Se acerca el 2017, un año de elecciones y los dirigentes con responsabilidades ejecutivas comienzan a barajar las cartas para que la gente llegue a las urnas con otro ánimo y deje atrás las pálidas del 2016. En ese contexto, el presupuesto de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal para el próximo  año contempla un importante plan de obra pública para el territorio de la Provincia, lo que generará como consecuencia miles de puestos de trabajo y dinamizará la economía. 

Desde el gobierno provincial, Vidal asegura que con este programa de obra pública se producirá un impacto real en la generación de empleo en lo que tendría como resultado la creación de "al menos 70.000 puestos de trabajo directos y algo más de 40.000 indirectos durante 2017". 

Lo presupuestado para el 2017 en infraestructura representa cinco veces más a lo que figuró en el 2015 durante la gestión del ex gobernador Daniel Scioli. 

El ministro Cenzón había adelantado que "hay que elaborar un plan de obras que supere un mandato. Se va a presentar junto con el próximo presupuesto", y eso es lo que ocurrió. 

Vidal ha destacado en más de una oportunidad en sus discursos que la mayoría de estas obras son las denominadas "invisibles", como por ejemplos las  hidraúlicas, pero están convencidos que son las que realmente le cambian la vida a la gente y previenen que ocurran tragedias que después hay que lamentar. 

"Estamos pensando en obras para los próximos ocho o diez años. Obras que no se ven. Que van a resolver situaciones críticas y profundas", había asegurado a La Nación Vidal.