El escenario a inicios de enero era desolador en la histórica planta de Dánica en Llavallol: tras 80 años de actividad, la crisis económica y el ajuste libertario empujaban a las autoridades a tercerizar la producción y clausurar la fábrica que daba empleo a 150 bonaerenses. Sin embargo, tan solo dos semanas después, la intervención del gobernador Axel Kicillof y del ministerio de Trabajo local logró salvar del cierre al establecimiento y mantener en pie tanto la industria local como la mayoría de los puestos laborales. La Provincia, presente.

El lunes 27 de enero próximo será un día crucial en el partido de Lomas de Zamora: ese día se consumará la reapertura de la fábrica de Dánica, que desde diciembre anticipaba su cierre definitivo y en enero ya lo había hecho público. En el medio, lo que ocurrió es la intercesión de la Gobernación bonaerense, que gestionó el rescate de la emblemática planta a través de un programa de asistencia económica a cargo de la cartera de Trabajo que conduce Walter Correa.

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En concreto, la Provincia le ofrecerá a Dánica ayuda para la cobertura del 50% del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) por empleado a través del Plan de Promoción, Preservación y Regularización del Empleo (PREBA). En tanto, la empresa otorgará a cada trabajador un salario equivalente al 65% de la remuneración aceitera; por lo que, junto al programa bonaerense, los sueldos del personal alcanzarían hasta un 75% según la categoría y antigüedad en cada caso, reportó El Destape.

Por lo pronto, el programa se extenderá por tres meses y será prorrogable en tres oportunidades, potencialmente hasta cumplir un año completo de vigencia. El proyecto garantizará que la mayoría del personal contratado hasta el momento mantenga su empleo en la fábrica y, a la vez, prevendrá que se tercerice la producción. Mientras tanto, y en contraposición a Kicillof, el Gobierno Nacional de Javier Milei se dedicó este miércoles a un tipo de “intervención” completamente distinto: la intervención del Hospital Laura Bonaparte.