La Unión Industrial Argentina (UIA) realiza este martes la 30° Conferencia Industrial con la participación de cientos de industriales, empresarios, políticos, académicos y economistas. Sin embargo, este año el encuentro tiene un sabor amargo producto de la decisión del presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, de no asistir al evento. Especialmente, debido a la lista de reclamos que sostienen los industriales en relación al valor del dólar, la apertura de las importaciones y la carga impositiva.

Desde la UIA quieren competir en igualad de condiciones y temen que las medidas económicas del Gobierno generen una mayor desigualdad en medio de una recesión que afecta a la gran mayoría de los sectores y actividades. 

Bajo el lema “Una industria productiva en un país competitivo”, la Convención arrancó a las 8.30 de la mañana en el Centro de Convenciones de la ciudad de Buenos Aires y se extiende hasta las 18 horas.

Durtante la jornada, la única presencia confirmada por parte del Gobierno nacional es la del secretario coordinador de Producción, Juan Pazo. El faltazo de Milei y Caputo generó un fuerte malestar entre los industriales que no hizo más que profundizar la tensión de la UIA con el Gobierno nacional ante la inminente apertura de importaciones. 

Los empresarios del sector sostienen que es necesario el diálogo para generar políticas que tiendan a una competencia leal y que no provoquen un impacto negativo en la producción nacional. Básicamente, le piden a la administración de Javier Milei, que si se abren las importaciones “se nivele la cancha" entre los competidores. 

En la apertura del encuentro, el presidente de Conferencia, Martín Rappallini, envió un fuerte y directo mensaje directo al Gobierno nacional: "Los industriales, no hemos tenido, no tenemos ni pedimos privilegios. No pedimos protección, queremos igualdad de condiciones para poder competir".

“Es ante la falta de igualdad que necesitamos una defensa, defensa del ataque de países que subsidian la producción, los insumos y las exportaciones. Países y sistemas que no cumplen con las reglas de comercio internacional establecidas”, afirmó. 

Rappallini sostuvo que “el Estado debe nivelarle la cancha a la industria nacional” y reivindicó al empresariado nacional frente a lo que calificó como “muchos ataques injustos”. "El industrial es un sobreviviente a un constante proceso de cambio. Somos nosotros los empresarios, que generamos empleo y pagamos los impuestos y sostenemos el Estado. Queremos respeto", lanzó.