Ayer por la tardecita hubo reunión entre los consejeros del Partido Justicialista bonaerense y varios intendentes. El objetivo fue comenzar a pensar en el rearmado del espacio de cara a las elecciones del 2019 en un contexto de fragmentación que beneficia a Cambiemos. Según trascendió, la idea es abrirles las puertas "a todos los que se consideren peronistas", entre los que entrarían Sergio Massa y Florencio Randazzo. 

En este marco y con vistas a renovar las autoridades del PJ de la Provincia, un intendente se animó a postular la idea de que es necesario que el Partido sea presidido por un jefe comunal "del interior" para reemplazar a Fernando  Espinoza, que ya tiene tres derrotas en sus espaldas si se contabilizan las  elecciones del 2013 (Insaurralde), 2015 (Aníbal Fernández) y 2017 (Cristina Kirchner). 

El intendente de San Antonio de Areco, Francisco 'Paco' Durañona, publicó en su cuenta de Twitter que "el PJ bonaerense  debe presidirlo un Intendente del interior" para "apuntar al arraigo y la industria".

Además argumentó que es necesario hacerlo para salir "de la conurbanización del peronismo". 

A partir de esta propuesta seguramente comiencen a desprenderse las internas en los posicionamientos, ya que hay varios nombres que suenan, aunque el más fuerte es el de Gustavo Ménendez, quien conduce un distrito del Conurbano como Merlo. 

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