La gobernadora María Eugenia Vidal comenzó su gestión asegurando que iba a realizar una verdadera transformación en la Policía de la Provincia, lo que tendría como principal objetivo terminar con las mafias y la corrupción existentes en el sistema. En ese camino en el que incursiona sus primeros pasos, es que decidió darle el manejo de la caja de la Policía Bonaerense a un civil. 

El ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo, será el encargado de firmar este miércoles una resolución en la cual  la Policía Bonaerense perderá el manejo de la caja la Superintendencia de Coordinación Administrativa será suprimida y sus funciones quedarán a cargo de un civil, Ignacio Greco.

Dicha medida fue tomada luego de que se registraran una serie de irregularidades que se encontraron en el manejo de los fondos en estos últimos meses. 

Toda decisión política tiene consecuencias y algunas de ellas son que la Policía dejará de manejar la suma de 500 millones de pesos anuales y unos 200 efectivos que hasta ahora desempeñaban funciones en la oficina deberán salir a la calle.

De esta manera, el actual subsecretario Legal, Técnico y Administrativo de la cartera que dirige Ritondo, Ignacio Greco será el responsable de manejar la polémica caja de la bonaerense.

"Se trata de un modelo de policía donde la administración y el control estén en manos de civiles. Porque zapatero a su zapato el policía debe estar en la calle. Y quienes sean policías de comando que trabajaban en administración van a retomar sus lugares en la calle porque es donde se los necesita", explicó Ritondo a La Nación.