Motosierra a las universidades: Pettovello frena la apertura de cinco instituciones votadas por el Congreso
Se trata de las universidades de Ezeiza, Pilar, del Delta, de Rio Tercero y Madres de Plaza de Mayo, que fueron aprobadas en octubre por ambas Cámaras con votos peronistas, radicales y parte del PRO. Esto se suma al ajustazo sobre las universidades públicas, que funcionan con un presupuesto aprobado en 2022 y podrían cerrar sus puertas en el primer semestre si no hay actualizaciones.
Lo que no iban a hacer en campaña, en gestión es una dolorosa realidad. Aunque el Javier Milei candidato afirmó una y otra vez que no restringiría la educación pública, lo cierto es que los ataques del Javier Milei Presidente castigan a todos los niveles del sistema educativo nacional. A la negativa de un aumento salarial para docentes de primaria y secundaria, y la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente y el Fondo Compensador, se suma también un fuerte ajuste sobre la educación superior.
Las universidades nacionales ya advirtieron la semana pasada sobre la situación crítica que atraviesan. El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que nuclea 71 universidades públicas de todo el país, emitió un comunicado en el que alertó que la falta de actualización presupuestaria amenaza el pleno funcionamiento de las instituciones. La propia Universidad de Buenos Aires emitió una Resolución de su Consejo Directivo en la que expuso la durísima situación presupuestaria, y algunas de sus facultades ya avisaron que no cuentan con fondos suficientes para funcionar más allá del primer semestre.
Resulta que el presupuesto universitario actual es una partida del Presupuesto Nacional del 2023, prorrogado para este 2024, y que fuera aprobado por el Congreso en septiembre del 2022 cuando la previsión inflacionaria para el año pasado era del 60%. Con la disparada de los precios del año pasado, brutalmente profundizada por la devaluación del 54% ordenada por Milei y Caputo en diciembre, los recursos asignados a la educación superior pública quedaron terriblemente rezagados por la licuadora libertaria.
A esto se sumó un nuevo ataque a la educación universitaria, que se conoció este martes a partir de una Resolución del Ministerio de Capital Humano que ordenó la suspensión del proceso de apertura de cinco universidades que habían sido aprobadas en octubre por ambas cámaras del Congreso. Tres de esas nuevas casa de estudios correspondían al conurbano bonaerense, una a Córdoba y otra a la CABA.
Se trata de las universidades de Ezeiza, Pilar, del Delta, de Rio Tercero y Madres de Plaza de Mayo, que el año pasado lograron unificar votos peronistas, radicales y hasta de legisladores del PRO como Luis Juez, o la esposa de Juan Schiaretti y senadora del bloque Unidad Federal, la cordobesa Alejandra Vigo. El amplio apoyo que suscitó la iniciativa presentada por el PJ hace algunos meses en el Congreso no impidió que el Ejecutivo frenara el proceso de creación de las universidades aprobado por ley y que ya había dado sus primeros pasos.
Para crear una universidad nacional, una vez sancionada la ley en el Congreso, el proceso continúa con la designación de Rectores Organizadores que se encargan del armado y puesta en marcha de la estructura de la institución. La Resolución 2024-45-APN-MCH dejó sin efecto las resoluciones previas del ex Ministerio de Educación por la que se habían designado esos cargos, y determinó “establecer el proceso de revisión de la creación e inicio de actividades académicas de las nuevas instituciones universitarias nacionales con el fin de determinar el efectivo cumplimiento del procedimiento para su creación y funcionamiento objetivo”.
En sus considerandos, la resolución que lleva la firma de Sandra Pettovello plantea “necesaria adopción de medidas tendientes a revisar el inicio de actividades académicas de las Casa de Altos Estudios antes mencionadas”, con el objetivo de “determinar si el procedimiento administrativo exigido por la Ley de Educación Superior para crear nuevas universidades fue debidamente cumplido”. Además, la revisión que ahora pretende encarar la ministra busca determinar si se encuentran debidamente documentadas “la pertinencia, oportunidad y la previsión del crédito presupuestario correspondiente, en base a un estudio de factibilidad”.
En concreto, la disposición de la ministra significa un congelamiento del proceso de apertura de universidades que llevarían la educación pública superior a distritos que hoy carecen de esa oferta. Los partidos de San Fernando, Tigre, Escobar, Ezeiza y Pilar en el conurbano bonaerense, y la ciudad de Río Tercero en Córdoba deberán seguir esperando.
No sorprende, sin embargo, esta decisión con la que el Gobierno Nacional vuelve a descargar el ajuste sobre el sistema educativo. Milei y Caputo parecen decididos a cortar todos los recursos posibles a la educación pública, restringiendo el derecho de acceso a la misma para millones de argentinos y argentinas. Terminó la campaña, empezó el gobierno, y el experimento libertario ya muestra su verdadero rostro con toda crueldad.