Alberto Fernández con todos en España
El candidato presidencial muestra una agenda plural de contactos. Se reunió con la banquera Ana Botín, del Grupo Santander, el grupo privado de ese sector con más inversiones en Argentina. Ese mismo día conversó con el intelectual de izquierda argentino Jorge Alemán, asesor del grupo Podemos, quien contó a Diagonales intimidades de esa charla
El candidato presidencial por el Frente de Todos Alberto Fernández sostuvo hoy jueves un encuentro con el jefe del Gobierno español Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa. Luego, disertó una conferencia la Sala Constitucional del hemiciclo legislativo español titulada “América Latina y Europa: desafíos del proceso de integración”, que tuvo el auspicio de la Universidad Complutense de Madrid. Mañana tendrá otra reunión de alto nivel en Lisboa, con el Primer Ministro de ese país, Antonio Costa, quien lidera desde el 2015 una heterogénea coalición progresista que ha logrado un sorprendente ciclo de crecimiento económico e inclusión social. Previamente, la nación lusitana estuvo sometida a un programa de restricción fiscal fijado por la troika europea. De ahí que se hable del modelo portugués como un espejo donde Argentina pueda verse para intentar un marco de desarrollo con justicia social luego de una etapa económica marcada por los condicionamientos del Fondo Monetario Internacional.
Por lo pronto, el hombre más votado en las primarias de agosto aprovechó la bilateral con el socialista Sánchez para replicar su posición respecto al acuerdo comercial firmado entre el Mercosur y la Unión Europea que, en su momento, hizo llorar de emoción al Canciller Jorge Faurie. “El Mercosur hoy no está funcionando bien por los problemas políticos que hay en Brasil y Argentina. Por los dichos de los medios parecería que estoy en contra del acuerdo. En verdad, hoy lo recordaba con Felipe Sola, en el 2005 el que más hizo para motorizar ese vínculo en el gobierno fui yo como Jefe de Gabinete…Debemos ir a una integración pero sin perjudicar a la Argentina", advirtió Fernández.
Las citas con dirigentes con los que a partir de diciembre, probablemente, Fernández dialogue como un par, los mencionados mandatarios Sánchez y Costa, y las conferencias ofrecidas por el candidato del Frente de Todos, tanto la dada hoy en el Parlamento como la ofrecida el lunes en la Universidad Camilo José Cela, eran actividades ya previstas en la agenda de Alberto Fernández. En paralelo, el hincha más famoso de Argentinos Juniors aprovechó su estancia en Europa para hacer otros tipos de contactos, con menor carga institucional pero igual de significativos, cuyos trasfondos fueron sellados a los medios por su pequeña comitiva y su equipo de prensa, que monitoreó los impactos de su gira desde el bunker de calle México.
El día miércoles Alberto Fernández tuvo una charla cordial con Ana Botín. La banquera de sugestivo apellido comanda una de las naves financieras más importantes de España, el Banco Santander. Ese hub bancario es la entidad privada de ese rubro más importante en Argentina: la cartera cuenta con 3,7 millones de clientes -entre ellos 260.000 pymes y 1.300 empresas- y posee una red de 468 sucursales distribuidas en 22 provincias y en la Ciudad de Buenos Aires. Fernández no comentó públicamente cuál fue el tono del diálogo. Según la agencia española de noticias EFE Botín se mostró confiada en la seguridad jurídica privada que habrá en Argentina con una gestión económica justicialista: “Botín ha salido del encuentro con la sensación de que Alberto Fernández -a quien conoce desde hace 20 años- buscará devolver al país la tranquilidad con políticas consistentes”. Sin embargo, otros medios ibéricos hicieron hincapié en que la CEO del Santander le habría transmitido a Fernández su preocupación sobre las consecuencias negativas que traería un “control más restrictivo del movimiento de capitales y el posible celo estatal hacia el giro de divisas a las casas matrices”.
Luego Fernández se hizo un tiempo para recibir en el hotel donde se hospedó en Madrid a un referente de un campo social oblicuo al de Botín, el intelectual argentino Jorge Alemán. Psicoanalista, escritor, ensayista, Alemán orbita en la mesa de pensadores que dialoga a diario con Pablo Iglesias, líder de Podemos, la fuerza popular que hace de puente en España y hacia Europa con los movimientos latinoamericanos integracionistas. Hablar con Alemán es hablar con Podemos. En ese sentido el fundador del Grupo Calafate dio a entender en su primera gira internacional que al momento de hacer el check in sumó en el equipaje la elasticidad con la que viene construyendo su marco de alianzas local. En apenas unas horas Fernández escuchó a un fuerte inversor financiero, pero también a un referente del pensamiento antineoliberal.
Precisamente, Alemán comentó a Diagonales cómo fue el clima del encuentro: “Tuvimos una conversación muy amable sobre la situación política española. Quiso saber mi opinión ya que llevó 42 años viviendo aquí. Me parece que la repercusión de su visita a España ha sido muy exitosa ya que ha logrado hablar con un amplio abanico de actores políticos y económicos de este país. Y no me parece casual que haya pasado eso porque Fernández cumple con condiciones muy pertinentes para representar con solvencia a la Argentina en el exterior. Y lógicamente también hablamos de la grave coyuntura argentina y de los tiempos que se vienen”.