Casi nadie escuchó rugir al león ayer en el Congreso. La cadena nacional deliberadamente ubicada en el prime time televisivo fue un rotundo fracaso: los espectadores huyeron apenas comenzó la transmisión y provocaron un apagón con cifras récord de intrascendencia. Este lunes, la bomba le estalló en las manos al presidente Javier Milei, por lo que decidió activar la TV Pública (TVP) libertaria para dar la versión “oficial” sobre “la polémica por el rating” y desplegar al ejército de trolls para bancar el relato, aunque los números no le cierran.

No es solo que la sociedad hable cada vez menos de Milei, como lo comprueba el fuertísimo estudio de Ad Hoc sobre la recepción de sus discursos más importantes. No es tampoco, únicamente, el bochornoso fracaso de la anticipadísima cadena nacional de ayer por la noche, cuando el prime time dominical tocó el piso de 3,5 puntos sumados entre todos los canales por primera vez en el año. Es mucho más que eso: es que el Presidente ve escurrirse su popularidad como arena entre sus dedos tras solo meses de mandato.

Por eso el líder libertario puso manos a la obra y se valió de la denostada señal estatal para difundir su propia versión sobre los vergonzosos sucesos. La TVP hizo caso y divulgó en la tarde de hoy un inusual mensaje en referencia a la “polémica por el rating” tras la presentación del Presupuesto 2025 en el Congreso: allí, afirmó que los términos “cadena nacional” continúan “siendo tendencia en medios y redes” – un hecho que es obviamente cierto, pero no por su éxito sino por su fracaso.

X de TVP

Junto a ello, la TVP oficialista brindó la “información oficial” sobre el impacto de la transmisión. “Primero, el rating en televisión abierta y cableoperadores alcanzó los 28 puntos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), esto implica una audiencia de 7,8 millones de personas en todo el país. Segundo, en YouTube la cobertura en vivo de los distintos medios de comunicación alcanzó a más de 1,4 millones de personas, lo que se traduce en 17 puntos de rating”, expresó el medio público por orden directa de la Casa Rosada.

Sin embargo, las fuentes independientes indican lo contrario. De acuerdo con la consultora Real Time, la transmisión logró solo 3,5 puntos entre todos los medios televisivos. Según mediciones de rating en vivo, el total de espectadores se hallaba por encima de los 14 puntos a las 21 en punto y se derrumbó hasta los 3,8 siete minutos después, con el Presidente ya en pantalla. Además, los propios trolls libertarios señalaron que en YouTube el público apenas llegó a los 200 mil espectadores simultáneos acumulados entre todos los canales. Los “números oficiales”, por lo tanto, no cierran por ningún lado.