Los salarios aumentaron por debajo de la inflación en marzo y se profundiza la caída en la Era Milei
En los primeros cuatro meses de gobierno, el IPC fue del 90%, mientras que los sueldos crecieron solo un 58%. La diferencia por rubro: el sector informal, el más lastimado por las subas.
El panorama económico es desolador para las clases media y baja de la República Argentina, donde este marzo, por quinta vez en los últimos seis meses, la actualización de salarios no le ha ganado a la inflación mensual y, lejos de eso, acumula ya una diferencia de más de 30 puntos entre los aumentos de sueldo acumulados y la variación de los precios durante el gobierno de Javier Milei, de acuerdo con los datos oficiales difundidos este viernes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Es que en el último mes el Índice de Salarios Total medido por el organismo que conduce Marco Lavagna arrojó una suba del 10,3% promedio, lo que lo ubicó nuevamente por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que fue del 11% en el mismo período. En esta oportunidad, la caída ha sido peor en el sector privado no registrado, donde las remuneraciones obtuvieron un incremento general del 9,7%, y en el privado registrado, con un alza del 10%; mientras que el sector público marcó 11% y empató a la suba de precios.
Sin embargo, las cifras se tornan escalofriantes al apilar los datos mensuales. La racha evidencia una clara pérdida de poder adquisitivo que, en lo que va de la Era Milei -es decir, de diciembre de 2023 a marzo de 2024- se tradujo en una diferencia de más de 30 puntos entre el IPC y los sueldos. De hecho, el cuatrimestre registró una inflación acumulada del 90%, pero los salarios aumentaron solo un 58% durante el mencionado período. A ello se suma la complicada situación que enfrentan los miles de trabajadores despedidos en los sectores público y privado.
Con todo, el panorama se complementa con un escenario más que escabroso arrastrado en los pasados doce meses. Es que en el último año los ingresos han subido un 200,8% acumulado, pero la inflación en el período marcó un descomunal 287,9%, lo que en la práctica implica una pérdida de poder adquisitivo de casi 90 puntos. La situación es más lamentable aún en el sector público, donde la variación interanual se ubicó, ahora sí, cien puntos por debajo de la suba de precios y cerró a 183,7%; y en el área informal, donde los sueldos subieron menos de la mitad que la inflación interanual: 129,2%.