Guzmán sobre el acuerdo con los bonistas: "No trabajamos para nosotros, trabajamos para Argentina"
El ministro de Economía celebró el resultado de las negociaciones con los fondos de acreedores, pero aseguró que todavía quedaban varios desafíos pendientes
Luego de que esta madrugada el Ministerio de Economía confirmase el éxito de las negociaciones con los fondos de acreedores, el titular de dicha cartera, Martín Guzmán, brindó detalles sobre el acuerdo durante una conferencia de prensa en el Microcine del Palacio de Hacienda.
Cuatro meses pasaron hasta que finalmente el Gobierno Nacional llegó a un acuerdo con los representantes del Grupo Ad Hoc de Bonistas Argentinos, el Comité de Acreedores de Argentina y el Grupo de Bonistas del Canje y otros tenedores. “Es un paso muy importante en el proceso de tranquilizar a la economía argentina y resolver la crisis que el país enfrenta desde abril de 2018", expresó Guzmán en su exposición.
"Cuando nuestro Gobierno asumió el 10 de diciembre de 2019, nos propusimos como primer objetivo generar condiciones de normalidad, de tranquilizar a una economía que estaba en una situación de altísima ansiedad”, describió el ministro. “El país venía transitando una profunda caída en el nivel de actividad y los indicadores sociales y económicos venían en deterioro", agregó.
En ese contexto, el ministro aseguró que uno de los objetivos centrales de la gestión era “proteger a los sectores más vulnerables” y “poner al país en la senda del desarrollo inclusivo, dinámico y sostenible”.
Además, Guzmán aseguró que estábamos enfrentando “una situación de endeudamiento externo insostenible, Argentina tenía una carga de deuda que no podía hacer frente". En ese sentido, el ministro fue muy crítico de la gestión y política económica del gobierno de Mauricio Macri.
"En 2018, a solo dos años de haber accedido al crédito internacional, Argentina pierde ese crédito, pide un préstamo al FMI que no resulta útil para ayudar al país y el país sufre tres crisis cambiarias en dos años", expresó Guzmán.
Asimismo, detalló que desde ese entonces “Argentina ya estaba en una situación que corresponde a condiciones de default de la deuda externa. Nosotros nos propusimos resolver este problema".
Respecto al acuerdo alcanzado esta madrugada, el funcionario nacional destacó que “aquí no se acaban los problemas” y que “la reestructuración sigue abierta, continuamos invitando a aquellos acreedores que aún no se han decidido”. Además señaló que todavía quedaban pendientes las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional.
Sin embargo, aseguró que se trataba de un logro fruto del esfuerzo y que "era necesario" para seguir un plan de desarrollo sostenible y darle al país "una plataforma de despegue". Por ese motivo, señaló que el acuerdo no beneficiaba a un gobierno, sino al país: "No trabajamos para nosotros, trabajamos para Argentina", expresó Guzmán.
Lo cierto es que el acuerdo con los principales grupos de acreedores de la deuda pública permitió reestructurar más de 66.000 millones de dólares en bonos bajo legislación extranjera. El titular de la cartera de Economía tamabién señaló que para la Argentina implica una carga menor de deuda por 42.500 millones de dólares durante los primeros cinco años.
En una conferencia de prensa, aseguró que la negociación permitió reducir los intereses de un monto estimado en 7 dólares promedio a 3 dólares por cada 100 dólares en poder de los bonistas, junto con una reducción del capital del 1,9%.
Las fechas de pago sobre los nuevos bonos serán el 9 de enero y el 9 de julio de 2021, en lugar del 4 de marzo y el 4 de septiembre del año próximo. Mientras tanto, los nuevos títulos a ser emitidos como compensación por intereses devengados y por consentimiento adicional comenzarán a amortizar en enero de 2025 y vencerán en julio de 2029.
Por su parte, Alberto Fernández celebró el acuerdo alcanzado por el ministro de Economía y aseguró que le otorgaba al país "autonomía en su poder de decisión". Además envió un mensaje a los empresarios y sostuvo que el éxito en las negociaciones con los bonistas también implica que éstos "puedan acceder al crédito, volver a producir y así recuperar el empleo".