Máximo Kirchner volvió al ruedo y el PJ bonaerense entra en temporada de rosca

El Diputado nacional y presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, volvió al ruedo tras el intento de asesinato sobre su madre y Vicepresidenta del País, Cristina Fernández de Kirchner. Lo hizo en un almuerzo junto a importantes referentes y jefes comunales del peronismo provincial, que tuvo como tónica poner en común lecturas de la coyuntura económica y política y volver a poner en marcha la maquinaria partidaria que el atentado dejó en stand by.

El asado tuvo como sede el distrito de Lomas de Zamora y a Martín Insaurralde, Jefe de Gabinete provincial y principal ladero de Máximo Kirchner, como anfitrión. Del mismo participaron intendentes, funcionarios y legisladores provinciales y nacionales, pero el foco estuvo puesto en el PJ bonaerense.

Cabe recordar que el partido tenía programado un congreso para el pasado 3 de septiembre, día en el que la propia CFK cerraría el evento como última oradora y para el que se calculaba una asistencia de decenas de miles de personas en Merlo. El intento de magnicidio perpetrado por Fernando Sabag Montiel el jueves 1 de septiembre cambió radicalmente la situación, obligando a todo el oficialismo a un reacomodo y el congreso bonaerense quedó en pausa.

Pero, independientemente de esa instancia, Máximo Kirchner no reapareció en público desde el jueves del atentado y, hasta este almuerzo, no habían trascendido actividades o reuniones que lo mostraran activo y ordenando políticamente la situación. De hecho, su última aparición pública fue el viernes 26 de agosto, en un encuentro de delegados de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Avellaneda. Allí, el Diputado nacional había llamado al Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, a alejarse de las posturas extremistas de Mauricio Macri, prometiendo no utilizar políticamente ninguna información que el ex presidente pudiera dejar trascender en su contra. Al día siguiente el domicilio de la Recoleta de la Vicepresidenta amaneció vallado por el Gobierno porteño, y el resto es historia conocida.

Después de ese episodio, Kirchner tuvo una última intervención pública en una entrevista radiofónica con El Destape, en la que expresó que “la oposición está viendo quién mata al primer peronista”. Sus palabras fueron premonitorias, y esa misma noche se produjo el intento de asesinato contra CFK. Luego de eso, el hijo de la Vicepresidenta se llamó a silencio y no se conoció prácticamente nada de su actividad. En su lugar, fueron Andrés “el cuervo” Larroque y Eduardo “Wado” de Pedro quienes oficiaron de voceros de La Cámpora, en lo que fueron semanas difíciles para el kirchnerismo, marcadas por el estrés post traumático por lo sucedido y un intento hasta ahora infructuoso por entablar un diálogo con la oposición para bajar los niveles de tensión.

EL ASADO

El encuentro se intentó mantener en reserva, no hubo fotos ni posteos en redes, en una clara muestra de la intención principal de la reunión: reorganizar, sin la necesidad de enviar ningún mensaje político. Diagonales confirmó con el entorno de tres importantes referentes del peronismo provincial que el almuerzo existió, aunque el intento por mantener el hermetismo sobre el mismo se mantiene.

Además del anfitrión Martín Insaurralde y su mano derecha y Presidente de la Cámara de Diputados de Diputados provincial, Federico Otermín, participaron intendentes como Juan José Mussi (Berazategui), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Fernando Espinoza (La Matanza); los Diputados provinciales y hombres fuertes de sus distritos Mariano Cascallares (Almirante Brown, intendente en uso de licencia) y Julio Pereyra (Florencio Varela); el jefe comunal en uso de licencia de Hurlingham y Ministro de Desarrollo Social de la nación, Juan Zabaleta, junto con el ex intendente de Navarro y actual Secretario de Hábitat del Ministerio de Vivienda y Hábitat nacional, Santiago Maggiotti; el intendente en uso de licencia y actual Ministro de Infraestructura provincial, Leo Nardini (Malvinas Argentinas), y el jefe comunal en licencia de Merlo, Gustavo Menéndez; la Ministra de Gobierno bonaerense, Cristina Álvarez Rodriguez; la presidenta del bloque de Senadores provincial del FDT, Teresa García; la Vicegobernadora, Verónica Magario; y la Senadora nacional de mucha cercanía con CFK, Juliana Di Tullio.

Desde el entorno de uno de los asistentes al encuentro le dijeron a Diagonales que se trató de un encuentro “ameno” y que no hubo una “bajada de línea” por parte de Máximo Kirchner. “Fue más una puesta en común de que problemas veían” explican, descartando cualquier enojo por parte del presidente del partido para con la primera línea de la tropa bonaerense. Según trascendió, el Diputado nacional se mostró muy preocupado por la situación económica, por la cual sigue culpando a Martín Guzmán, y volvió a bancar la gestión de Sergio Massa.

El peronismo provincial ya empieza a aceitar los engranajes de su maquinaria electoral, proceso que tiene como principales protagonistas a los líderes territoriales. Cerca de uno de los jefes comunales que asistieron al asado en Lomas de Zamora le confirmaron a Diagonales que este miércoles hubo otra reunión entre intendentes y jefes políticos de la Primera y la Tercera Sección electoral, aunque esta vez el líder de La Cámpora no estuvo presente. Con la discusión sobre una posible suspensión de las PASO empezando a caminar en el debate público, los jefes comunales ya evalúan alternativas para la conformación de las listas 2023, un proceso que tendrá que ser lo menos conflictivo posible si el peronismo pretende asegurarse la reelección en la provincia y en los distritos en el contexto de crisis económica.

KICILLOF EN LA GESTIÓN Y AUSENTE EN LA ROSCA

Ni en el asado de Lomas de Zamora ni en la reunión de intendentes de la Primera  y la Tercera estuvo presente Axel Kicillof. El Gobernador está abocado a la gestión y a mostrar actividad y cercanía con la gente, y por ahora viene evitando involucrarse en la discusión electoral.

Seguro de su lugar para competir por la reelección y sin una disputa interna muy clara en el horizonte, Kicillof sigue con su diaria y no parece estar participando todavía de los tejidos subterráneos preelectorales que ya comienzan a darse. De hecho, el Gobernador pateó la pelota hacia el Congreso Nacional ayer cuando lo consultaron sobre la posibilidad de suspender las PASO, el gran objetivo que los jefes comunales conversan por lo bajo. Kicillof afirmó que la provincia sigue una ley nacional, y que en todo caso tendría que evaluar un cambio si es que viene del parlamento. A su vez, en la Legislatura provincial el oficialismo no tiene los votos para avanzar con una modificación sin negociar con la oposición de Juntos, que ya se manifestó enfáticamente en contra de cualquier cambio del cronograma y el esquema electoral.

Hoy el Gobernador acompañó a 220 alumnos de Escobar en el inicio de su viaje de fin de curso, junto al Ministro de Producción (cartera de la cual depende el programa), Augusto Costa, y el actual Secretario de Economía del Conocimiento e intendente en uso de licencia, Ariel Sujarchuk. Luego la visita al distrito continuó en la planta de la empresa Queruclor, donde Kicillof enfatizó en el carácter productivista de su plan 6x6. Más tarde el Gobernador se acercó hasta La Matanza, donde participó junto al intendente Espinoza y la presidenta del Instituto Cultural, Florencia Saintout, de la feria del libro del distrito.

Así parece ir organizándose el mapa bonaerense, con la reaparición de Máximo Kirchner, los intendentes comenzando de a poco la rosca para la conformación de listas y el Gobernador Kicillof abocado a mostrar gestión y hacer avanzar su plan 6x6. Con el inicio del mundial a la vuelta de la esquina, el 2023 aparece cada vez más cerca y el PJ empieza a prepararse para el que será un año calve.