“Mañana venís a las actividades, pero se confirma todo a última hora, la agenda se mueve todo el tiempo” fue el mensaje desde el equipo de Victoria Tolosa Paz el día previo. Por la noche, la candidata volvía por la ruta de dos días de gira que la llevaron por el sur de la provincia a localidades como Bahía Blanca u Olavarría y aún no tenía definido su día siguiente, aunque ya sabía que arrancaría bien temprano como todos los otros días. Así de intenso es el mundo VTP.

Recién hubo confirmación para eso de las 23 horas: “mirá, ella va a arrancar en un encuentro con vecinos en el Gigante del Oeste, pero si te mandás para allá después te va a costar seguirles el ritmo y te vas a terminar perdiendo. Termina la actividad, se suben al auto y arrancan, no te dan ni tiempo a seguirlos. Te recomiendo que vayas directo al segundo encuentro, en Tolosa”. La idea de seguir a la candidata durante un día de campaña ya empezaba a parecer una pequeña odisea, pero todo lo que sonaba exagerado en esa charla de planificación sería confirmado con creces al día siguiente. Para seguirle el tranco a Victoria Tolosa Paz hay que prepararse para correr un maratón.

Alrededor de las 11 horas estuvimos en el barrio La Unión de Tolosa para esperar con tiempo la llegada de la candidata, pautada para una hora más tarde. Pegada a la autopista y al lado de un pequeño basural, una canchita de futbol se preparaba para ser escenario del partido entre Febo Asoma, el equipo femenino de la juventud que milita junto a VTP, y el equipo del barrio La Unión. Pasacalles de campaña con el nombre y la cara de la candidata al borde de la cancha, unos gazebos que daban sombra a los vecinos y la parrilla con choris humeantes al fondo completaban la escena. En la esquina, una bandera enorme con la leyenda “Camino a la Victoria”, el nombre que identifica a la militancia de Tolosa Paz y con el que bautizaron el primer local de la calle 1, abierto tras la derrota del 2015 y la toma de decisión de encarar una construcción política para gobernar la ciudad de La Plata. Los pibes corrían atrás de la pelota bajo los picantes rayos del sol del mediodía mientras unas 50 personas esperábamos la llegada de la maratonista, que ya había arrancado unas horas antes en la otra punta de la ciudad.

“Vicky camina y no la podés seguir, lo que no podés hacer es encerrarla en una oficina, ella es territorio” seguían avisando quienes la conocen, como para que nos fuéramos preparando para una jornada intensa. Mientras, una adolescente con una remera estampada con la fase “en el peronismo se garcha” miraba el altar de Maradona que Verónica Sánchez Viamonte, arquitecta y artista platense hija de desaparecidos había llevado para colocar más tarde en el potrero. La creadora de la iniciativa “Santa Maradona” ya tiene instalados 160 altares en todo el país y sueña con que haya uno en todos los barrios, como sucede con el Gauchito Gil: “ahí es donde se encuentra Diego con la gente, donde hay luchas” cuenta.

Después de hacerse esperar un rato, llegan la camioneta y el auto que traen a Tolosa Paz y su equipo y comienza una escena que se repetirá todo el día con diferentes locaciones. Todo el mundo quiere un saludo, un beso, una selfie, y VTP se desplaza entre las muestras de cariño como pez en el agua. Si el perfil televisivo le sienta cómodo, el contacto directo con la gente parece su ambiente natural. Para el estrés de quienes le manejan los horarios, todas las actividades del día debieron esperar unos buenos minutos para arrancar, alguna cerca de media hora, hasta que no quedara beso y abrazo por dar. Y si bien no son los únicos, los más privilegiados son los niños. Se le arremolinan en un enjambre que ella va desatando de a poco dándole a cada uno la atención que le reclaman, rememorando tal vez sus profesiones que no fueron, la de pediatra o maestra jardinera.

D: “¿Cuántos kilómetros hiciste en la campaña”?

VTP: “No tengo la cuenta, pero ya va a terminar el 14 y hay un contador que va a poder reflejar lo que hicimos en esta campaña, un esfuerzo muy grande porque es lo que requiere este tiempo, estar en muchos lados al mismo tiempo, hablar, conversar, persuadir, convencer y seguir construyendo”.

D: “¿Y no estás cansada? ¿Cómo hacés para cuidarte?”

VTP: “Yo me cuido, soy una mujer que hace deporte y se cuida porque me interesa vivir muchos años para ver la transformación de nuestro país”.

Tolosa Paz: "Me cuido porque me interesa vivir muchos años para ver la transformación de nuestro país". 

Cuesta hacerle preguntas, aunque va relajada su ritmo es frenético y no hay prácticamente un instante en el que no está con alguien encima a los abrazos y entre fotos. Cuando llega al otro costado de la cancha las señoras mayores que la esperaban sentadas bajo los gazebos la reciben tirando papelitos como si un equipo saliera a la cancha. Una de ellas se le acerca con su nieto, que le da un bombón y un paquete pequeño. Eran unos “aros de capitana” según cuenta más tarde la señora, quién quiso regalárselos porque “es la única que nos ayuda, a mi hija la está ayudando a tramitar el DNI de mi nieta y nos consiguió chapas para nuestra casa que se llovía”. Y así continúa la escena hasta que alguien mete un corte un tanto tajante y arbitrario porque el partido no empezaba más y todavía quedaba mucho día por delante.

Pero aunque el juego arranca intenso VTP no descansa ni es espectadora. Salta de una conversación a otra atrás de uno de los arcos hasta que del otro lado del pasacalles que cierra la cancha se acercan Amalia y un grupo de mujeres con uno de los tantos pedidos que la candidata recibirá a lo largo del día: “Victoria, queríamos hablarle porque tenemos un problema con la falta de cloacas, tenemos que sacar los caños directo a la calle y nuestros hijos terminan jugando entre los excrementos” es el puntapié inicial al que se suman luego los comentarios de toda la comitiva. Tolosa Paz escucha, reconoce el reclamo y explica que “recién ahora tenemos ABSA con el gobierno provincial de Axel, y vamos a atender estos problemas. Venimos de una gestión de Vidal que no se ocupó de nada de esto, y ni hablar del Intendente Garro que no pone nada”. Las vecinas asienten y retrucan, “sí, si cada vez que queremos hablar con él nos esquiva, cuando vamos a la municipalidad nos echan”. Luego de unos minutos de charla vienen las fotos, y antes de alejarse VTP llama a los candidatos a Concejales Cintia Mansilla y Juan Granillo, y otro referente territorial que estaban por ahí para que se quedaran conversando más en profundidad con las vecinas.

“¿Quién habla así con los negros cabeza? Nadie te trata de igual a igual como la chabona” le Dice a Diagonales Amalia luego del intercambio, y también cuenta que hace 17 años vive en el barrio, su marido es ferroviario y gana bien pero no les alcanza, y que la más grande de sus cinco hijos tiene 19 años y también estudia y trabaja: “le pagan $16.000 por 8 horas y media, ¿a vos te parece?”. Otra de las vecinas del grupo aprovecha que VTP está de espaldas y le saca una foto a su remera, que porta una frase de Evita: yo sé que ustedes recogerán mi nombre y lo llevarán como bandera  al victoria. “Yo la veía en la tele y me la imaginaba otra persona, así como que no se juntaba con gente como nosotros, y acá la veo sonriente, amorosa, me abrazó y me emocioné” dice con tono inocente.

Ya un poco más entrados en confianza y con el partido finalizado, Diagonales se le anima a un desafío a la candidata.

D: “Victoria ¡tenés que patear un penal!”

VTP: “¿Vos decís? Che, acá quieren que patee un penal”

Sin demasiadas dudas, agarra la pelota y la coloca a unos metros del arco, en el que rápidamente una de las chicas arqueras se acomoda como si estuviera por definirse el pase a la final de un mundial. Se arma el inevitable tumulto alrededor de la escena, y lo que sigue pinta bastante la personalidad de Tolosa Paz. Patea el primer penal, puntazo sólido de su borcego negro que impulsa la pelota apenas afuera al lado del palo izquierdo. Pero como la derrota es lo opuesto a su nombre, VTP la pide de nuevo y en ese segundo intento infla la red con un remate certero al otro palo. Todos festejan y parece que ya está, que ya fue lo que tenía que ser, pero ella vuelve a pedirla, “para que ataje uno la arquera”. Así será, primer tiro afuera, segundo el gol, y tercero el recuerdo para esa piba que podrá contar que le atajó un penal a la próxima diputada nacional por el peronismo bonaerense.

Son casi las 14 horas y la segunda actividad del día va terminando ya muy atrasada con la entrega de trofeos a las jugadoras. El equipo de VTP tiene todo dispuesto hace un rato para partir al próximo destino, pero la candidata sigue cantando la marcha peronista entre militantes y vecinos y no parece muy fácil el acto de arrancarla de allí para meterla en uno de los autos que la esperan. Finalmente sucede y comienza el veloz recorrido de unos veinte minutos hasta el barrio Puente de Fierro, en Altos de San Lorenzo, donde desde temprano se lleva adelante una jornada militante de instalación de tanques y canillas comunitarias de agua y saneamiento del arroyo. La ausencia del municipio en la garantía de servicios tan básicos como esos es el eje de la jornada y será el foco de las palabras de VTP, en el primero de los discursos de la tarde.

“La gran mayoría de los platenses carece de un Estado municipal cercano, carece de políticas activas, desde lo más básico como la recolección de residuos o el derecho a tener agua. No puede ser que esto suceda a diez minutos del centro geográfico de esta ciudad” dice al micrófono, y sus palabras retumban bajo el puente junto a los aplausos de las decenas de asistentes. Uno de ellos, de unos 10 años de edad, se escabulle hasta donde están los oradores y le pregunta a Tolosa paz si es hermana de Cristina Fernández de Kirchner. “Fuerza Cristina” grita el pequeño Ismael y la tarde explota en aplausos y cánticos por la Vicepresidenta. La candidata le dice al barrio que sabe que hubo muchos compañeros de ese territorio que no fueron a votar, que los entiende y los escuchó, pero también remarca la importancia del 14-N y lo que está en juego. “Si los compañeros no fueron a votar no fue porque estaban enojados, sino porque llovió esa semana y tenían que ponerse bolsas en los pies para llegar desde allá atrás hasta la escuela que les pusieron en la Armonía, porque Garro no puede ni mantener las calles”.

Victoria Tolosa Paz quiere gobernar La Plata en el 2023, está totalmente decidida y no lo oculta. No lo hizo en el inicio de la campaña, cuando afirmó explícitamente ese deseo, tampoco lo hace ahora sino más bien todo lo contrario. La campaña es 2 x 1, rescatar cada voto para el próximo domingo pero también dejar en claro en cada barrio que la carrera por recuperar la capital bonaerense de manos garristas arranca el lunes 15.

D: “¿Cómo ves hoy a La Plata”?

VTP: “Hay un Estado ausente en todos los sentidos, y creemos claramente que la lucha de acá al 23 va a ser la unidad para construir la victoria en el municipio”

"En La Plata hay un Estado ausente en todos los sentidos".

Luego del discurso siguen las fotos, los besos y abrazos, con los niños como principales protagonistas e Ismael como epicentro, pegado a Tolosa Paz hasta el último segundo en que hubo que volver a salir corriendo hacia otra actividad. “Ya nos vamos, fijate si das vuelta el auto así nos seguís rápido porque es medio complicado salir de acá” apuran desde el equipo de la candidata anticipando la nueva carrera hasta otro punto de la ciudad, mientras ella reparte posters de Maradona a los chicos que no la dejan irse, repitiendo el cuadro de la anterior partida.

D: “¿Cómo sobrellevás este ritmo de campaña con tu vida personal y tu familia? Con tus hijos por ejemplo”

VTP: “Hoy es mucho vía WhatsApp porque pobres casi no me ven, me ven un ratito el domingo al mediodía y después por WhatsApp todo el tiempo. Tengo a Joaquín que vive conmigo, y el resto viven solos. Ellos admiran mucho lo que hago, les encanta y son compañeros peronistas así que en sus ámbitos también militan, entonces entienden”.

"Mis hijos pobres casi ni me ven, pero admiran mucho lo que hago".

D: “¿Y cómo está Victoria Tolosa Paz persona, no la candidata, a esta altura de la campaña”?

VTP: “Estoy muy esperanzada de que el pueblo de la PBA se pueda dar cuenta lo que tenemos que hacer el 14-N de manera colectiva, para seguir avanzando en la Argentina que queremos construir y la provincia que queremos poner en marcha. Muy emocionada de esta responsabilidad que me toca en esta etapa de mi vida. Soy consciente de lo que implica encabezar una lista en una elección intermedia en una provincia con 17 millones de habitantes. Es un momento muy importante en términos personales, pero es colectivo. Es una emoción que te atraviesa y es muy importante porque hacemos política con esa emoción, dejando todo, todo, de acá al 14 todo. Después, el 15, nos volvemos a levantar y nos ponemos a trabajar para reconstruir este país”.

La caravana sigue y no espera. Hay que perseguirla para no quedarse atrás, porque unos minutos pueden ser la diferencia entre llegar y perderse el nuevo momento entre la candidata y su gente. La próxima parada es la inauguración de la Unidad Básica “Nora Peralta” de la Unión Peronista Platense, en Villa Elvira. La visita dura unos pocos minutos porque la tarde corre tan rápido como el equipo de la candidata, y todavía queda un punto más antes de llegar a la cita principal en la plaza Islas Malvinas, donde estarán el Gobernador Kicillof y el resto de los candidatos y referentes en una mateada con vecinos. Pero VTP no se inquieta y se toma su tiempo para los abrazos y las fotos con la veintena de asistentes, y escucha con atención a Pocha, que cuenta sus décadas de militancia junto a Peralta, histórica referente del peronismo platense fallecida recientemente. “Yo no sé si soy un buen cuadro político, pero soy peronista hasta los huesos y el peronismo marcó mi vida” dice orgullosa Pocha, que contará unos setenta y largos de edad.

"Estoy muy esperanzada de que el pueblo de la Provincia se pueda dar cuenta lo que tenemos que hacer el 14-N de manera colectiva".

Tolosa Paz también recuerda a Peralta, su estatura política, su “ñata tan característica, esa cara bella y de buena persona”, su fuerte militancia de los último años de resistencia al macrismo, su coherencia de estar “siempre plantada en el mismo lugar”. Su recuerdo se funde con el presente y su causa emerge con el mismo vigor que en las actividades anteriores. “Venimos de Altos de San Lorenzo, que muestra una foto de La Plata hoy. Un municipio totalmente ausente, pero los vecinos organizados para colocar tanques de agua o sanear el arroyo, un chico como Ismael que agarra el micrófono y grita fuerza Cristina porque sabe que está enferma, todo eso es el peronismo en esta ciudad. Y lo único que anhelamos profundamente es ser capaces de construir la unidad más grande para poder gobernar la ciudad entre todas y todos. No es quién llega, el día que lleguemos a la municipalidad va a llegar el peronismo nuevamente a sentar las banderas por las que Nora Peralta militó toda su vida”.

De nuevo a los autos, y a seguir esquivando los cráteres de las destruidas calles de los barrios platenses en la continuación de la jornada interminable, esta vez con destino Berisso. Al llegar, VTP se baja rápido con la misma sonrisa que tiene dibujada desde las primeras horas de la mañana, que tendrá hasta últimas horas de la noche y que parece no conocer el cansancio.La parada esta vez es otro local partidario, pero más amplio y lleno de militancia de distintas organizaciones que reciben a la candidata a puro bombo y platillo en un ambiente ensordecedor. Los ineludibles saludos y fotos a la entrada retrasan una agenda ya completamente estrujada, pero el semblante sigue siendo el mismo y la candidata no parece compartir el estrés de su equipo por el horario y la necesidad de llegar al último compromiso a tiempo. Se enfoca en los besos, los abrazos y las fotos con decenas de personas, a muchas de las cuales llama por su nombre, algo que se repite a lo largo de toda la tarde. “Su cabeza es una computadora, registra todo” dicen en su entorno.

Finalmente se sienta en la mesa que comparte con los referentes locales, a la espera de hacer uso de la palabra. El acto tiene toda la liturgia peronista, y el presentador empieza a nombrar a los dirigentes presentes pero mira un segundo la lista y se detiene en seco: “vamos a dejar los saludos para después, que sabemos que la compañera Victoria viene con la agenda muy apretada y se tiene que ir a una actividad con el Gobernador”. Se callan los bombos y la candidata insiste con su visión. “Las y los compañeros que hacemos política entendemos que la franja, esta zona de La Plata, Berisso y Ensenada tiene que compartir un destino común, que es no solamente el 14, sino que de cara al 23 nos queda el gran objetivo de pelear por recuperar la capital de la provincia, la ciudad de La Plata. Ese es el compromiso que asumimos acá, el de ser constructores de la unidad del movimiento nacional y popular que nos permita de una vez y para siempre que Garro deje de ser Intendente”. Por las dudas, no deja de recordar “tenemos la enorme responsabilidad de militar la boleta entera del frente de Todos en toda la provincia, hoy estoy aquí como platense pero como militante política, y cada compañero que se dio cuenta lo que pasó el 12 de septiembre nos llena de esperanza para dar vuelta la elección”. Y remata: “tenemos que convencernos que no hay fuerza política más potente en la región que el peronismo”

Como si fuera una estrella de rock, VTP tiene que salir del local por una puerta del costado porque la principal está bloqueada por la cantidad de personas que siguen pidiendo más y más fotos. Pero ya no hay más tiempo y la plaza Malvinas Argentinas espera para el gran evento que coronará la intensa jornada. Al llegar, la cantidad de personas se cuentan de a centenas, tal vez un par de miles, y la candidata soporta estoica el asedio sin perder la compostura. A esta altura, y después de haberla visto así todo el día, ya puede afirmarse sin temor al error que no es una pose, que realmente lo disfruta y siente natural ese contacto directo con la gente que tantas veces se le reclama a la clase política. Camina entre el público sin ningún tipo de problema ni de seguridad alrededor suyo. De hecho, su equipo personal no incluye trabajadores de esa categoría y en ninguna actividad del día hubo restricción alguna para que se acercase quien se quisiera acercar. Contacto con el pueblo 100%.

D: “Caminaste muchísimo la provincia en esta campaña, y ya lo habías hecho en los años 90, ¿qué viste esta vez?”

VTP: “Veo un compromiso muy grande del sector productivo. Me llena de esperanzas ver que los empresarios PyMe, las cámaras industriales. Quienes apuestan a la producción ya no se engañan tan fácilmente en procesos electorales donde todos levantamos las banderas de la educación, de la salud y el trabajo. Pero estamos quienes hemos  gobernado y avanzado en ese sentido, y quienes gobernaron hace muy poco y destruyeron la capacidad productiva de la provincia”.

"Veo un compromiso muy grande del sector productivo". 

Minutos después llega Kicillof, que será el único orador de lo que iba a ser una mateada y terminó siendo un acto de cierre de campaña por el desborde de la asistencia, que obligó a escenario, micrófono y pedir que todos se sienten. Tolosa Paz corta las respuestas frente a los celulares de los medios que la grababan, “ahí viene el Gobernador”, y sale disparada como el resto de la gente hacia la camioneta que se detiene a unos metros sobre la calle. Se abre paso para que su abrazo sea uno de los primero que reciba Kicillof al bajarse, y camina con él entre la multitud hacia el pequeño escenario sobre el que estarán algo más de una hora. Durante el encendido y extenso discurso del Gobernador, VTP no pierde oportunidad para apuntarle un par de veces algunos temas locales, como la polémica por la República de los Niños, y Kicillof los hace eje para pegarle a un Garro “cómplice” de la estafa electoral por la que denuncia a la oposición durante su gobierno desde 2015, y que afirma están intentando repetir este 2021.

La tarde va cayendo y el acto termina. Kicillof se retira en medio de un tumulto por la gente que intenta acercarse, que deja como saldo una joven herida, presuntamente con una fractura al haber sido aplastada. Daniel Gollan, presente en la jornada, se hará cargo de la situación en su calidad de médico hasta que llegue el SAME. Es el anteúltimo de los candidatos y referentes en retirarse. La última es VTP, que todavía sigue a pura foto, besos y abrazos por otro lado de la plaza, tironeada por su equipo de prensa que quiere llevársela a que se prepare para lo que sigue. Porque su actividad no termina allí, a las 21 horas estará como invitada junto a Leandro Santoro del programa Sobredosis de TV, uno de los fuertes del canal C5N. “Y olvidate que eso sea lo último” le dicen desde su entorno a Diagonales mientras la candidata logra por fin que el auto en el que se encuentra arranque, tras unos últimos minutos de saludos por la ventanilla. “Después del programa viene la cena, seguro van con Santoro y aparece algún otro referente, y la cosa sigue con conversaciones de política hasta las dos de la mañana mínimo. Lo gracioso es que mañana la tenés temprano a la mañana de nuevo preguntando por todo y organizando la agenda del día. No para”.

Acompañar un día de campaña a Tolosa Paz es realmente cansador. Imaginar ese trajín durante meses y meses directamente parece una locura. Ella no parece sentirlo o decide no mostrarlo, y evidentemente aún tiene la energía para disimularlo de manera muy convincente. Tiene claro, además, que el domingo 14 termina una etapa y el lunes 15 continúa otra. El colgante con una V enorme que lleva en el pecho fue el regalo de una amiga para que fuera la primera Intendenta mujer de La Plata, ella lo tomó como amuleto y prometió no sacárselo hasta no cumplir ese objetivo. Independientemente del resultado de las urnas el domingo, nadie podrá recriminarle al interior del Frente de Todos no haberse puesto la campaña al hombro, y nadie podrá esperar que levante el pie del acelerador con miras al 2023 y su sueño de Intendenta. Porque Victoria Tolosa Paz no para, y habrá que ver hasta dónde llega.