Grindetti a Kicillof: "No somos desestabilizadores"
El intendente de Lanús forma parte de la mesa política de Cambiemos que frenó el tratamiento de la Ley Impositiva 2020
Néstor Grindetti ha sido una de los intendentes de Cambiemos que ha tomado un rol determinante en la negociación con la gestión de Kicillof por la nueva ley impositiva de la provincia de Buenos Aires.
"No somos desestabilizadores, estamos tratando de encontrar una solución", expresó Grindetti al referirse al enojo del mandatario provincial luego que impidieran el tratamiento en el Senado de la Ley Impositiva 2020.
En diálogo con Infobae, el jefe comunal manifestó que "en las últimas horas no hubo ningún contacto" con el oficialismo y que van a retomar el diálogo "pasado el año nuevo". "Soy muy optimista: vamos a llegar a un acuerdo. La actitud del equipo de gobierno en los días anteriores a la sesión fue buena, nos pusieron muchísimos datos sobre la mesa, y nuestros equipos también están dispuestos a buscar una alternativa", expresó Grindetti en tono conciliador.
"Entendemos que no tener ley es complicado y nosotros queremos ayudar a la gobernabilidad. Además, como dirigentes sabemos que es muy importante también para nosotros porque de esta norma dependen los recursos de la provincia de Buenos Aires", manifestó el intendente.
Sobre el rol de los jefes comunales en estas negociaciones con la gestión provincial, señaló que "tanto Jorge Macri (Vicente López) como yo formamos parte de la mesa política de Juntos por el Cambio, que también tiene representación del radicalismo, de la Coalición Cívica, de representantes de ambas cámaras de la legislatura bonaerense y la presencia del ex jefe de Gabinete Federico Salvai".
El protagonismo central de los intendentes se debió en parte a las vacaciones que se tomó la ex gobernadora María Eugenia Vidal en París. "Después de cuatro años de mandato, la ex gobernadora tiene el absoluto derecho de tomarse una semana de vacaciones, eso no está en tela de juicio. Además, María Eugenia está siguiendo el tema día a día. Habla conmigo, con Jorge Macri, con Federico Salvai y con el senador Roberto Costa. Estamos todos comunicados", remarcó Grindetti.
"La ex gobernadora nunca dejó de seguir el tema y no ha sido un problema que no estuviera presente en el país. Su liderazgo continúa intacto", expresó el jefe comunal de Lanús.
Asimismo, aclaró que "los intendentes somos una parte más de esto y todo lo que hemos propuesto en la negociación surge de esa mesa, que está funcionando muy bien. Nosotros mantenemos un contacto fluido y nada de lo que se pueda llegar a plantear no pasa por esa mesa".
Con Mauricio Macri aseguró que no tuvo ningún contacto, aunque señaló: "No sé si habló con María Eugenia".
Sobre los dichos de Kicillof que tildó a la oposición de ser "irresponsable" por la forma en que trató la ley Impositiva 2020, manifestó que "yo no quiero ser autorreferencial, pero cuando me tocó ser ministro de Hacienda en la Ciudad de Buenos Aires, durante 8 años nunca tuvimos mayoría absoluta y el Presupuesto se terminó aprobando siempre. Los Presupuestos nunca salen sin cambios y es lógico que uno siempre intente mejorar un programa o un concepto".
"En la Ciudad de Buenos Aires teníamos en frente al kirchnerismo y nunca se nos ocurrió pensar que lo que hacían era conspirativo. Ahora nosotros estamos planteando lo mismo. Cuando uno pone por delante algunos conceptos y esos conceptos están acompañados por números, siempre hay un punto de encuentro y yo soy optimista", expresó Grindetti.
"No me cabe para nosotros el dogma de desestabilizadores. Estamos tratando de buscar una solución y tenemos práctica tanto en el oficialismo como en la oposición; no somos improvisados", remarcó.
Por último, señaló que lo que podría destrabar el conflicto es el 75% de aumento al impuesto inmobiliario rural. "Yo creo que el 75% es un número excesivo, que además afecta a una cantidad enorme de tente. Primero abarcaba a 2.500.000 personas, después logramos bajarlo a un millón, que sigue siendo una cifra excesiva. Ese es el punto central: hay que ponerle un tope a los aumentos que coincida con la inflación de 2019, en torno al 55 por ciento. Conjuntamente tenemos que ver cómo encarar esa caída de la recaudación y cómo trabajar también para reducir el gasto".