar mi jubilación de Febrero. Es el mismo monto que el de Enero y que el de Diciembre (descontando aguinaldo). Me parece que me están licuando la jubilación...con razón dicen que tienen superávit fiscal. ¿Es esa la manera de reducir el gasto público que recomienda el manual de Economía Austríaca?” cuestionó en sus redes sociales el economista, Carlos Rodríguez.
Mientras que las jubilaciones se mantuvieron en el mismo valor, entre diciembre y enero la inflación superó el 50%. Un lapidario informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), basado en datos del Indec, demuestra que la jubilación mínima de enero se ubica cerca del menor valor que tuvo en los últimos 30 años.
Mientras tanto, a los aumentos en transporte, alimentos, servicios, entre otros uno de los incrementos que más afecta a los jubilados es el que se produce en los medicamentos. En enero, los más usados por los jubilados sufrieron alzas de hasta el 83%.
Con el presunto objetivo de combatir la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados, el Gobierno dispuso un aumento del 27,18% en sus haberes a partir de marzo. De esta manera, el haber mínimo pasará de $105.713 a $134.446. Además, el ministro de Economía Luis Caputo confirmó que el bono que perciben aquellos que cobran una jubilación mínima será de $70 mil.
De esta forma, el mes que viene, el íngreso mínimo de un jubilado en Argentina será de $204 mil. Sin embargo, si se mantienen las proyecciones de inflación para febrero que rondan entre un 15 y un 18%, las jubilaciones podrían registrar una caída real interanual de hasta el 31,8%.
En tanto, en marzo la caída real interanual del haber mínimo sería del 33,8%, con una inflación proyectada del 15,3%. Es decir el aumento otorgado no alcanzaría a paliar los efectos de la inflación.
“La estrategia de equilibrar las cuentas públicas en base a la licuación de jubilaciones es muy endeble. Por un lado, porque tiene un impacto muy regresivo y genera tensiones políticas. Por otro, porque aumenta las demandas judiciales contra la ANSES debido a que la justicia previsional no tolera la licuación de jubilaciones", señala el informe de IDESA. "No es la primera vez que el ajuste fiscal se sostiene licuando jubilaciones, pero nunca con este nivel de intensidad”, concluye el relevamiento.