A pesar de los desmentidos categóricos de parte del equipo de Javier Milei, sobre la información trascendida en las últimas horas, la sucesión de hechos dentro de La Libertad Avanza (LLA) los obliga a confrontar públicamente con la realidad de su espacio: se le están yendo los jugadores, al calor del “Pacto de Acassuso” en el que el candidato ultraconservador cerró filas con Mauricio Macri y Patricia Bullrich.

El grito en el cielo que había puesto el exviceministro de Economía de Carlos Menem, Carlos Rodríguez, sobre el cerramiento dentro del equipo que comanda Milei, que según él, sólo habilitaba a la posible Canciller Diana Mondino y al hipotético ministro de Interior Guillermo Francos a expresarse en nombre del espacio, preanunciabanlo que en otros ámbitos también se cocinaba.

Además del malestar de los referentes económicos de LLA por la posible irrupción de exfuncionarios del creador del PRO en la estructura de gobierno mileista, once integrantes del nuevo partido, entre los que se encuentran senadores y diputados nacionales, provinciales y parlamentarios del Mercosur rompieron con el elenco “libertario” y conformarán bloques propios. En el entorno de Milei se muestran sorprendidos.

"Respetamos la decisión de nuestro candidato a Presidente a formar un acuerdo con Juntos por el Cambio, pero NO podemos acompañar este cambio de rumbo solo con fines electorales", advirtieron. “Moral e ideológicamente (Macri) es nuestro límite”, resaltaron en la misiva".

También matizaron lo que sería su partida definitiva y cómo se realizaría. “Vamos a seguir trabajando para que las ideas de la libertad crezcan en cada rincón de la Patria”, aseguraban. Y a continuación expresaban que formarían parte de los “bloques políticos en todas las legislaturas, en todas las ciudades, y en el Parlamento argentino con este objetivo, bajo la bandera del espacio que nos puso en este lugar”.

De los miembros electos para el Congreso que manifestaron su alejamiento, hay una senadora nacional por San Juan, Ivana Arrascaeta, que debuta en la política, y que ahora deja al conjunto ultraliberal con seis bancas en la Cámara Alta.

Por el lado de los tres diputados nacionales electos, se encuentran: el concejal de Corrientes de Unión Celeste y Blanco, Lisandro Almirón; el empresario textil formoseño Gerardo González; y, por el Partido Fe, que fundó el titular del gremio de trabajadores rurales Gerónimo “Momo” Benegas de la UATRE, Pablo Ansaloni.

Este último diputado ya había pasado por las filas de CAMBIEMOS en 2017 y en 2019 se integró al massismo. Ansaloni es apadrinado por el armador nacional mileista “El Chino” Carlos Kikuchi.

En 2021, Ansaloni había estado en el ojo de la tormenta por sus comentarios antisemitas: “Estamos más unidos que nunca, nadie nos va a romper a nosotros, y nadie que no tenga que ver con nuestra provincia, porque son como los judíos, por ahí no tienen patria, no saben dónde están o a quiénes representan. Yo sí sé a quiénes represento: represento a la seccional 185 de Colón, provincia de Buenos Aires”. Esto le valió el repudio de la comunidad judía, en particular de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA).

González había sido denunciado en septiembre por “acoso sexual” y “laboral” por parte de una fiscal de mesa partidaria, Leyla Naser. La denunciante aseguró haber recibido burlas y amenazas cuando contó el hecho a otros dirigentes del espacio de LLA.

Los parlamentarios del Mercosur firmantes de la carta son: Fabiana Martin (Corrientes), Fabricio Cascino (Neuquén), Mario Nallar (Jujuy) y David Ocaña (San Luis), y los legisladores provinciales Gladys Liliana Salinas (Entre Ríos), Carlos Alberto Damasco (Entre Ríos) y Julia Esther Calleros Arrecous (Entre Ríos).

Antes que sus colegas de bancada, la semana pasada, la diputada provincial electa de Entre Ríos por LLA, Liliana Salinas, había anunciado que formará un bloque con el Partido Conservador Popular por fuera de la estructura de Milei.

Se espera que los coletazos internos en el ala “libertaria” continúen en las próximas jornadas.