Hace algunos días, la ministra de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Mara Ruiz Malec, participó del anuncio del gobernador Axel Kicillof sobre el pase a planta temporaria de miles de trabajadores estatales. En conversación con Diagonales, destacó el rol del personal y su importancia en el marco de la emergencia sanitaria.  

La ministra señaló que durante la gestión de María Eugenia Vidal se había profundizado la precarización laboral dentro del Estado provincial y expresó una gran preocupación por la informalidad laboral. Además habló sobre la reactivación de la producción, pero de “manera sostenible y equitativa”, y opinó que el proyecto que presentó Esteban Bullrich en el Congreso para bajar el salario de los empleados públicos es “ridículo” y un insulto a los trabajadores.

El Gobierno ha dejado en claro que apunta a la producción como herramienta para reactivar la economía y generar puestos de trabajo, en especial en los últimos discursos tras el acuerdo con los bonistas extranjeros. En ese sentido, Ruiz Malec brindó detalles sobre los programas de asistencia que lleva adelante la Provincia e hizo hincapié en el rol del Estado para afrontar la pandemia y acompañar la actividad productiva. 

¿Con qué realidad se encontraron sobre las formas de contratación de los trabajadores estatales de la Provincia?

-El Gobierno anterior mantuvo una preconcepción de que achicar el Estado era bueno y eficiente para el desarrollo o lo que fuera que pensaban que eran sus objetivos, y actuó en consecuencia como por ejemplo, congelar la planta del Estado. No obstante, después se dieron cuenta que el Estado es necesario y tiene una renovación de personal permanente, porque hay gente que se va o se jubila por ejemplo. Incluso ellos promovieron las jubilaciones de oficio, las apuraron, las apretaron para que se reduzca más la planta y en un momento se dieron cuenta que el Estado era necesario, como por supuesto también el personal para mantener las funciones más básicas del Estado, que eran las únicas que les interesaba mantener. Entonces emprendieron un camino de precarización, en el que aumentó muchísimo la planta de contratación a través de monotributo y si bien se llevaba adelante un pase a planta permanente de aquellos que estaban en planta transitoria, por acuerdo paritario, ese en el último tramo quedó trunco. No se hizo ningún esfuerzo por mejorar la carrera administrativa. En algunos sectores se otorgaron bonificaciones y en otros no, hay un desorden en términos de contratos y salarial muy importante en la provincia de Buenos Aires. Algunos problemas son estructurales y vienen de larga data, pero el tema de las modalidades de contratación se profundizó mucho en los últimos cuatro años. Así que lo que pensamos en de a poquito ir ordenando con la premisa de que el empleado y empleada pública, son muy valiosos. El Estado tiene que tener un sistema de empleo público  acorde con las directivas del trabajo que nosotros creemos como estabilidad, carrera, capacitación, permanencia, en ese estamos trabajando: completar los pases a planta permanente que habían quedado pendientes y empezar a regularizar todas las situaciones. Empezamos primero con los contratos bajo la Ley de Emergencia  pero estamos identificando también otros casos para poder avanzar y que todos estén dentro de lo que establecen las leyes de empleo público. 

 "El gobierno anterior mantuvo una preconcepción de que achicar el Estado era bueno y eficiente, entonces emprendieron una camino de precarización"

En ese marco, ¿cómo han encarado y cómo siguen llevando adelante las paritarias?

-Nosotros a principio de año empezamos a trabajar con la premisa de que el salario público no debía seguir perdiendo. Tomamos la propuesta de Nación de una suma fija, hicimos la convocatoria con estatales y no hubo acuerdo, pero se implementó igual porque era obvio que la situación apremiaba a los trabajadores estatales y en algunos casos significó un aumento de hasta el 10%. También hicimos paritaria con docentes, que pudimos cerrar a tiempo. Y ahora con la pandemia, obviamente pasamos a un escenario bastante distinto. En el sector privado se está discutiendo cuánto se bajan los salarios y se va a haber o no despidos una vez que se terminen las prohibiciones, nosotros en el empleo público estamos buscando por un lado mantener los niveles salariales y estamos trabajando en la estabilidad que hoy aparece como un valor muy importante en el empleo público y que muchos trabajadores no tenían. Sabemos que es muy importante, teniendo en cuenta también la Provincia tiene pocas condiciones financieras pero que haciendo un pequeño esfuerzo fiscal, o no tan pequeño, sabemos que implica una gran tranquilidad para muchos trabajadores. A medida que se vaya recuperando la recaudación y que podamos llevar adelante los proyectos de financiamiento que hoy están trabados en la Legislatura, seguramente podamos volver a sentarnos a discutir de nuevo lo que queda pendiente en materia salarial.

"Estamos trabajando en la estabilidad que hoy aparece como un valor muy importante en el empleo público y que muchos trabajadores no tenían"

Respecto al financiamiento, ¿cómo evalúa el accionar de la semana pasada de Juntos por el Cambio en la Legislatura bonaerense frente al proyecto de Ley de endeudamiento?

-Creo que fue un rol muy irresponsable porque además el gobierno provincial ha concurrido a todas las instancias a las que se lo ha convocado, ha dado todas las explicaciones, presentó los proyectos que quiere financiar con esta autorización, que por ejemplo uno de los más importantes tiene que ver con la seguridad vial. Hoy estamos cuidando la vida frente a una situación que tiene que ver con el Covid-19, pero en circunstancias normales los accidentes son unas de las principales causas de muerte en la Provincia. Es una prioridad de la Provincia mejorar eso, también incluye proyectos de mejoras de infraestructura escolar, y de viviendas cloacas y agua. Fue explicado a qué municipios se apunta, en qué etapas, qué cosas se van a hacer, con lo cual esto de “firmar una carta blanca” o decir que no se sabe en qué se va a gastar el dinero como sostiene la oposición es completamente irreal, falsa y mentirosa. Detrás de ello hay otra intencionalidad que pone en juego la capacidad de la Provincia para atender la demanda de los bonaerenses. Es una actitud muy irresponsable porque no afecta al gobierno provincial, afecta a todos los ciudadanos.

Días atrás presentaron el Programa “Preservar Trabajo”, ¿cómo se va a implementar?

-La idea del Programa es atender a aquellas micro, pequeña y medianas empresas, y a las cooperativas que no pueden acceder al ATP con un esquema similar, un esquema de ayuda económica para complementar el salario de los trabajadores y trabajadoras, o de las socias y socios en el caso de las cooperativas, con un monto que es menor al del ATP. En este caso es un monto de .8.400 pesos por un plazo mínimo de 3 meses. Apuntamos a aquellos que quedaron afuera de las ATP u otros programas de asistencia. Quienes no hayan podido acceder a ello, que sean micro o pequeñas unidades productivas, que obviamente los trabajadores estén declarados, y que sean de las actividades más afectadas por la pandemia, pueden presentarse. Pueden anotarse en la web del Ministerio de Trabajo, en una ficha de preinscripción donde se les pregunta si cuentan con determinada información que deberán presentar en caso de ser seleccionados, se les da un número de trámite y mientras tanto se analiza si cumplen con las condiciones. En caso de que lo hagan, se los notifica para que siguen adelante con el trámite, llenan un nuevo formulario un poco más amplio y en este caso si tienen que presentar la documentación que les exigimos. Si está todo ok, se les deposita el dinero a los trabajadores en una cuenta que les abrimos nosotros en el Banco Provincia para completar el salario. Si llegaran a realizarse más inscripciones de las que contempla el cupo, porque tenemos un cupo presupuestario limitado, haremos una priorización de las actividades más afectadas con un mínimo por municipio para que se vea representada toda a provincia.    

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 ¿Qué sectores o rubros han identificado como los más afectados?

-En general hablamos de todo lo que tienen que ver con entretenimiento, ocio y esparcimiento; todo lo que es servicios como peluquería y estética en la zona del AMBA, que recién ahora en algunas localidades vuelven a estar habilitados; también vamos a tener en cuenta el rubro de gastronomía, que si bien pudo funcionar bajo la modalidad de reparto, se ha visto muy afectado y es uno de los sectores donde hay una merma del empleo; lo mismo con el turismo; lo que es construcción también nos preocupa muchísimo, sabemos que un gran parte de la provincia todavía no está habilitada la construcción privada y eso ha golpeado mucho al rubro; también enseñanza, sobre todo inicial, que por distintos problemas no han podido acceder al ATP; y dentro de la industria, tendremos en cuenta los sectores más afectados como textil y confección, por ejemplo, que si bien tal vez pudieron producir, la demanda es realmente muy acotada y no son exportadores; algunos sectores metalúrgicos también serán contemplados.

"La idea del Programa Preservar Trabajo es atender a aquellas micro, pequeña y medianas empresas, y a las cooperativas que no pudieron acceder al ATP" 

Cuando presentaron el Programa, se reunieron con intendentes de distintas localidades, ¿que preocupaciones le acercaron los jefes comunales?

-Hay dos preocupaciones principales. Por un lado, a nivel territorial el ATP tuvo una cobertura muy amplia pero quizá los intendentes conocen los casos de alguno que no llegó a inscribirse, no supo cómo hacerlo o por algún motivo no fue beneficiado. Por otro lado, hay mucha preocupación por el sector informal que es muy difícil de llegar y regular. Por suerte, para esos casos está el Ingreso Familiar de Emergencia pero  lo cierto es que igual algunas demandas existen y es muy difícil que el Estado reemplace plenamente un ingreso  que uno tenía cotidianamente.

Si bien se prohibieron los despidos, existe una gran informalidad laboral que es difícil de regular y además cerraron empresas y comercios. ¿Han advertido un aumento en la desocupación?

-En lo que es el trabajo formal, nosotros no vemos una cuestión de despidos masivos, sí se nos escapa un poco el trabajo informal porque justamente es informal, no tenemos manera de conocerlo, registrarlo. Tenemos algunas denuncias, pero en general éstas llegan al ámbito judicial. Claramente es el sector más complicado y ésto ha puesto sobre la mesa la necesidad que tenemos como Estado de empezar a atacar este problema y tener un registro de lo que sucede. Nosotros estamos trabajando sobre la inspección sobre todo en lo que está funcionando, no hemos abandonada esa tarea. Después respecto a despidos, no es el mayor problema al que nos estamos enfrentando, hoy las mayores dificultades tienen que ver con el pago del salario. No te despiden, pero no te pagan el sueldo, o te pagan la mitad de manera unilateral, algo que no se puede hacer, y es ahí donde nosotros intervenimos.

"El sector informal es más complicado y ésto ha puesto sobre la mesa la necesidad que tenemos como Estado de empezar a atacar este problema y tener un registro de lo que sucede"

Frente a ese panorama, ¿cuáles son los principales desafíos de la postpandemia tanto para crear nuevos puestos de trabajo como para combatir la informalidad laboral?

-Todavía tenemos que ver cuál es el saldo de esta pandemia, yo creo que hay algunos trabajos que se perdieron o salarios que se interrumpieron que se van a reactivar en la medida en que se restablezca la actividad. Pero después va a haber un montón de sectores que no se van a poner normalizar de un día para otro. El fin de la pandemia no es que un día levantamos el telón y volvemos al 19 de marzo, es un proceso. Algunos sectores se van a recuperar más rápido, otros van a seguir en pandemia por un tiempo y creo que lo más complicado va a ser aquellos casos en donde los puestos de trabajo se hayan perdido porque se perdió la producción. Eso va a ser lo más difícil y va a ver que tomar estrategias desde ahí para poder hacer que vuelva a reactivarse esa unidad productiva, ese empleo, que probablemente vuelva a tener su demanda cuando salgamos de ésto pero que no pueda afrontar saldar todo lo quedó de estos meses de no haber podido funcionar. Y después está el desafío de fondo, porque convengamos que el 19 de marzo no era el paraíso. Nosotros venimos de un gobierno de cuatro años, en los que tres fueron de recesión. Guzmán lo dijo en su discurso: tres episodios de crisis cambiaria en dos años, es dramático, traumático e increíble. Aplaudo a las empresas que llegaron al 19 de marzo, con la soga al cuello y la lengua afuera. También entonces tenemos el desafío de reactivar nuestro entramado productivo de manera sostenible, de agregarle más valor y de hacerlo equitativamente .

"Convengamos que el 19 de marzo no era el paraíso, nosotros venimos de un gobierno de cuatro años, en los que tres fueron de recesión"

¿Cómo impacta el acuerdo con los bonistas extranjeros?

-Otorga previsibilidad y ayuda a la estabilidad, es muy importante. ¿Qué venía pensando un empresario?, ‘No sé qué hacer porque no sé si mañana no hay acuerdo, entonces el dólar se dispara’, por ejemplo. Hoy eso está despejado, eso nos va a permitir que el Estado esté mejor financiado y pueda llevar adelante sus políticas. Se levantó una sombra que teníamos y eso ayuda, no es suficiente, obvio, pero sin ésto íbamos a estar bastante más complicados. Para invertir, para producir, la certidumbre es importante y ésto nos empieza a marcar un camino de certidumbre de que vamos hacia el lado bueno porque el Estado ahora está en una situación que le va a permitir  ser sostenible y financiar sus gastos, va a permitir tomar créditos a las empresas, iniciamos un camino de recomposición económica.  Es la primer a vez desde abril de 2018 cuando estalló la crisis que se venía gestando desde antes, que tenemos una noticia de certeza y de avance en que se despeja por fin un problema.

En los últimos días, Esteban Bullrich presentó un proyecto en el Congreso Nacional para reducir el salario de los trabajadores públicos hasta un 20%, ¿cree que es una solución en un contexto de emergencia económica?

-No, es ridículo. Nosotros trabajamos bajo una premisa: el trabajo tiene que estar bien pago. La verdad es que un gobierno, y particularmente él que es senador por la provincia de Buenos Aires, que hizo una disminución muy fuerte de los salarialos  generales del sector público provincial, que además no son salarios altos tampoco. Yo acá tengo gente que gana entre 25.000 y 28.000 pesos en mano. Estamos hablando de salarios que no son altos, incluso hasta funcionario cobran muchísimo menos de lo que podrían cobrar en funciones en el sector privado. Entonces los salarios no son altos y el trabajo del Estado es muy necesario, si hay algo que quedó demostrado en este momento es eso, y debe estar lo mejor pago posible. Después tenemos las restricciones presupuestarias, yo no puedo pagar más de lo que tengo en la caja pero bajarlos me parece hasta te diría un insulto a los trabajadores y trabajadoras estatales, pero no me sorprende de la alianza opositora. Ojalá pudiéramos avanzar en el sentido contrario.

"Proponer bajar los salarios me parece hasta te diría un insulto a los trabajadores y trabajadoras estatales"