Tras varios cuestionamientos y acusaciones cruzadas por la inseguridad en el Área Metropolitana de Buenos Aires, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, se reunió este lunes con su par porteño, Waldo Wolf, para avanzar en una agenda de trabajo conjunta. 

La cumbre tuvo lugar en el comando de Puente 12 de la Policía Bonaerense en La Matanza, luego del crimen del oficial porteño Brian Coria, un policía de la Ciudad que fue asesinado por un delincuente para robarle la motocicleta en Morón. Tras el hecho, desde la administración de Jorge Macri responsabilizaron directamente al gobierno de Axel Kicillof. 

El propio jefe de Gobierno porteño señaló entonces que “en lo que va del 2025, en la Provincia de Buenos Aires atacaron a un policía de la Ciudad cada 27 horas”. Y añadió: "Estos constantes y graves hechos de inseguridad ya se llevaron la vida de 13 de nuestros oficiales".

"Ante esta situación que requiere medidas urgentes, me reuní con la cúpula de la Policía de la Ciudad y llamé al Gobernador Kicillof con quien acordamos una reunión y ámbitos de trabajo entre nuestros ministros de seguridad, Waldo Wolff y Javier Alonso. Esto tiene que terminar Ya", afirmó Macri la semana pasada.

Tras esa conversación telefónica se especuló con una reunión entre Jorge Macri y Axel Kicillof, sin embargo, el encuentro fue entre sus ministros de Seguridad. En medio de fuertes tensiones entre ambas gestiones, Waldo Wolf y Javier Alonso concretaron una reunión clave ya que si bien no es la primera vez que las carteras de seguridad mantienen un encuentro de trabajo, la cumbre se dio en un momento álgido entre el gobierno porteño y el bonaerense. 

“Vamos abordar los diferentes planteos y desafíos que tiene la seguridad en el AMBA”, indicó Alonso antes de la reunión en declaraciones a Radio La Red. “El problema es cómo seguimos bajando los homicidios, como lo estamos haciendo. Pues si no pareciera que no se está haciendo nada, y no es así. Porque no es que atacan a los de la Ciudad. También hay gendarmes, policías federales, policías nuestros que son atacados cuando van a trabajar", subrayó el ministro bonaerense.

"Todos esos números, a lo largo de los años, fueron bajando, como bajan los homicidios en general”, enfatizó. 

Al mismo tiempo, Alonso dejó un claro mensaje para la administración porteña: “Nos duelen los homicidios de los bonaerenses que trabajan en la policía de la Ciudad, como nos duelen todos, pero si el jefe de Gobierno cree que hay un plan sistemático para atacar policías de la Ciudad, lo que corresponde es que haga una denuncia en la justicia federal y se investigue”.

El funcionario provincial remarcó que “la ciudad de Buenos Aires tiene 3 millones de habitantes desde hace décadas y recibe todos los días a 3 millones de personas que van a trabajar o que atraviesan la Ciudad para ir a otro lugar, en esa movilización de gente hay un montón que sufren delitos que en algún caso termina en un homicidio, tanto en la capital como en el conurbano”.

Alonso afirmó que la voluntad de la Provincia es siempre trabajar de forma coordinada. “Así lo estamos haciendo con el ministerio de Seguridad de la Nación, que es un trabajo serio, con equipos muy profesionales”, indicó. 

De todas maneras, a pesar de reafirmar la voluntad de diálogo, dejó un fuerte cuestionamiento para la la gestión de Jorge Macri: "Cuando vez al jefe de Gobierno de la ciudad más rica de Argentina que destina millones de pesos a perfumar los tachos de basura con fragancias de limón y se le escapan los presos de las comisarías, es un problema”.

Además, consideró que los cuestionamientos de CABA a la Provincia por el problema de la inseguridad son una estrategia de “marketing” en medio de una fuerte crisis política dentro del gobierno porteño. 

"Cuando el viceministro de Seguridad, Diego Kravetz, se va del ministerio para trabajar con La Libertad Avanza, demuestra que tienen problemas políticos al interior de su partido y quieren tapar esos problemas políticos y de gestión discutiendo un tema con una perspectiva muy distorsionada”, sentenció.