Sánchez Córdova: vínculos con Macri y Angelici y los millones que recibió su banco y aparecieron en los bolsos de López

La vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, volvió a mostrar los dientes este jueves al mediodía, cuando publicó un documento que se suma a los que mostró en su alegato del martes en clave de exponer los vínculos entre el macrismo y los 9 millones de dólares hallados en los bolsos de López. Esta vez, sin embargo, no fueron conversaciones entre el ex secretario de Obra Pública y empresarios macristas lo que exhibió CFK, sino un documento que el mismísimo FBI remitiera a los Tribunales Orales de Comodoro Py por la causa que investiga el origen de los millones que López arrojara a un convento de monjas el 14 de junio del 2016.

“Esta no es de Netflix eh!” chicaneó CFK en el inicio del tuit en el que expuso el documento firmado por Paul Bingham, el Agregado Jurídico del FBI en Buenos Aires, que la Fiscalía General recibió el 20 de abril del 2018 a las 14:30 horas. “Ya transcurrieron casi 4 años y medio sin que ello se investigue. Lo dicho: no sólo persiguen a los peronistas sino que encubren a los macristas” fustigó la vicepresidenta cerrando su hilo de tuits. Pero, ¿qué es lo que la justicia no investigó y cuál es el vínculo con el macrismo?

Lo que el FBI comunicaba en el documento a los Tribunales de Comodoro Py era que, si bien no se había logrado clarificar la trazabilidad sobre la mayoría de los billetes de la moneda estadounidense encontrados en los bolsos de López, tal como había solicitado la justicia argentina, sí se consiguió establecer la procedencia de una parte de ellos. “La mayoría de los fondos incautados no fueron secuenciales, sin embargo un paquete sellado de  dólares de los EEUU que contenía billetes de $100, se encontró que estaban en orden secuencial” manifestó el Bureau Federal de Investigaciones (FBI).

La trazabilidad de esos billetes, cuya serie comenzaba en #37752001 y terminaba en #32784000, determinó que salieron de la Reserva Federal de EEUU a Commerzbank AG en Nueva York, y de allí fueron entregados puerta a puerta entre el 11 y el 12 de octubre del 2011 al Banco Finansur S.A., domiciliado en la calle Sarmiento 700 de la CABA. La cantidad exacta era de 3.2 millones de dólares, que se mantuvieron en fajos termosellados desde que salieron de la Reserva Federal hasta que fueron hallados en los bolsos de López.

“¿Banco receptor? Finansur S.A. propiedad  de Jorge Sánchez Córdova, macrista y ex tesorero de Boca durante la gestión de Angelici” complementó CFK su nuevo descargo.Y lo cierto es que hay bastante más para decir sobre Sánchez de Córdova que su paso por el club Boca Juniors y su calificación de macrista.

El nuevo apuntado por CFK (ya lo había mencionado en su alegato del martes) tiene una extensa trayectoria en el mundo de las finanzas, para nada exenta de vinculaciones con la política, escándalos y episodios judiciales previos. Con 70 años de edad, comenzó su carrera en las finanzas en la década de los 70 en la financiera Bullrich. Tras un paso por la Bolsa de Comercio, a fines de los 80 compró la firma de Bahía Blanca Finansur Compañía Financiera, que en la década siguiente convertiría en el Banco Finansur S.A., que casi 20 años después recibiría los millones que terminaron en los bolsos de López.

Sánchez Córdova amasó una importante fortuna dedicándose al intercambio financiero y el mercado cambiario. El Finansur se convirtió paulatinamente en un banco de nicho especializado en créditos Pyme, pero a inicios del segundo mandato de CFK cayó en el radar de un importante empresario ligado al kirchnerismo. Cristóbal López, por entonces exitoso empresario petrolero y del juego con fuertes vínculos con la Casa Rosada, quería desembarcar en el mundo bancario y ofreció más de una vez importantes sumas de dinero a Sánchez Córdova para comprarle el Finansur.

La operación se concretó en 2012, poco después de que la entidad recibiera los millones de la Reserva Federal de EEUU, y terminó de ser aprobada por el Banco Central recién en mayo del 2015, bajo la gestión de Alejandro Vanoli y tras el paso de otros presidentes de la entidad durante el proceso, Mercedes Marcó del Pont y Juan Carlos Fábrega. Cristóbal López adquirió el 70% de las acciones del Finansur, pero sostuvo a Sánchez Córdova como presidente del banco. Sánchez Córdova, a su vez, mantuvo el otro 30% del paquete accionario.

A la par que el fundador del Finansur hacía negocios con el dueño del Grupo Indalo, sus vínculos con el macrismo florecían en todos los ámbitos. Ya a principios de los 90 Sánchez Córdova compartió la firma Arfim S.A.con un contador público que también era Director de GNC Galileo, una empresa de Sideco, del grupo Macri. El nuevo apuntado por CFK mantuvo las relaciones con la familia Macri y siempre fue un importante patrocinador de la carrera política de Mauricio, para la cual aportó fondos. En 2015, Sánchez Córdova fue uno de los reconocidos asistentes a la cena de recaudación que Cambiemos realizó en La Rural.

Pero Sánchez Córdova no tenía vínculos solo con el ex presidente. En 2011, cuando Daniel Angelici ganó la presidencia de Boca Juniors, lo nombró Tesorero del club. El propio Angelici venía de ser Tesorero en administraciones previas y desde allí construyó su poder dentro del club, por lo que legar ese lugar de centralidad a Sánchez Córdova marca el nivel de relación entre ambos.

Los dos compartieron una gran piedra en el zapato en sus tiempos al frente de Boca Juniors: Juan Román Riquelme. El enfrentamiento entre el ídolo Xeneixe y actual vicepresidente segundo del club de la ribera y el operador judicial macrista y zar del juego porteño tuvo varios capítulos en distintas épocas, incluida la victoria en las elecciones del 2019 con la que Riquelme sacó al macrismo de la conducción de Boca tras 25 años. Pero el 10 Xeneixe fue también en cierta medida responsable de la salida de Sánchez Córdova, que abandonó el cargo de Tesorero tras las fallidas negociaciones con el entonces futbolista por la renovación de su contrato en 2014.

Un episodio que enfrentó a Angelici con Sánchez Córdova tuvo lugar también en 2014, cuando trascendió a los medios el contrato que el club había firmado con Carlos Bianchi en su vuelta a la dirección técnica del equipo tras más de 8 años. Entonces, el contrato fue expuesto por Eduardo Feinman en la pantalla de C5N, propiedad del Grupo Indalo de Cristóbal López, con quien Sánquez Córdova ya tenía negocios en conjunto en el Finansur. Nunca se aclaró quién filtró ese contrato, pero en aquel momento Angelici declaró que había sido un ataque a la dirigencia y que sólo 4 o 5 personas tenían acceso al documento, una de ellas era el Tesorero.

El derrotero del Finansur fue a la par de la suerte de Cristóbal López, encarcelado durante el macrismo por evasión de impuestos. Paulatinamente el banco fue perdiendo volumen de capital y fue aumentando el riesgo que le asignaban las consultoras. Para ese entonces, Sánchez Córdova también estaba complicado en el plano judicial. En 2017 la Cámara de Casación rechazó un pedido de extinción de la acción penal en la causa del Banco Finansur S.A., que tenía como imputados al padre y los hijos Juan Manuel y Tomás Sánchez Córdova. El cargo era evasión de impuestos a las ganancias por más de 1.700.000 en 2008, que a una cotización menor a los $3,50 pesos ese año equivalían a unos USD 500.000 aproximadamente. 

En abril del 2018, una semana después de recibir la nota enviada por el FBI, el Tribunal Oral Federal 1 (TOF 1) ordenó un allanamiento en el Finansur que fue realizado por el fiscal Miguel Angel Osorio. Se secuestró documentación y el TOF1 reclamó al banco informes sobre el destino de los dólares que habían llegado directo de Nueva York. Finalmente, ese año el BCRA declaró la quiebra del banco Finansur y permitió su posterior rescate por el Banco Galicia.

La investigación que se iniciara en aquel momento no llegó a conclusiones que permitieran establecer a qué cuenta/s del banco ingresaron esos 3.2 millones de dólares, cuándo y por quién fueron extraídos. Allí radica otro de los puntos fuertes del planteo de CFK en relación a lo que expresara en su alegato del martes, “el lawfer en Argentina no es sólo para perseguir a peronistas sino para proteger a empresarios macristas”. Restará ver si la centralidad política y mediática que adquirió toda esta información, que ya se conocía en 2018, abre un nuevo camino hacia esclarecer el origen de lo que son hasta ahora los únicos fondos recuperados de la corrupción y que están, evidentemente, muy teñidos de amarillo.