El PRO huele la sangre oficialista brotando de las heridas infringidas por la interna y la difícil situación económica que sufre la población y se entusiasma. La posibilidad de una nueva ola amarilla como la de 2015 tiene al partido de Mauricio Macri envalentonado, aunque la otra cara de la moneda es que, a diferencia de aquel año en que llegaron a la presidencia y la gobernación bonaerense, hoy en día florecen candidatos para lugares que no sobran y la conducción del espacio no termina de estar 100% definida como lo era entonces.

A pesar de que la idea de recuperar la Nación y la Provincia está presente en la vereda amarilla de la grieta, también hay noción de que el escenario nacional aparece más accesible que el provincial por dos cuestiones: la fuerza del peronismo/kirchnerismo en la PBA con el peso específico de CFK, que no se replica con la misma intensidad en el resto del país, y el hecho de que el sistema electoral bonaerense no tiene segunda vuelta, se gana por un voto. Estos elementos suman a la concepción lógica de que la candidatura presidencial ordena la de gobernador, y en esta clave pueden leerse los movimientos que vienen dándose en el principal partido de la oposición.

Hay cuatro candidatos claros a presidente para integrar la fórmula que compita en las PASO con los radicales, algunos más declarados que otros pero todos ya jugando su partido. El primer anotado, ya desde el momento en que Juntos por el Cambio perdió las elecciones en 2019 y mucho más luego de su rol durante la pandemia, es Horacio Rodríguez Larreta. Por su parte, Patricia Bullrich, a quien se la nombró para todos los puestos ejecutivos posibles en los últimos años, viene diciendo hace tiempo que su única aspiración es competir por la presidencia. Luego del período de silencio tras la dura derrota que sufrió con Axel Kicillof en la PBA, María Eugenia Vidal reapareció con su candidatura en la CABA en 2021 y hoy, lejos de anclarse en el territorio cuna del PRO apostando a una candidatura a jefa de gobierno, recorre el país mostrándose como figura nacional. Por último, aunque su primacía absoluta en el espacio está siendo puesta en cuestión, no caben dudas que Mauricio Macri sigue liderando al PRO y cada vez más sus movimientos permiten especular con una candidatura al “segundo tiempo”.

LARRETA - SANTILLI

Cada una de esas propuestas nacionales del PRO tiene su correlato en la provincia. La más clara de todas es la sociedad porteña que arrancó en 2015 entre Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli. El ex vicejefe de gobierno fue la gran apuesta de Larreta en 2021, y por su salto a la provincia el hoy precandidato presidencial tuvo que rosquear a fondo con los intendentes del PRO y hasta ceder espacios en su territorio de la CABA. La jugada resultó un éxito electoral y a partir de allí Santilli tuvo pista libre para empezar a construir su candidatura a gobernador.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Hoy “el colo” está lanzado a recorrer la provincia, en el interior y en el conurbano, y cada tanto a esas recorridas se suma Larreta en un claro objetivo de mostrarse en tándem. La última fue el viernes pasado en Junín y Lincoln, municipios de la Cuarta Sección de intendencias PRO y radical respectivamente. Un día antes habían estado en Quilmes y el mes pasado visitaron La Matanza, territorio clave para la necesidad de votos que ambos tienen en sus respectivas aspiraciones de derrotar al peronismo. Esta mañana, en línea con la estrategia conurbano, Santilli estuvo en Morón.

Hay un tercer punto de esa sociedad que completa el triángulo y que también jugará su papel en la pugna por candidaturas. Jorge Macri, quien fuera el principal detractor del salto del colorado por sobre la General Paz a raíz de sus propias aspiraciones a la gobernación, hoy está consolidado en la estructura porteña como Ministro de Gobierno y se perfila casi sin oposición a ser el candidato a Jefe de Gobierno. La retirada de ex intendente de Vicente López de la competencia por el Sillón de Dardo Rocha fue clave para apuntalar a Santilli en la PBA, ya que desarmó el núcleo de jefes comunales Grupo Dorrego, que hoy está desperdigado entre las distintas alternativas. Dentro de ese triángulo consideran que las respectivas candidaturas a presidente, gobernador y jefe de gobierno son las naturales del PRO, y en off le bajan el precio a las alternativas que hoy intentan mostrarse con peso propio.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

MACRI - GRINDETTI

La principal disputa amarilla sin dudas es la que libran Mauricio Macri y Rodríguez Larreta. El Jefe de Gobierno no termina de animarse a desplazar al padre político del PRO, y el ex presidente toca todas las puntas mostrando su capacidad de daño y dejando en claro que todavía las decisiones pasan por él. En ese esquema, Macri sumó recientemente un poroto importante: mientras muchos de los referentes de la coalición ya se manifestaron en varias ocasiones con la intención de jubilarlo, un hombre fuerte de la provincia salió a pedir con todas las letras su candidatura presidencial.

“Macri merece un segundo tiempo” dijo nada más ni nada menos que Néstor Grindetti, Intendente de Lanús y hombre del PRO desde sus primeras horas. Se mostraron juntos hace una semana en Monte Chingolo, en una visita a una casa donde operaban narcos que fue recuperada en 2018, todo un mensaje de campaña. Con la disolución en los hechos del Grupo Dorrego, Grindetti, como el resto de los intendentes PRO, quedó a la deriva y con la necesidad de encontrar un espacio para encuadrarse de cara al 2023. En el entorno del lanusense expresaron a Diagonales que “el lugar natural de Néstor es con Macri. Se conocen hace 40 años y militan juntos hace 20. Mauricio lo convocó a la fundación Creer y Crecer para pensar el presupuesto de la Ciudad y Néstor en está en la política desde ese lugar”.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Esta asociación natural, dicen desde Lanús, no implica ni que Macri vaya a ser candidato a presidente ni que Grindetti lo sea a gobernador. Explican que ese apoyo mutuo tuvo distintos momentos, como cuando en 2015 el hoy dos veces intendente le planteo a Macri que no quería sumarse a su gabinete de ministros porque aspiraba a la “patriada” de ganar en Lanús. “Macri acompañó esa decisión, y hoy es un poco lo mismo, entiende que Néstor ya cumplió su ciclo como intendente y trabaja para la construcción de una alternativa en la provincia”.

Desde Lanús entienden que la lapicera del PRO la tiene Macri y que eso es natural. “Es el fundador y líder del espacio, fue presidente y está un paso adelante del resto. Además, nuestro electorado se referencia con él, toca una fibra que no toca nadie más” afirman. Y si bien no tienen la perspectiva de que vaya a haber una interna PRO, que las candidaturas se resolverán sin la necesidad de esa instancia, también dejan en claro que Macri es “el árbitro” del espacio a la hora de tomar definiciones de ese nivel.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Grindetti lanzó recientemente el partido Hacemos Juntos con Julio Garro, otro de los jefes comunales al que no hay que sacar de la conversación. El objetivo del espacio es convocar a peronistas no kirchneristas para sumarlos al armado de Juntos, y en la división interna Garro asumió la construcción en el interior provincial y Grindetti en el conurbano. Sin embargo, aunque desde Lanús afirman que todo sigue sobre ruedas, en la práctica Garro se muestra cada vez más cerca de Larreta mientras que Grindetti  considera que el Jefe de Gobierno porteño no respetó el acuerdo del 2021 por el cual la candidatura a Diputado de Santilli no significaba su candidatura a Gobernador en 2023. No juzgan que esa inclinación del presidenciable esté mal y hasta la consideran genuina, pero insisten en que no fue lo acordado el año pasado.

En ese cuadro es que Grindetti se acerca a Macri, contrapesando en los hechos las aspiraciones de Larreta, y se mueve por la provincia por fuera de la división acordada con Garro. Dentro de dos fines de semana participará de la inauguración de un local del PRO en Balcarce, irá a Mar del Plata y Pinamar. Al siguiente, visitará Chacabuco y 9 de julio. No sería nada extraño que en alguna de esas incursiones al interior bonaerense lo acompañe el ex presidente.

VIDAL – RITONDO

Con un poco menos de presencia en la discusión interna, la ex gobernadora y el presidente del bloque del PRO en la Cámara de Diputados de la nación también se anotan para el 2023. Vidal, que hasta el desembarco de Jorge Macri en la CABA era número puesto para la candidatura a la jefatura de gobierno, hoy parece más enfocada en construir una imagen nacional. Tres de sus últimos destinos marcan el recorrido de punta a punta del país: la semana pasada estuvo en misiones, mientras que en mayo viajó a Ushuahia y también estuvo en Córdoba. Extremos norte, sur y el centro.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Si se sigue su discurso, también puede observase que polariza mucho más con el Gobierno nacional y figuras como el Presidente o la Vicepresidenta que con Axel Kicillof. “María Eugenia dijo que quería ser candidata y está recorriendo el país” respondieron desde su entorno a la consulta de Diagonales sobre si está construyendo una candidatura presidencial.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Ritondo, por su parte, ya salió con fuerza a poner sobre la mesa su intención de ser candidato a Gobernador. Con la alta competencia en territorio bonaerense, el ex ministro de Vidal necesita hacerse notar y ganar terreno frente a otros competidores posicionados con referentes nacionales más pesados que Vidal. Ritondo también tiene una agenda cargada de visitas a la provincia, y desde el vidalismo consideran que “el diferencial que tiene Cristian son cuatro años de gestión al frente del ministerio más complicado de la provincia”. Vidal y Ritondo tendrán que disputar sus candidaturas con contendientes de peso, pero en su espacio coinciden con el entorno de Grindetti en que esa definición se ordenará sin la necesidad de unas PASO.

BULLRICH – IGUACEL

Quizás la pre candidatura presidencial más voluntarista de todas las que danzan en el PRO, por su falta de experiencia al frente de un Ejecutivo, es la de Patricia Bullrich. Sin embargo, la ex ministra de seguridad supo convertirse en una de las principales voceras de la oposición, liderando el ala dura de los halcones y no es un dato menor que sea la presidenta del partido.

Lanzada como está, Bullrich ya presentó una especie de plataforma con propuesta de gobierno en caso de ser electa y es quien más explícitamente nombró a quienes serían posibles ministros de su gestión. El problema al que se enfrenta es que su discurso extremo se pisa con el de Macri, y dentro de la coalición choca con la postura de los radicales y la de Elisa Carrió, como quedó expuesto cuando le bloquearon la incorporación de Milei a Juntos por el Cambio.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Esa alianza con la ultraderecha libertaria es el escenario que más cómodo le quedaría a Bullrich, pero hoy parece poco probable que la coalición opositora sea traccionada hacia ello, mucho más cuando Milei cae en las encuestas tras sus últimas declaraciones radicalizadas por demás. El mayor beneficiado con ese escenario es Larreta, que teje alianzas con los radicales y Carrió para cerrar entre ellos la interna de JxC para el año que viene, marginando las opciones más extremas de Macri y Bullrich.

El alfil de la ex ministra en la provincia es Javier Iguacel, Intendente de Capitán Sarmiento, un municipio de 20 mil habitantes en el cual el jefe comunal afirma que no hay planes sociales gracias al pleno empleo alcanzado bajando impuestos en plena pandemia. Algo así como el mundo ideal del PRO.

Cuatro parejas PRO en disputa amarilla por la candidatura a Presidente y Gobernador

Iguacel le puso picante a la discusión interna esta mañana, cuando en una entrevista con Jorge Fontevecchia dijo que le parecía bueno desde lo democrático el que haya muchas opciones para la candidatura a gobernador, y que “lo positivo también es que muchos somos bonaerenses y no porteños”. Misil teledirigido a Diego Santilli y la estrategia larretista.

Así viene el panorama del PRO de cara a un 2023 que se acerca cada vez más rápido. Todos se anotan, todos en modo campaña. Las tensiones irán in crescendo y la principal incógnita a despejar es a quién le subirá y a quién le bajará el pulgar el ex presidente Macri o si él mismo decide ser candidato. Gran parte de la coalición ya se manifestó en contra de esa posibilidad, pero hoy nadie más que él juega como el jefe del espacio. Habrá que ver si la multiplicidad de posturas, discursos y pre candidatos termina siendo un valor o un problema para la oposición.