En una suerte de spin off de las famosas relaciones carnales con Estados Unidos de los '90, el presidente Javier Milei viajó por séptima vez al país del norte para intentar avanzar en un acuerdo de libre comercio y reunirse con Donald Trump. 

El mandatario argentino participará el viernes de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), donde brindará un discurso y presentará un proyecto para la unidad de los países que se llamará Liga de Naciones.

La intención de esta “Liga” sería reunir a los gobiernos de derecha más conservadores de Occidente para enfrentar la Agenda 2030. 

En concreto, Milei quiere proponerle a Estados Unidos, Italia e Israel que integren una organización paralela a la ONU, que firmen un acta de libertad de comercio y que acuerden la cooperación militar como lineamientos principales.

Entre los miles de detalles que podrían señalarse, Milei se olvidó de uno muy importante: Estados Unidos es el país líder de la OTAN y como tal, tiene un acuerdo militar y de defensa con Reino Unido. 

En relación al acuerdo de libre comercio con Estados Unidos particularmente, el jefe de Estado detalló en una entrevista en Radio Rivadavia que la idea es poder concretarlo sin que eso afecte las negociaciones por convenios con otras potencias como China. 

A pesar de que Trump tardó una semana en atenderle el teléfono después de ganar las elecciones, Milei consideró que con el triunfo del republicano las relaciones con Argentina serán mucho más prolíferas. 

"Está claro que el apoyo que va a tener EEUU en el Fondo va a ser mucho más abierto y claro", manifestó. Y añadió: “Creemos que en estas condiciones podemos avanzar en mayores acuerdos comerciales con EEUU".