Renunció Juan Ameri, el diputado del escándalo
La Cámara Baja del Congreso aceptó la dimisión del legislador que ayer protagonizó un revuelo en plena sesión virtual
Se conoció en las últimas horas la renuncia a su banca por parte de Juan Ameri, el diputado salteño que ayer protagonizó un escándalo nacional al tener un acercamiento sexual con una mujer mientras participaba de una sesión virtual del Congreso. La escena quedó grabada en la misma transmisión de la jornada legislativa a los ojos del conjunto de legisladores, y provocó un revuelo inmediato a nivel nacional, que derivó en su renuncia.
Fue por amplia mayoría que, esta madrugada, la Cámara de Diputados aceptó casi por unanimidad la dimisión de Ameri a su cargo, tras una jornada que tuvo repercusión mediática inmediata al conocerse las imágenes de la escena sexual del legislador. Fue el presidente de la Cámara Baja, Sergio Massa, quien debió salir al instante al aclarar el posicionamiento del Frente de Todos y del Congreso, sobre el papelón ocurrido.
El diputado salteño del oficialismo había sido suspendido ayer a las 18 tras conocerse el episodio y se decidió conformar una comisión para juzgar su accionar en un plazo de 60 días, aunque la presentación de la renuncia por parte de Ameri precipitó los hechos.
La votación contó con el respaldo de 224 diputados, el rechazo de uno (Alfredo Schiavoni-PRO) y la abstención de tres (Héctor Flores-PRO, Fernando Iglesias -PRO y Javier Campos-Coalición Cívica).
“Consciente de la responsabilidad que mi cargo representa, pongo a disposición mi renuncia como diputado nacional, y seguiré trabajando por mi querida provincia de Salta y para que Argentina se ponga de pie”, manifestó Ameri en su carta de renuncia. “No fue de ningún modo mi intención faltar el respeto a esta Honorable Cámara, a mis pares diputados y diputadas, ni al pueblo salteño que me eligió”, se disculpó el ahora ex legislador.
“Nunca viví lo que viví en el día de hoy, me conmocionó mucho lo que pasó. No podemos sólo aceptar una renuncia, sino que ésto nos tiene que convocar a una introspección, a una suerte de código ético”, señaló la diputada del interbloque federal, Graciela Caamaño.