Conurbano: La tasa de homicidios dolosos se redujo casi a la mitad en los últimos 12 años
La tasa de homicidios dolosos se redujo de 8,5 cada 100.000 habitantes en 2009 a 4,5 en 2021 de acuerdo a un informe del Observatorio de Políticas de Seguridad (OPS) de la Universidad de La Plata, basado en estadísticos de la Procuración General bonaerense.
A contramano de los discursos que vinculan al conurbano bonaerense y a la Provincia de Buenos Aires en su conjunto con el delito y la inseguridad, un informe de la Universidad de La Plata en base a datos oficiales da cuenta de una reducción sistemática y sostenida en el tiempo de los homicidios dolosos durante los últimos doce años.
El hallazgo estadístico corresponde al cuarto informe que realizaron investigadoras del Observatorio de Políticas de Seguridad (OPS), radicado en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, al que accedió Diagonales. Da cuenta de que la tasa de homicidios dolosos se redujo de 8,5 cada 100.000 habitantes en 2009 a 4,5 en 2021. Una tendencia decreciente que se constata en los informes estadísticos de la Procuración General bonaerense respecto de las “investigaciones penales preparatorias sobre homicidios” en la Provincia, que se redujeron en un 40 por ciento durante ese mismo período.
“El informe demuestra que la tendencia descendente en los homicidios dolosos se presenta en todos los departamentos judiciales del conurbano bonaerense y van a contramano de algunos discursos muy asentados en la opinión pública respecto del incremento de los homicidios y la violencia letal en estos territorios estigmatizados”, explicó a este medio la doctora en sociología Angela Oyhandy, directora del OPS.
Este último informe del OPS se centra específicamente en el conurbano, lo que permitió “identificar que la reducción estadística de los homicidios dolosos es muy significativa y se reparte entre todos los distritos”, puntualizó Oyhandy. “Lo cual nos lleva a discutir la relación inmediata que se produce discursivamente entre pobreza, conurbano y delito”, agregó.
En algunos municipios en particular, como La Matanza, se paso de un índice de 11,1 homicidios dolosos por cada mil habitantes en 2009 a 5,2 en 2021. En San Isidro, se redujo de 12,3 a 2,6, y en San Martín, de 9,4 a 5,5 (ver gráfico)
Oyhandy aclaró que de todos modos “el conurbano sigue siendo donde más concentran estos delitos violentos en toda la Provincia”, dado que es donde se concentra la mayor densidad poblacional y donde se cruzan distintos fenómenos socioeconómicos específicos. “Pero la baja de los homicidios se puede comprobar con total claridad y contrasta con lo que está sucediendo en otros conglomerados, como Rosario y Santa Fe, lo que dispara nuevas preguntas sobre el fenómeno. Por eso remarcamos la necesidad de avanzar en la realización de nuevos estudios cualitativos, en una mayor investigación y políticas públicas específicas”, advirtió.
Otro de los puntos centrales del informe indica que también se redujo la participación de niños y adolescentes en los delitos violentos: constata que las “investigaciones penales preparatorias” iniciadas en el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil se redujo entre 2009 y 2021 tanto en términos absolutos como en relación al total de las investigaciones penales iniciadas. Mientras en 2009, representaban el 4,3 por ciento del total, en 2021 descendieron al 2,1.
Esa información pone en tela de juicio algunos discursos que intentan avalar la baja de la edad de imputabilidad, a la que adhiere, entre otros, el propio ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni.
“El descenso de la participación de menores de 18 años en los homicidios dolosos también se constata y es correlativo en un descenso en robos, violaciones a la ley de estupefacientes, amenazas y otros delitos semejantes”, agregó Oyhandy.
Respecto de otros delitos, como los robos, tuvieron más denuncias en 2021 que en 2020, año que tocó su punto más bajo por la pandemia, pero las investigadoras constataron que todavía no recuperó los guarismos pre-pandémicos. También bajaron las denuncias por robos agravados, aunque en ese punto precisaron que “hace falta seguir profundizando en otros informes estadísticos”, para completar el panorama.
En el estudio participaron las investigadoras Paz Cabral, Brunela Germán, Constanza Bassallo, Natalia Eva Buzzo, Agustina Chielli, Agustina Hartwig, Lourdes Irigoin y Agustina Lollini, además de Angela Oyhandy.