En su necesidad por volver a seducir y convocar a una sociedad desencantada por los resultados económicos de la gestión, el Gobierno enfrenta muchos desafíos a la vez. Uno de ellos, y de principal centralidad para la identidad del peronismo, tiene que ver con recuperar su penetración en sectores de la juventud. Históricamente el peronismo representó las aspiraciones de los jóvenes por los cambios sociales y económicos que generaran mejores condiciones de vida para la población. Hoy, ese sentido común aparece muy disputado por identidades políticas de derecha, que con apologías a la libertad individual y de mercado, muchas veces vacías de contenido más allá de fórmulas marketineras y contestatarias, vienen ganando terreno en la juventud a costa de un retroceso del peronismo y el kirchnerismo. 

En esa disputa, conceptos clave y que pegan de lleno en una nueva realidad del mundo del trabajo, como la innovación, la modernización y el emprendedurismo, fueron inteligentemente apropiados por el macrismo y hoy se asocian generalmente a ese espectro de la política. El Gobierno del FdT, por su parte, intenta dar esa batalla a partir de políticas públicas destinadas a los sectores de la Economía del Conocimiento, el emprendedurismo y la innovación joven.

Lo primero a resaltar en este debate pasa por lo estratégico del fomento a la Economía del Conocimiento y la innovación como un subsector específico, a partir de datos económicos. El 2022 representó el mejor año del que se tenga registros en materia de exportaciones de Servicios Basados en el Conocimiento (SBC). Las ventas externas de este complejo de la economía superaron los 7.8 mil millones de dólares y las importaciones rozaron los US$ 7.000 millones, marcando un crecimiento interanual de la actividad en el sector del 19,6%. 

Esto ubicó a los SBC como el quinto complejo exportador del país el año pasado, por debajo del Oleaginoso, el Cerealero, el Petrolero-Petroquímico y el Automotor. Los SBC explicaron el 7,6% de las exportaciones argentinas en 2022 y si bien en años anteriores el sector ocupó el tercer y cuarto lugar en ese ránking, su descenso al quinto puesto el año pasado no se debió a una caída en la actividad, que de hecho creció y marcó récords, sino a una explosión en el precio de los commodities producto de la guerra en Ucrania.

Esto, a su vez, significó un importante crecimiento del empleo en el sector. En el tercer trimestre de 2022, el empleo asalariado registrado en actividades vinculadas a SBC tuvo un alza interanual del 6,4%. La Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC estimó en 1,3 millones a los ocupados en actividades en relación con los SBC. Y en este punto es preciso resaltar un aspecto relevante: mientras un 37,9% de esos trabajadores fueron asalariados registrados, un 12,2% asalariados no registrados y un 5,6% empresarios, el 44,2% se declararon cuentapropistas. Este dato marca un sector fuertemente atravesado por el emprendedurismo.

EL INTERÉS DEL GOBIERNO

En este contexto, el oficialismo viene desarrollando esfuerzos por fomentar los SBC y la innovación, y acercarse desde ahí a un sector de la juventud que hoy encuentra en esas actividades proyecciones laborales, económicas y de vida. El tema ya se instala incluso en la campaña electoral, y hace unas semanas el propio Sergio Massa, ministro de quien depende la Secretaría de Economía del Conocimiento, destacó ante la cámara de comercio de EEUU en Argentina al sector como uno de los cinco pilares del desarrollo del país. Massa resaltó la inversión pública para formar 70.000 programadores y expresó que “lo mejor que puede hacer el próximo gobierno es obligar a que en la escuela secundaria la programación sea parte del aprendizaje de los alumnos”.

Del 19 al 23 de abril, el predio ferial de Tecnópolis se vio colmado por la Feria IT Joven, una iniciativa del Instituto Nacional de Juventudes (INJUVE) y ARSAT, que convocó a miles de jóvenes para fomentar el conocimiento de las posibilidades que ofrece un sector en crecimiento. Decenas de charlas y stands expusieron debates y actividades desde cómo volar un drone, la potencialidad de la tecnología 5G, el mundo de los E-Sports, las aplicaciones de la Inteligencia Artificial, y las nuevas habilidades y oportunidades para la juventud de emprender en la era digital. Gigantes de la industria como Globant, Microsoft, Huawei y Accenture, 17 provincias, Ministerios y Secretarías nacionales fueron parte de los  63 stands que se pudieron visitar, en una feria que marcó todo un suceso en la relación entre el mundo de la innovación tecnológica, la juventud y el Gobierno.

Importantes autoridades nacionales como Agustín Rossi, Matías Lammens, Daniel Filmus, Victoria Tolosa Paz, Jaime Perczyk, Ariel Sujarchuck, Juan Manuel Olmos, Silvina Batakis, Tristán Bauer, Kelly Olmos y Carla Vizzotti, entre muchos otros, se dieron cita en la feria a la que también asistieron más de 100.000 jóvenes. La presencia del Presidente fue la frutilla del postre que marcó el interés del oficialismo por darle importancia a este sector. “Ha sido un placer encontrarme con tantas y tantos jóvenes. La ciencia y la tecnología nos permite construir el futuro y he visto aquí, en nuestras juventudes, un verdadero ejemplo de compromiso y dedicación que nos enorgullece” dijo en ese contexto Alberto Fernández.

EN BÚSQUEDA DE UN NUEVO UNICORNIO

Otra de las políticas del Gobierno nacional que se destacan este año en la búsqueda por interpelar a la juventud y el emprendedurismo es el programa Potenciar Nuestra Innovación (PONI). Bajo el lema “todo unicornio fue primero poni”, el Injuve, la Subsecretaría de Desarrollo Emprendedor del Ministerio de Economía y la Fundación EMPRETEC, lanzaron un concurso público para emprendedores jóvenes con la finalidad de potenciar emprendimientos que ayuden a crear soluciones innovadoras de carácter tecnológico, social y ambiental. 

La búsqueda apunta a ideas-proyecto que no se encuentren en funcionamiento o emprendimientos que ya estén en curso, y abarca una amplitud de ámbitos que van desde las mejoras para procesos productivos, propuestas que resuelvan problemas de personas y/o comunidades en materia de ocio, salud, educación, hogar, conectividad, inclusión social, transición energética, calentamiento global, mejora de procesos para disminución de huella de carbono, implementación de sistemas de monitoreo ambiental, economía circular, entre otros. Pensado para el segmento joven, Poni convocó la participación de personas entre 18 a 29 años que residan en todo el territorio nacional, así como también de PyMEs y Cooperativas en cuya composición societaria más del 50% de las y los integrantes sean jóvenes de entre 18 y 29 años. 

Julia Epstein, Directora del Injuve, afirmó en conversación con Diagonales “sabemos que en Argentina hay muchísimo talento. Empresas como Mercado Libre, Ualá, Despegar, Globant o OLX son unicornios que fueron creadas en el país por pibes sub 30 y hoy son referentes en el mundo. Esa creatividad la estamos viendo también en esta primera edición de Poni, con más de 470 ideas innovadoras presentadas, de todo el país. El mejor aporte que podemos hacer como Gobierno es reconocer esa demanda de las y los jóvenes y construir políticas públicas que le den respuestas. Poni es una de ellas”.

El pasado 30 de abril cerró la inscripción al concurso con un total de 472 proyectos presentados, de los cuales 155 cumplieron los requisitos para participar por los cuatro premios de $2.000.000 que se anunciarán a fines de junio. Previamente, el 31 de mayo se conocerán los 10 proyectos finalistas entre las 85 propuestas de soluciones innovadoras de carácter social y ambiental y las 70 de soluciones innovadoras de carácter tecnológico. La gran participación de jóvenes innovadores y emprendedores en el concurso, reflejada en la cantidad de proyectos presentados, resaltan la importancia del sector y la penetración que logró el Gobierno con esta política de fomento para un segmento que a priori podría pensarse como refractario al oficialismo y más cercano a la idea de la meritocracia macrista.

LA DISPUTA POR LOS EMPRENDEDORES Y LA JUVENTUD

La revolución global que significó en las últimas décadas la explosión de las Tecnologías de la Información y el Conocimiento (TIC) y su impacto en el sistema productivo y el mercado laboral, se vieron fuertemente potenciadas por la pandemia. Los cambios en el sentido del teletrabajo y la autonomía marcan a las nuevas generaciones en cuanto a sus aspiraciones y proyecciones de vida, y los sectores políticos que mejor puedan interpretar y representar esas demandas obtendrán una ventaja competitiva no sólo en el presente sino también y fundamentalmente a futuro. 

En ese sentido, el desafío para el peronismo pasa por no regalar esas representaciones al sentido común que las emparenta con la idea de modernización que supo vender el macrismo. “Hay sectores de la política que por izquierda creen que emprender es liberal e individualista y, por lo tanto, desconocen el sector. Otros, por derecha, se arrogan esa representación pero no ofrecen ninguna política pública que lo potencie” analiza Epstein. La Directora del Injuve sintetiza una mirada que busca expandirse desde el oficialismo con el objetivo de interpelar a ese segmento de la sociedad: “Nosotros no gobernamos sólo para lo que nos gustaría que pase sino también para lo que sucede realmente. Y lo que sucede es que miles de pibes emprenden, solos o de manera colectiva, que lo hacen para generar un impacto económico pero también social y comunitario y que, además, están construyendo uno de los sectores exportadores más competitivos de nuestro país”.

Estos debates se dan en un contexto de cambios tan profundos y dinámicos que muchas veces tardan en ser asimilados por las estructuras políticas. En esa línea, el intento del FdT por interpretar las demandas de la juventud en relación al mercado del trabajo parte de una lectura de la coyuntura. “Muchos jóvenes se crean su propio trabajo porque las expectativas respecto al empleo también cambiaron” explica al respecto Julia Epstein, y agrega “deciden emprender porque no quieren laburar 8 o más horas en una oficina. Quieren manejar sus horarios y hasta trabajar remoto para viajar. No pretendemos hacer un juicio de valor sobre eso sino pensar políticas públicas que lo acompañen”. 

En la Argentina esto se ve potenciado, además, por el impacto que tiene el desempleo en la juventud. Los jóvenes son el segmento al cual más le cuesta conseguir un trabajo estable, y hoy en día 1 de cada 6 no tiene empleo. En ese contexto, la búsqueda de un camino propio a través de un emprendimiento económico independiente empieza a ser una realidad cada vez más extendida y para la cual no muchos sectores de la política piensan incentivos y medidas fomento. “Si desde el campo nacional y popular no ponemos los esfuerzos necesarios por comprender esta nueva realidad del cruce entre la juventud y el mercado laboral, corremos el riesgo de perder representatividad frente a un sector social en expansión y con un potencial económico enorme para el crecimiento del país” concluye la Directora del Injuve.