Macri sigue adelante con sus repudiables ataques contra los docentes y la educación pública. Su "revolución educativa" es para profundizar el negocio de la escuela privada. Cifras millonarias se van para ésta, mientras la gobernadora Vidal bajó un 3% el presupuesto educativo de la provincia de Buenos Aires.

Vidal descuenta los días de paro, aplicó una conciliación obligatoria trucha y quiere multar y quitar la personería a los sindicatos. Ahora quiere declarar la educación como "servicio esencial"& ¡para prohibir el derecho de huelga! ¡Si Vidal considerara a la educación pública como servicio esencial debería otorgar ya un salario digno y no el miserable 19% en cuotas! ¡Debería reconstruir el 78% de las escuelas bonaerenses que se caen a pedazos y nombrar los 4.200 docentes que se necesitan solo en La Matanza!

Hacen falta miles de escuelas públicas y de maestros en todo el país. Esta falta (no los paros), es la que obliga a que miles de alumnos se tengan que inscribir en la escuela privada. Para Macri la educación es un "gasto", no una inversión como lo fue durante décadas. Su "modelo" es el que se aplica en Chile, introduciendo conceptos como "productividad" o "calidad educativa", propios de las empresas, no de una escuela pública. En Chile, por ejemplo, los universitarios se endeudan para pagar entre 500 y 800 dólares mensuales para poder estudiar.

Macri y Vidal culpan a los paros por el crecimiento de la educación privada. Es al revés en provincias con alta conflictividad como Neuquén, el 85% es estatal. Mientras en la ciudad de Buenos Aires, con pocos paros, la proporción sube al 51,1%. Son las políticas de destrucción de la escuela pública emprendidas por todos los gobiernos desde la dictadura para acá los responsables de esta tendencia privatizadora.

Dicen que no hay plata. Mienten. Encubren con esto que se destina para la deuda externa el 10% del presupuesto nacional y solo el 5% a educación. Y se subsidia de forma millonaria el negocio de la escuela privada, donde la Iglesia Católica es una de las más beneficiadas.

Este plan es de Macri y de todos los gobernadores, incluidos los kirchneristas. En Santa Cruz Alicia Kirchner ofreció un 3% de aumento. Scioli salió a respaldar a Vidal. Lo mismo pasa con Urtubey, Schiaretti o donde gobierna el "socialismo" como en Santa Fe, donde el 38% de la escuela es privada. Ante esto hemos propuesto un proyecto de Emergencia Educativa por un salario básico de $15.000, que se renacionalice el sistema educativo y se eleve al 25% el presupuesto nacional en base al no pago de la deuda y de dejar de subsidiar a la escuela privada.

El plan es claro ajuste docente y represión. Lamentablemente los dirigentes de Ctera no han fijado ningún paro a la vista. Han instalado una carpa itinerante y confían en que la justicia o el parlamento "obligue" al gobierno a reabrir la paritaria. Pero sin lucha nada se va a conseguir.
Los docentes neuquinos nucleados en ATEN, en cambio, con una lucha digna lograron un 31% de aumento, según explicó Angélica Lagunas, secretaria general de ATEN Capital y dirigente de Izquierda Socialista. Este paso adelante es un ejemplo ante los dirigentes que no usaron las grandes luchas y movilizaciones de miles de docentes de todo el país para delinear un plan de lucha nacional escalonado hasta derrotar el ajuste de Macri y los gobernadores.

La CGT, por su parte, después del parazo general del 6 de abril cifra esperanzas en un "diálogo" con Macri, cuando lo que hace falta es un nuevo paro de 36 horas con movilización a Plaza de Mayo hasta derrotar el ajuste nacional.