Ayer la Argentina vivió horas de sorpresa y conflictividad. El temor reina en la ciudadanía más aún cuando se producen renuncias o desplazamientos inesperados. La salida de Luis Caputo del Banco Central trajo mayor preocupación por el rumbo de la política monetaria y sobre todo por reivindicarse -con el ingreso de Sandleris- el manejo del Fondo Monetario en la economía local. 

Hoy se espera que el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anuncie el nuevo "acuerdo" con el FMI junto a su titular, Christina Lagarde. El funcionario lo confirmó en una rueda de prensa que brindó junto al presidente Mauricio Macri. 

Dujovne desde Nueva York, anunció ayer por la  noche que  "el Fondo Monetario Internacional está terminando su trabajo de revisión formal de la propuesta y lo va a someter a una discusión informal con el board". 

"Si no ocurre nada extraordinario, mañana por la tarde estaríamos en condiciones de anunciar el acuerdo", lanzó el funcionario macrista. 

Luego al ser consultado sobre el tipo de cambio respondió: "No hay que esperar sorpresas. Argentina mantiene su esquema de tipo de cambio flotante con libertad absoluta pero hay retoques a la política monetaria". 

Lo que aún falta conocer es de qué suma será la ampliación del préstamo. Si bien en un primer momento se especuló con que llegaría a ser de hasta U$S20.000 millones, el lunes se echó por tierra esa posibilidad, ya que la suma extra rondaría entre U$S3.000 y U$S5.000 millones.

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Por otra parte, la titular del FMI señaló en su cuenta de Twitter: "Tuve un muy buen encuentro con Macri. Estamos cerca de la línea final para alcanzar un acuerdo supervisado por el staff entre la Argentina y el FMI, que será sujeto a aprobación por parte del directorio ejecutivo".