El mate y la yerba argentina se convirtieron en las nuevas víctimas de la motosierra y la licuadora
En los primeros diez meses del año, el consumo interno de yerba mate se consagró como el más bajo de los últimos ocho años
Si hay un elemento que caracteriza a la Argentina y a sus habitantes es el mate y la producción de una gran variedad de marcas nacionales de yerba. Sin embargo, el sector hoy está en crisis.
El Instituto Nacional de la Yerba Mate reveló que en los primeros diez meses de 2024, se derrumbó el consumo interno de yerba en todo el país.
Según el informe de la entidad, el consumo interno tuvo una caída interanual del 8,9% y quedó en el peor nivel desde 2017. En tanto, en términos intermensuales, registró una retracción de 5,7%, mientras que, en comparación a octubre de 2023, reflejó una disminución de 10,0%.
Ahora bien, durante los primeros diez meses de 2024, crecieron las importaciones de yerba mate (canchada y molida lista para empaquetar) provenientes de Paraguay y Brasil. Las mismas alcanzaron 10,4 millones de kg, cifra que se traduce en un aumento del 124% en comparación de 2023.
Es decir que, en el marco de una marcada pérdida del poder adquisitivo de la población, la importación de yerba desde países limítrofes tuvo un impacto directo sobre la venta de yerba producida en el país.