Un “unicornio” en la Embajada: Otro miembro del clan Oxenford en un Gobierno de derecha

Lejos de buscar a un diplomático de carrera, o algún funcionario probado en funciones, el gobierno de Javier Milei optó por seguir la consigna de su comandante de milicias digitales “libertarios” Daniel Parisini “El Gordo Dan”: llenar el Estado de amigos, con “afinidad ideológica”.

La “purga” en la Cancillería se propagó a la embajada fundamental para el Poder Ejecutivo, como lo es la de los Estados Unidos. Y más con el resultado electoral que catapultó a Donald Trump como nuevo presidente a partir del 20 de enero.

Desde los pasillos de la Casa Rosada se encargan de aclarar que será el propio Milei quien comande la relación con el nuevo jefe de Estado norteamericano, y que el ministro de Economía Luis “Toto” Caputo mantendrá las relaciones comerciales de la Argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y con Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Pero la designación de Alejandro Carlos Francisco Oxenford no pasa desapercibida. El empresario tendrá un papel más que importante para acercarle a Milei algunos de los principales estandartes del establishment mundial que vienen de la mano del nuevo gobierno republicano elegido la semana pasada.

LA NUEVA CARA DE “LA EMBAJADA”

Oxenford, de 55 años, es el fundador de dos de los “unicornios” argentinos valuados en más de mil millones de dólares: las Fintech OLX y LetGo.

“Alec” creció en el barrio porteño de Palermo. Durante su infancia en la década de 1970 vivió en el campo de la familia y la casa de su abuela materna, en el barrio de La Lucila, partido de Vicente López. Con un pasar holgado, hizo la escuela primaria y la secundaria en el Colegio San Andrés de Olivos.

Cultor de un perfil público en el que muestra su devoción por las obras de arte y los paisajes más hermosos del mundo, a los que suele concurrir con frecuencia, este coleccionista que estuvo al frente de la fundación ArteBa siempre se mostró en favor de las opciones políticas más conservadoras. Oxenford fue convocado por Eduardo Costantini para formar parte de la Asociación de Amigos del MALBA, el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, inaugurado en 2001.

El empresario también fundó en 1999 de DeRemate.com, mismo año en que su colega Marcos Galperin creó Mercado Libre, se ha mantenido siempre en posturas favorables a Mauricio Macri y desde hace unos meses se sumó a “las fuerzas del Cielo”. Antes de asumir funciones diplomáticas, formó parte del Consejo de Asesores Económico “libertarios” que encabeza el físico y coequiper intelectual de Milei, Demian Reidel.

Anteriormente, el emprendedor, que vendió el Marketplace de OLX a la firma sudafricana Naspers, publicó en sus cuentas que votaría a favor de Macri en las elecciones presidenciales de 2019 porque “no es ético apoyar a los enemigos declarados de la narco- dictadura asesina castro- chavista”. Todo un preludio de la visión de La Libertad Avanza en el plano internacional.

En esa época, “Alec”, que cuenta con un MBA en Harvard y estudió administración de empresas en la Universidad Católica Argentina (UCA), se sumó al grupo de WhatsApp “Nuestra Voz”, que reunía a 200 de los principales empresarios nacionales en su cruzada contra la vuelta del peronismo al poder.

Aunque competía directamente con la firma de Galperín, la relación entre ambos popes de los servicios financieros y de comercio digital se fortaleció cuando el magnate más rico de nuestro país le compró a Oxenford DeRemate.com .

También hubo señales de “solidaridad” entre ambos cuando Galperín se manifestó en contra de los sindicatos y de las “duras leyes” laborales que rigen en la Argentina. Los dos encontraron encolumnados detrás de las filas Cambiemistas, y fiscalizaron para el espacio amarillo.

Otro punto en común es que ninguno de estos antiguos competidores de la industria de los .com viven en el país. Mientras que ya es más conocido que Galperin lo hace en Uruguay desde que comenzó el gobierno del Frente de Todos, Oxenford vive en Brasil hace años. Allí fue la cara visible del fondo Alpha Capital, de la mano de su socio Rafael Stenhauser, que luego se fusionó con la firma local Semantix.

Cuando el gobierno de Milei sacó los tanques a la calle y desplegó los aviones de las fuerzas militares el último 9 de julio, “Alec” no dudó en mostrarse orgulloso por el discurso gubernamental. “Celebrar la independencia nacional representa el inicio de un nuevo camino, une al pueblo y fortalece los valores nacionales”, aseguraba.

En una entrevista que le concedió a Bloomberg, el empresario destacó que con el gobierno de LLA se produce “la mejor oportunidad en mucho tiempo de dar vuelta un siglo de decadencia”. “Se han confluido muchas cosas importantes para que esto sea posible, y ojalá no nos frustremos una vez más con un fracaso. La sociedad argentina entendió y se cansó de un sistema adolescente y autodestructivo, que funcionó desde 1930 en Argentina, se profundizó en 1945 y se volvió cada vez más perverso en las décadas siguientes”, aseguró.

Oxendord fue una pieza clave para acercarle al Presidente una figura de renombre del mundo empresarial a nivel planetario. Gracias a su gestión, Milei pudo entrevistarse dos veces en la Casa Rosada con Peter Thiel, cofundador de PayPal, junto con Elon Musk, y exdirector ejecutivo de la firma. Fueron dos reuniones, una en febrero de este año y la segunda, en mayo. Sin embargo, este último encuentro no figura en los registros oficiales.

Thiel es un capitalista de riesgo que se convirtió en un actor central “silencioso” para la campaña de Donald Trump, que llegó al poder por segunda vez. De hecho, el ahora administrador de Founders Fund, de 56 años, es el “mecenas” del próximo vicepresidente Vicent James Vance. Fue el impulsor del ascenso meteórico de Vance, que comenzó con su candidatura como senador en 2022, durante la campaña más cara de la historia para un congresista norteamericano.

UNA FAMILIA PATRICIA QUE DA QUE HABLAR

Otro de los aportantes de Mauricio Macri en la campaña de 2015 es el padre de “Alec” Alejandro Pablo Oxenford. El dueño de la empresa Sullair, que produce maquinarias de movimiento de suelo, energía, plataformas de altura y unidades compresoras, aportó 1.5 millones de pesos para el candidato de CAMBIEMOS que vencería a Daniel Scioli en el balotaje.

El papá del nuevo “Embajador Extraordinario y Plenipotenciario ante los Estados Unidos de América” fue denunciado por persecución antisindical y por la precarización laboral dentro de la empresa. Cabe señalar que Sullair tuvo su primer delegado en planta en 2012 pero la firma no reconoció al sindicato como un actor legítimo para las negociaciones laborales.

El linaje de esta familia patricia tradicional también se remonta a la trayectoria del abuelo del referente de los “unicornios” argentinos. El empresario e ingeniero Eduardo Valentín Oxenford presidió la Fábrica Argentina de Alpargatas, e integrante de la comitiva de YPF. Su actividad patronal lo colocó en los lugares de mayor preponderancia: fue presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) intervenida, también cofundador del Instituto para el Desarrollo de Empresarios en la Argentina (IDEA), y vicepresidente primero del Consejo Empresario Argentino.

Además fue funcionario de la última dictadura militar. Entre el 29 de marzo de 1981 y el 20 de agosto de ese año, fue ministro de Industria y Minería, bajo la gestión del presidente de facto Roberto Eduardo Viola.

La injerencia de Eduardo hizo que el Gobierno debiera interceder para dar con el paradero del tío de “Alec”. Su tío Eduardo Tomás Oxenford, de 26 años, había sido secuestrado y asesinado en noviembre de 1978  por una banda de policías. Por esta circunstancia, la familia de Alejandro se mudó primero a Brasil y luego a Uruguay.

Del lado de la raíz familiar por su madre, María Cristina “Kitty” Lahusen, el flamante embajador también tiene tela para cortar. El linaje alemán de la familia tiene una fuerte tradición en la Patagonia con el negocio de lanas. Lo mismo sucede con su vinculación con el nazismo que escapaba del país bávaro tras la derrota en la Segunda Guerra Mundial.

Si bien se trataban de alemanes locales de la Argentina, los focos apuntan sobre los Lahusen. Las sospechas comenzaron con la compra de la vasta estancia San Ramón, ubicada a 35 km de Bariloche, a metros de la ruta 23, en la década de 1940.

Se cree que en el periodo de primera posguerra, la casona que perteneció al principado alemán de Schauburg Lippe. En 1914 albergó a Wilhelm Canaris y a los tripulantes del buque alemán Dresden, sobrevivientes del combate con la flota inglesa en las islas Malvinas durante la Primera Guerra Mundial. La hipótesis generalizada es que la familia Lahusen habría albergado en la Posguerra a los jerarcas nazis que se marcharon de Europa, tras la victoria de los Aliados.

Si el pliego de “Alec” se aprueba en la Comisión de Acuerdos del Senado, que encabeza la larretista Guadalupe Tagliaferri, y tiene la misma suerte en el plenario de los senadores en el recinto, la historia determinará que un Oxenford-Lahusen termine en la embajada estadounidense.