La potente columna bonaerense en defensa de los jubilados

El día caliente que se vivió en las afueras del Congreso de la Nación tuvo una particularidad. Como no venía sucediendo en las últimas manifestaciones en torno a reclamos sociales, esta vez la dirigencia política puso el cuerpo para apoyar la protesta de los jubilados frente al veto de Javier Milei a la fórmula aprobada en Diputados y Senadores. Más allá de que el Gobierno logró desactivar los dos tercios en la Cámara Baja y sostuvo así el veto a la ley, otro de los datos políticos del día fue la protesta social y una parte de la dirigencia volvieron a articularse como en los albores de la gestión libertaria. Y en eso hubo un actor protagonista: el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.

Axel Kicillof y su tropa habían avisado en la previa que este miércoles estarían junto a los jubilados en las afueras del Congreso mientras Diputados debatía si ratificaba la ley que hace unos meses votó con dos tercios de la Cámara o si, por el contrario, reafirmaba el veto presidencial. La disposición de los bonaerenses para sumarse al reclamo por el sostenimiento de la ley y el rechazo al veto no quedó sólo en palabras.

Desde temprano, dirigentes de la primera plana del Gobierno provincial fueron cruzando hacia la CABA para congregarse pasado el mediodía sobre la Avenida de Mayo. Una imponente bandera que llevaba la leyenda “Provincia de Buenos Aires” junto al logo del Gobierno bonaerense era el techo sobre el que antes de que comenzara la sesión fueron agrupándose los principales referentes de lo que hoy puede denominarse como el “kicillofismo”.

A la espera de que llegara el gobernador, dirigentes como Carlos Bianco o Gabriel Katopodis se paseaban por la cabeza de la columna entre saludos y selfies con compañeros. “Estando donde hay que estar, acompañando el reclamo de nuestros jubilados y jubiladas bonaerenses pero también de todo el país, luego del veto de Milei a la fórmula que buscaba evitar que las jubilaciones sigan cayendo como lo hicieron casi un 20% de diciembre a esta fecha”, expresó a Diagonales el ministro de Gobierno bonaerense y principal comandante kicillosfista. Bianco agregó también un reclamo que desde la PBA ya se elevó a la Corte Suprema: “Reclamando también que el Gobierno nacional pague los fondos que le debe a la Provincia de la caja jubilatoria provincial”.

El armador histórico de Kicillof se refirió también a los diputados que cambiaron su voto para sostener el veto de Milei: “Es realmente penoso, habla más de ellos que de nosotros. Haber votado un proyecto y que al otro día tu jefe político apoye el veto, en el caso del PRO, y en el caso de los radicales también, bueno, lo tienen que explicar ellos”. Por último, Bianco se refirió a la presencia de la dirigencia política en la marcha, y expresó: "Nosotros desde la primera marcha masiva que hubo en enero estuvimos presentes, el gobernador estuvo presente, y obviamente que hoy deberían estar todos aquellos representantes del pueblo argentino reclamando por los derechos del pueblo argentino”.

Por su parte, Katopodis le dijo a Diagonales que “el único plan que tiene este Gobierno es el ajuste, le ha metido la mano en el bolsillo a los jubilados, le quita los medicamentos". En ese marco, remarcó: "Por eso estamos en la calle y no nos quedamos de brazos cruzados. No importa cuál sea el resultado dentro del Congreso vamos a estar donde tengamos que estar, vamos a poner el cuerpo y a defender a los que laburaron durante muchísimos años para que la Argentina sea grande”.

Luego, el ministro de Infraestructura bonaerense afirmó: "Tenemos en claro que la Provincia es un lugar de defensa, de resistencia, de ponerle un límite al ajuste de Milei. Por eso el Gobierno Nacional de manera permanente viene tratando de quebrar al gobernador Kicillof”. En relación al rumbo de la administración de Milei, Katopodis sentenció que “está mal frenar la obra pública y dejar a miles de familias en la calle, está mal pisar las jubilaciones porque se cae la actividad económica y el consumo, está mal recortarle los presupuestos a las universidades públicas en nuestro país”.

A Bianco y Katopodis se les sumó después otro de los ministros bonaerenses que forman la primera plana kicillofista: el titular de Desarrollo de la Comunidad Andrés “Cuervo” Larroque. Junto a ellos, dos intendentes completaban el primer anillo de la dirigencia bonaerense que rodea al gobernador: el jefe comunal de Ensenada, Mario Secco, y el de Avellaneda, Jorge Ferraresi, quien además sostiene una guerra a cielo abierto con La Cámpora y dos de sus pesos pesados en el conurbano, Mayra Mendoza (Quilmes) y Julián Álvarez (Lanús).

Tras un rato de espera la seguridad empezó a hacer espacio y Kicillof entró junto a Verónica Magario para completar la cabecera de la columna y comenzar a marchar por la avanida hacia la Plaza de los Dos Congresos. A medida que la columna avanzaba, las cuadras de militancia que seguían a los dirigentes iban marcando con sus banderas la pertenencia política del incipiente armado kicillofista. La Patria es el Otro, la agrupación de Larroque, era la primera en marcar presencia. Un poco más atrás, Patria y Futuro, la nueva organización que responde a Carlos Bianco aportaba lo suyo. También Camino a la Victoria, referenciada en la ex titular de Desarrollo Social Victoria Tolosa Paz.

La Eva Perón, agrupación que comanda Ferraresi y que tiene anclajes en Avellaneda, Lanús y otros distritos de la zona sur, continuaba la extensión de la columna. Peronismo de la Soberanía, un armado de Quilmes que no se ordena bajo la conducción de Mayra Mendoza y al que Ferraresi le da aire con sus incursiones quilmeñas, también sumaba volumen a la tropa bonaerense que seguía a Kicillof. Los territorios también llevaron gente a bancar el reclamo de los jubilados y darle músculo político al gobernador. Dieron el presente municipios como Avellaneda, Ensenada, Florencio Varela, y se veían banderas sueltas de otros distritos como Quilmes.

Otras organizaciones políticas del peronismo se movieron por separado y ya ocupaban un lugar en la plaza cuando la columna bonaerense comenzó a moverse. Fue el caso de La Cámpora y el Movimiento Evita, que desde temprano se ubicaron sobre Hipólito Yrigoyen y también llevaron a parte de su dirigencia bonaerense. Gildo Onorato, dirigente del Evita y titular del Instituto Provincial de Asociativismo y Cooperativismo de la PBA, expresó a Diagonales: “El Gobierno bonaerense abraza y protege con la gestión a quienes el Gobierno de Milei agrede con crueldad, y además acompaña los reclamos por recomponer los ingresos de quienes se manifiestan democráticamente. No vamos a abandonar a nuestros jubilados, como tampoco abandonamos a los trabajadores a los productores y a los cooperativistas. Axel y todos quienes somos parte de su gobierno no nos borramos, le ponemos el cuerpo a la resistencia de nuestro pueblo”.

Por su parte, Nicolás Kreplak, ministro de Salud bonaerense, dijo a Diagonales al costado de la columna de La Cámpora que “la guita del ajuste sale de los trabajadores y los jubilados, y eso no puede seguir pasando. La economía de este país se centra en pagar los intereses de la deuda, en concentrar la riqueza en los sectores más ricos. Al mismo tiempo que veta esta ley, el Gobierno reduce las coberturas de salud, reduce la obra pública, es decir que todo se traslada a gasto de las personas, que ganan cada vez menos. Así no se puede”. El funcionario provincial agregó que “no se puede permitir en un país democrático y pacífico como Argentina es que se le pegue y reprima a aquellos que hacen un uso legítimo de su derecho a reclamar. Este Gobierno insensible y violento no puede venir a pegarle a los jubilados, de eso no se vuelve”.

En un día que lamentablemente volvería a dejar tristes imágenes de represión, y en el cual el Gobierno Nacional logró con apenas una treintena de diputados propios sostener el veto a una ley que había obtenido dos tercios en ambas Cámaras, hay que sumar también la potente columna bonaerense como un dato político de la jornada. La posibilidad de construir una alternativa política al Gobierno nacional se jugará, fundamentalmente, en la fluidez y la articulación entre la dirigencia política y la protesta social. Este miércoles, en las afueras del Congreso, el Gobierno de la PBA avanzó en ese sentido.