Con el clamor de intendentes peronistas del Conurbano y del interior bonaerense, toma vuelo la candidatura del lomense Martín Insaurralde para competirle a María Eugenia Vidal en las próximas elecciones. El trabajo de contención, diálogos y compensaciones que tejió el lomense, en todas las secciones electorales de la Provincia, comienza a mostrar sus frutos. 

Es que, en los últimos 4 años, Insaurralde se mostró amplio y generoso con todos: ex candidatos randazzistas que se animaron -aunque sin demasiado éxito- a jugar contra CFK, jefes comunales históricos del peronismo que habían perdido su brillo en tiempos de kirchnerismo, y nuevos liderazgos que nacieron al calor de la "renovación" del PJ bonaerense que inició Gustavo Menéndez. A base de alianzas y recompensas, el lomense se construyó como el hombre fuerte del PJ en la Legislatura bonaerense y acomodó la red de la Defensoría del Pueblo bonaerense en los municipios. Así se consolidó  su figura como el opositor "dialoguista" que se reunía con Federico Salvai (Cambiemos), y también se hicieron cada vez más frecuentes las conversaciones con Máximo Kirchner (Unidad Ciudadana).

Sin embargo, la llegada del año electoral y la amenaza del adelantamiento de las elecciones que dejó sonar el vidalismo aceleraron los tiempos, e Insaurralde abandonó los meses de silencio y reclusión en la gestión de Lomas de Zamora. El operativo clamor comenzó a principios de 2019 con el respaldo de los "ex randazzistas" de la Primera, Gabriel Katopodis (San Martín) y Juan Zabaleta (Hurlingham), y continuó con los peronistas del interior Hugo Corvatta (Saavedra) y Alejandro Acerbo (Daireaux), referentes de la 6ta y 7ma sección, respectivamente. 

El apoyo más reciente vino de parte del alcalde de la Tercera Mariano Cascallares (Almirante Brown) quien expresó su respaldo al lomense  y destacó que “Martín es el dirigente que mejor puede representarnos a los intendentes en la próxima elección bonaerense”.  En la misma línea se manifestó el jefe comunal de Ramallo, Mauro Poletti, (2da sección) quien también expresó su apoyo y dijo que “es el turno de que un dirigente de probada experiencia territorial y conocimiento de la Provincia encabece un proyecto de unidad del peronismo para enfrentar a Cambiemos”.  

La posible candidatura de Insaurralde a Gobernador continuará sumando adeptos en las próximas semanas, con algunos aliados de peso como Julio Pereyra y Juan Pablo de Jesús. Sin embargo,  entre los intendentes kirchneristas reina el silencio. Ni el pedido de pista de Axel Kicillof, ni el clamor de Insaurralde movieron el avispero en los distritos fuertes que mantiene el kirchnerismo en el Conurbano. Incluso los matanceros Verónica Magario y Fernando Espinoza, que habían asomado al escenario provincial, prefieren esperar a ver cómo se acomodan las cosas. El ex intendente del PJ podría volver a su terrunio por otro mandato como intendentes y la mujer fuerte de la Tercera posicionarse en la Nación.