Mientras que el gobierno de Javier Milei se encarga de dinamitar las relaciones bilaterales con China, el gobernador Axel Kicillof puentea a la Nación y profundiza las relaciones de la provincia de Buenos Aires con el gigante asiático. Tras una serie de acercamientos previos, la administración bonaerense firmó un convenio con el país oriental para fomentar las exportaciones de alimentos. 

El ministro de Desarrollo Agrario de Kicillof, Javier Rodríguez, rubricó el acuerdo con representantes del Grupo de Certificación e Inspección de la República Popular de China (CCIC) que busca facilitar los trámites necesarios para habilitar la venta de alimentos al país asiático.

El organismo chino funciona como una suerte de SENASA argentino y el objetivo del convenio es que se permita la entrada de carne bovina proveniente de frigoríficos bonaerenses a China. Además, se acordó avanzar con la rehabilitación de la exportación de la carne aviar y con protocolos para la venta de menudencias porcinas y bovinas.

“El vínculo entre la provincia de Buenos Aires y la República Popular de China es muy importante", afirmó Rodríguez. Y añadió: "Estamos convencidos de que la producción bonaerense puede ser un gran aporte para la alimentación del pueblo chino, por lo que el comercio entre nuestra Provincia y China sin dudas va a mejorar las condiciones de las dos partes”. 

“La producción de alimentos bonaerenses es reconocida por su enorme calidad, y es un sector con una gran capacidad y un enorme potencial exportador”, completó.