La única mujer ministra en el gobierno de María Eugenia Vidal siempre se encuentra tambaleando en su cargo y es moneda corriente que haya fuertes versiones respecto a un posible alejamiento de la especialista en salud de Unicef. Un ministerio que tiene serias dificultades para llevar adelante y en el cual ha sufrido fuertes traspies. 

Zulma Ortiz asumió en diciembre de 2015 la responsabilidad de conducir los destinos de la Salud en la provincia de Buenos Aires. Lo hizo sabiendo que no iba a tener una tarea sencilla, por lo que las excusas a esta altura del partido no son un argumento válido para explicar las falencias que tiene su gestión. Intendentes y legisladores -los ajenos y los propios- tienen bajo la lupa la tarea de la funcionaria provincial. Algunos lo dicen a viva voz y otros por lo bajo, pero en definitiva critican su labor. Incluso hoy en conversación con Diagonales, el intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, señaló que "la Salud es por lejos el área más floja" de la gestión de Vidal. 

La funcionaria elegida por Vidal tuvo que enfrentar alejamientos dentro de su equipo de trabajo e incluso ha amagado varias veces ella misma en abandonar su cargo por sentir que ese tipo de situaciones la sobrepasan. Sin embargo, aún hoy después de nueve meses de gestión y de haber atravesado serios conflictos, se sostiene en su puesto. 

Ortiz se ha encargado siempre de desmentir los rumores que circulan en torno a sus renuncias. Versiones que consideró en su momento de "totalmente infundadas". 

En más de una oportunidad ha llegado a nuestros oídos que Vidal ya tendría el reemplazante para el día en que definitivamente la actual titular de la cartera de Salud decida dar un paso al costado y ese nombre es el de un Intendente. Se trata del jefe comunal de San Nicolás, Ismael Passaglia, quien desde diciembre a esta parte se encuentra coqueteando con Cambiemos, aunque no se decide definitivamente por cambiar de color. 

Zulma Ortiz es la ministra que siempre se está por ir. A veces por rumores que circulan en torno a un posible alejamiento por decisión propia. Y otras porque sería la propia Vidal quien buscaría darle a la Salud un perfil más territorial y menos técnico, por lo que en su consideración un Intendente es la persona indicada. Sin embargo, nada de esto ha ocurrido y la ministra continúa con su gestión contra viento y marea. ¿Se sostendrá?