Luego de largas negociaciones, con idas y vueltas, el Gobierno acordó con las cámaras empresariales y la CGT el pago de un bono de $5 mil a trabajadores del sector privado, suma que tendrá carácter no remunerativo, aunque sectores empresarios tuvieron que salir a aclarar que no se trata de un bono sino de un aporte obligatorio de recomposición salarial a cuenta de furturas paritarias.

El convenio se logró tras una reunión en el Ministerio de Producción de la que participaron su titular, Dante Sica; su par de Desarrollo Social, Carolina Stanley; el secretario de Comercio, Ignacio Werner; y directivos de cámaras empresariales y de la central obrera.

Este martes por la mañana volverán a reunirse para definir la "letra chica" del acuerdo y la forma de pago, y aunque se estima que podría ser en un solo pago, no todas las partes están de acuerdo.

El gobierno informó que "durante el encuentro, las partes acordaron una recomposición salarial obligatoria de $5000 para los trabajadores del sector privado. La misma será de carácter no remunerativo y a cuenta de las próximas revisiones paritarias".

A pesar de esto, desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), por ejemplo, advirtieron que "no se trata de un bono sino que se acordó una recomposición salarial".

En un breve comunicado,  tras el encuentro con Sica, el sector sindical y empresarial, la entidad afirmó que "se acordó que no habrá un bono, sino un aporte obligatorio de 5 mil pesos de recomposición salarial no remunerativo, en cuotas y a cuenta de paritaria".

CAME aclaró que los términos se terminarán de definir mañana y pidió que dicho pago se ejecute en al menos cinco cuotas.