Chats filtrados y acusaciones cruzadas: La sesión del Senado aumentó la tensión entre Milei y Villarruel
En medio de la polémica por la validez o no de la expulsión de Edgardo Kueider, desde el entorno del Presidente y la Vicepresidenta se acusan mutuamente de ser responsables por la posible revocación de la votación que tuvo lugar ayer en la Cámara Alta
Cuando ayer el Senado votó a favor de la expulsión de Edgardo Kueider del Senado, Victoria Villarruel presidía la sesión. Este hecho que en otras circunstancias no tendría nada novedoso, pero en el día de ayer abrió la puerta a una posible revocación de la decisión de romover al ex legislador de su cargo. Es que para ese entonces, Javier Milei ya estaba fuera del país rumbo a Italia y, por ende, Villarruel, ejercía funciones presidenciales y no podía encabezar la discusión parlamentaria.
El error técnico, que algunos opositores acusan de deliberado, abrió la posibilidad a un amparo presentado por el propio Kueider ante la Justicia Federal para pedir que se anule su expulsión y se lo restituya en la banca.
El hecho generó una fuerte polémica, pero más allá de las críticas de fuerzas opositoras, la sesión del Senado profundizó la interna entre Milei y Villarruel, quienes se acusan y responsabilizan mutuamente por el error.
Desde Casa Rosada, aseguran que Villarruel había sido informada 48 horas antes del viaje al exterior del Presidente y filtraron unos chats en el que se informó que el mandatario dejaría el país el jueves 12 de diciembre a las 12 del mediodía; hora en la que aproximadamente empezó el debate en el recinto.
De acuerdo a esta versión de los hechos, Villarruel debería haber sabido que no podía encabezar la sesión que destituyó a Kueider.
Sin embargo, desde el entorno de la vicepresidenta señalan a Karina Milei por el atraso administrativo en el traspaso de poder tras el viaje de Milei y aseguran que la titular del Senado recién firmó los papeles para hacerse cargo del Ejecutivo a las 19 horas, mucho después de la votación del Senado.
De esta manera, Presidencia y Vicepresidencia se acusan de haber cometido los errores que ponen en duda la constitucionalidad de la sesión en el Senado y que podrían resultar en la restitución de Kueider en su banca aunque, en medio del escándalo, surge una duda: ¿error o estrategia?.