Luego de la reunión de Santiago Cafiero con los jefes de Gabinete de CABA y la provincia de Buenos Aires, el gobierno nacional avanza en su intención de retomar la coordinación con la gestión de Horacio Rodríguez Larreta para llevar adelante una política unificada en todo el AMBA. Con ese objetivo en la mira, la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, se reunió hoy con el secretario de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro y el tiltular de Transporte y Obras Públicas, Juan José Méndez, para redefinir y reforzar los operativos de control de circulación de personas.

Si bien la relación entre la administración nacional y la porteña fue haciéndose cada vez más tensa, habían logrado mantener una misma política sanitaria para le región metropolitana hasta la decisión de Alberto Fernández de suspender las clases presenciales de forma temporal. A partir de ese momento, se materializó el quiebre y las restricciones fueron distintas de un lado y el otro de la General Paz. 

Sin embargo, y a pesar de la polémica por la presencialidad en el aula no se ha resuelto, Nación quiere volver a coordinar con el gobierno porteño especialmente para aumentar los controles y que se cumplan las disposiciones dispuestas por el Ejecutivo respecto de las restricciones horarias y los protocolos de funcionamiento de las actividades habilitadas. El encuentro entre Frederic y D'Alessandro fue el puntapié  fue el puntapié para intensificar dichos controles.

En las próximas 48 horas, el presidente Alberto Fernández terminará de definir las nuevas restricciones sanitarias que comenzarán a regir la semana que viene.  Por ello, los titulares de las carteras de seguridad delinearon acciones conjuntas para reforzar los operativos. 

Los funcionarios acordaron la unificación de las líneas de denuncias 911 y 134 por incumplimiento del DNU, intensificar los controles de los permisos para el personal esencial y exceptuado en transporte público y privado, reforzar los operativos policiales en los ingresos y centros de transbordo de la Ciudad, y eventualmente establecer un cierre de algunos accesos a la Ciudad de Buenos Aires, puntualizando sobre el horario de nocturnidad.

Como parte de la nueva etapa de aislamiento, también habrá controles ante las aglomeraciones que se registraron en los paseos comerciales y ferias tanto de la Ciudad como del conurbano bonaerense. La mirada también estará puesta en los locales gastronómicos, especialmente en aquellos que trabajan en espacios cerrados.