Salarios basura por recoger los residuos que no junta ESUR
Trabajadores municipales cobran un básico de menos de $40.000 por seis días de trabajo. Mientras tanto, ESUR se lleva más de $6 mil millones, alrededor de un cuarto del presupuesto municipal.
Decir que la recolección de residuos es altamente deficiente en la ciudad de La Plata ya resulta una obviedad. Basta salir del casco urbano hacia los barrios de la periferia para encontrarse con basurales a cielo abierto y esquinas llenas de ramas y residuos de todo tipo. Mientras la gestión de Julio Garro se gasta prácticamente un 25% de su presupuesto en la recolección, engrosando las arcas de la empresa ESUR, vecinos y vecinas platenses reciben un servicio altamente deficiente.
A pesar de las cuantiosas sumas que recibe, ESUR no cubre todo el territorio platense y en muchos de los lugares a los que sí llega tampoco recoge la totalidad de los residuos. Así lo explican trabajadores municipales y cooperativistas que trabajan cubriendo esos baches y entre quienes crece el malestar por los bajos salarios que reciben y las irregularidades en su forma de contratación.
Hay unos 40 choferes de camiones que trabajan para el municipio en estas tareas. La mayoría de ellos figuran como contratados bajo el concepto de OBRERO/SERVICIO – CLASE 11 – REG 45 y dependen de la Dirección General de Logística, pero otros están como cooperativistas. Trabajan de lunes a viernes unas seis o siete horas diarias, y mientras algunos cubren los llamados al 147 en el casco urbano, la mayoría son enviados cada día a las distintas delegaciones. Los trabajadores explican que ESUR solamente recoge los residuos embolsados y depositados en canastos o contenedores, mientras que todo lo que sea ramas de poda, escombros o basura de ese tipo queda para ser recolectada por ellos.
Por esta labor perciben un sueldo básico que, con el aumento arreglado en las paritarias hace dos semanas, alcanza los $39.152, los que representa menos de la mitad de una canasta familiar. El salario final termina siendo de alrededor de $60.000, y el descontento de los trabajadores pasa por el hecho que la diferencia entre ese monto y el básico es abonado bajo los conceptos de “Régimen Horario” y “Bonificación por Tarea Riesgosa”, además de “horas extra” que en la realidad cotidiana de su trabajo son parte del horario normal. Si bien los trabajadores no iniciaron un conflicto con el municipio, en gran medida por temor a las represalias, su reclamo es que esas suman sean reconocidas dentro del sueldo básico para que dejen de estar sujetas a la discrecionalidad política de la gestión.
De hecho, denuncian que en el mes de febrero varios de ellos recibieron descuentos injustificados que no fueron restituidos en el siguiente cobro. Al parecer esto afectó a muchos trabajadores municipales y se debió a un “error” en la administración central. “Si vos tenés cualquier problema con quienes manejan el sistema, estás expuesto a que te descuenten eso que figura como horas extra o régimen horario y no tenés cómo reclamar. Por eso queremos que se incorpore al básico” explican a Diagonales.
El aumento que se acordó en las paritarias a municipales fue del 47% en tres tramos, uno en marzo, otro en julio y otro en septiembre. El tramo de marzo significó unos magros $5.000 de aumento para los sueldos básicos en cuestión. Como contraposición, los trabajadores comentan que un chofer de camión de basura de ESUR puede estar cobrando entre $150.000 y $180.000, mientras que un bolsero de la empresa percibiría unos $120.000.
El último aumento que recibieron antes del percibido en el mes de marzo fue un bono de $10.000 en septiembre del 2021, que obtuvieron luego de una medida de fuerza. “De todo el aumento que debíamos recibir el año pasado sólo nos dieron el primer tramo” afirman a este medio.
Estos trabajadores dependen de la Dirección General de Logística que conduce Fabián Marino y que depende de la Secretaría de Gobierno de Marcelo Leguizamón. Fabián Marino es hermano Nelson Marino, ex Secretario de Gobierno y mano derecha de Garro, y uno de los principales apuntados en las denuncias por irregularidades en el manejo de los fondos destinados a cooperativas que el municipio contrata.
ESUR, por su parte, percibe uno de los contratos más cuantiosos en materia de recolección de residuos de la Provincia. En 2020 el monto municipal destinado a barrido y recolección de residuos rondó los $3.300 millones, a lo que hay que agregarle unos $27 millones de origen provincial. En 2021 esos montos ascendieron alrededor de los $6.300 millones.
La Plata es el distrito bonaerense qué más porcentaje de su presupuesto gasta en la recolección de residuos. Cabe también recordar en este punto el escándalo desatado hace casi cinco años, cuando Garro prorrogó por decreto el contrato con ESUR aumentando considerablemente las transferencias municipales a la empresa, hecho que extraoficialmente se vinculó con el robo que sufrió el Intendente en su domicilio.
Todo aquello quedó, como suele suceder, en la oscuridad más absoluta. Lo cierto es que hoy el municipio destina miles de millones a un servicio que no cubre ni de cerca a la totalidad de la población platense, y que los baches de ese sistema tan oneroso como ineficiente para los contribuyentes del distrito los cubren trabajadores que cobran salarios basura. “Queremos que se hable de esto porque ahí adentro no tenemos representantes, somos como invisibles” dicen esos trabajadores a Diagonales.