"Te puede traer un quilombo judicial": El error garrafal de Santiago Caputo que dejó una farsa al descubierto
El video sin editar de la entrevista a Javier Milei reveló la preocupación de Casa Rosada alrededor de la situación procesal del Presidente, la eliminación de preguntas incómodas y el acuerdo del periodista para acomodar la entrevista a la conveniencia del mandatario y su entorno
El remedio fue peor que la enfermedad. Lejos de calmar las aguas, la entrevista de Jonathan Viale a Javier Milei sumó un nuevo capítulo al escándalo alrededor de la estafa millonaria de $LIBRA. Luego de la transmisión editada que salió al aire de TN, desde el canal se filtró el crudo de la entrevista y se generó un revuelo aún mayor. El material reveló la censura de preguntas que podían complicar la situación procesal del libertario, el rol del ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona como defensor del jefe de Estado y el papel de periodista amigo del entrevistador.
La entrevista tenía por objetivo desligar al Presidente del escándalo e instalar la idea de que el mandatario había actuado de buena fe al “difundir”, en lugar de promover, la criptomoneda que generó pérdidas millonarias a miles de personas de todo el mundo.
Más allá de la voz temblorosa, los nervios, las contradicciones, los intentos de desviar el foco de atención y las flacas explicaciones, los tramos sin editar de la entrevista dieron aún más que hablar.
En un video subido al canal de YouTube de TN, se pudo observar que en un momento Santiago Caputo -uno de los encargados de supervisar la nota y cuidar la imagen del Presidente- paró la entrevista, le dijo algo al oído a Javier Milei y obligó a Jonathan Viale a borrar una pregunta.
Es que la consulta del periodista y la respuesta inicial del mandatario revelaban que el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, es quien se está encargando de la situación procesal del Presidente.
En otras palabras: Mientras el mandatario aseguraba que el escándalo del criptogate era “un problema entre privados” y que su participación había sido una mera “difusión” en calidad de “ciudadano” y no de Presidente, al mismo tiempo admitía que utilizaba los recursos del Estado para hacer frente a las múltiples denuncias en su contra.
Además, el video filtrado reveló que, a pesar de lo que intentan demostrar, el entorno de Javier Milei está preocupado por los problemas legales que puede enfrentar el Presidente y el impacto que podría tener en su gestión.
Tras casi 3 días de encierro, Milei grabó una entrevista con Viale en su despacho de Casa Rosada para intentar desvincularse de cualquier responsabilidad de uno de los fraudes más grandes del mundo cripto.
Detrás de cámara, atentos a cada palabra, estaban Karina Milei, Luis Caputo, Santiago Caputo, Manuel Adorni.
Tras la transmisión de la entrevista, el asesor estrella de agrandó redes sociales y se apresuró a cantar victoria. “Como ingeniero del caos doy por terminado este capítulo de la novela. Muchas gracias a todos. Buen intento. Les falló el operativo. La libertad avanza”, escribió en su cuenta de X.
Minutos después se filtró la versión sin editar de la entrevista y la publicación de Caputo quedó desactualizada muy rápidamente.
En el material difundido, cuando Milei admitió que el frente judicial está en manos de Cúneo Libarona, el asesor presidencial es quien interrumpió la entrevista.
"Entiendo, me doy cuenta, puede traer un quilombo judicial", dijo Viale inmediatamente después de que Santigo Caputo entrara en escena. Segundos antes, el periodista “bromeaba” con Milei sobre las versiones que sostenían que le habían dicho qué preguntar y qué no. Menos de un minuto después, Caputo le ordenó a Viale que elimine una pregunta y el comunicador aceptó sin chistar.
Lo cierto es que para cuidar tanto la imagen del Presidente, acceder solo a una entrevista grabada para controlar qué se transmite, e ir “corrigiendo” sobre la marcha, Caputo cometió una seguidilla de errores garrafales.
El primero fue dejar que el material en crudo se editara en el canal y no en Casa Rosada. El segundo, no pedir que se dejara de grabar cuando cortó la entrevista y le dio las indicaciones al Presidente y al periodista.
Así, el asesor estrella dejó expuesto a Javier Milei, a Jonathan Viale y a sí mismo. Lejos de dar por tierra el asunto de $LIBRA, la entrevista sólo sumó leña al escándalo