Durante la campaña electoral, el instrumento predilecto de La Libertad Avanza (LLA) fue la motosierra; sin embargo, al término del primer año de Gobierno de Javier Milei es evidente que la herramienta que se lleva los laureles por provocar el mayor nivel de ajuste económico y azotar con más fuerza a la sociedad es la licuadora. Así lo comprueba un reciente estudio de la Universidad de Buenos Aires (UBA) que arrojó que el Salario Mínimo se desplomó un 30% en la Era Milei y, por lo tanto, cerró 2024 en un nivel menor al que presentaba en el 2001.

Gracias a una nueva reducción del 2,4% en noviembre, los primeros doce meses de la gestión libertaria provocaron una caída del 30% en el poder adquisitivo del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) que el Gobierno volvió a fijar por decreto días atrás, por lo que en diciembre alcanzará apenas los $279.718 en un contexto en el que la Canasta Básica Total (CBT) individual es de $324 mil mensuales y en que la línea de pobreza supera el millón de pesos (!) para las familias de cuatro integrantes.

Un 30% más pobres: El Salario Mínimo real se derrumbó en la Era Milei y es inferior al del 2001

La información surge de un relevamiento elaborado por el área de Empleo, Distribución e Instituciones Laborales (EDIL) del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA. La más reciente entrega del estudio, titulado “Panorama del empleo asalariado formal y de las remuneraciones”, indica que el Salario Mínimo real en la Era Milei bajó a niveles inferiores a los del 2001, antes del fin de la convertibilidad, y se halla un 61% por debajo del techo máximo del valor, registrado en septiembre de 2011.

La caída más importante en los doce meses de administración libertaria llegó en los albores de la gestión, cuando la suba inflacionaria y la devaluación en los últimos meses de 2024 y el inicio de 2025 hizo derrumbarse un 15% la cifra en diciembre y otro 17% en enero. En tanto, cabe destacar que recientemente diversos informes advirtieron que los salarios fueron una de las principales variantes de ajuste este año, con un fuerte impacto por caso en el área de los docentes universitarios, mientras que la Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió el jueves último que la pérdida de poder adquisitivo “supera el 70%”.