La reunión entre la Confederación General del Trabajo (CGT), el gobierno nacional y empresarios de ayer ya tiene un nuevo capítulo. Ante la negativa de Raúl Zylbersztein, presidente de la entidad que nuclea a un importante grupo de pymes, de sentarse a negociar, y quien afirmó que no se puede aceptar un acuerdo derivado de una mesa de diálogo de la cual ni siquiera pudieron participar, juan Carlos Schmid salió al cruce.

"Si no cumplen, va a haber problemas", dijo el miembro del triunvirato un día después de la reunión. La idea es negociar sector por sector y lo que se firmó ayer fue un acuerdo político, con la disposición de empresarios de poner como piso en las negociaciones un bono de $2000.

Schmid agregó a Radio La Red que "los empresarios más importantes del país se comprometieron a abrir esta negociación, que tiene como referencia estos 2.000 pesos. Las obligaciones siempre fueron relativas en Argentina, somos un país donde muchas veces se violan los decretos o no se respetan las leyes. Aspiramos a que esto se discuta en cada uno de los lugares donde se ha plasmado esta firma".

Desde la Cámara que nuclea las PyMEs mostraron su descontento y contaron que "el Ejecutivo hizo oídos sordos a los reclamos de las pequeñas y medianas empresas y eso quedó más que claro porque ni siquiera convocó a los representantes del sector para que puedan expresarse".

Sobre la importancia del bono, Schimd dijo que "va a volcar un importante circulante al consumo interno, de una economía que está estancada", por lo que defendió la suma pactada en la mesa de diálogo.

Resta esperar cómo continuarán las negociaciones y si los empresarios aceptan sentarse a negociar con los sindicalistas. Algunos sectores confirmaron ayer que lo harán, mientras que las palabras de Zylbersztein dejan dudas. ¿Se contentará a los trabajadores con el bono o habrá paro?