En la calle, por la equidad de género
Por Estrella Martínez. Marchamos por la continua vulneración de derechos a la que somos expuestas
Este 8 de marzo de modo internacional, las mujeres marchamos.
Quedaron como telón de fondo en el recuerdo las obreras textiles de NY. En Argentina nos apropiamos de la herramienta del paro, y contextualizamos la fecha, y tomamos las calles, porque nuestras demandas son urgentes.
Recargamos de sentidos y marchamos por las violencias que sufrimos diariamente, por los trabajos que no se nos ofrecen cuando saben que tenemos hij@s, por la desigualdad de salario que sufrimos cuando realizamos la misma tarea, por el derecho a gozar el ocio, por compartir con los varones la crianza, para no ser acosadas en la calle, porque la maternidad no sea nuestro único destino, por las jubilaciones para las amas de casa, para que la violencia institucional no nos amenace ni persiga, y por el derecho a la vida, por el derecho a acceder a lugares de decisión, por el derecho a planificar en salud nuestra vida sexual, por, por...y por.
Marchamos por la continua vulneración de derechos a los que somos expuestas, obligadas diariamente a "elegir" entre falsas opciones como son el despido o el maltrato, el acoso o el trabajo, la libertad o la obediencia, entre la pareja o el abuso, la muerte o una vida violentada,
En Argentina, las estadísticas de muerte de mujeres crecen anualmente desde que empezaron a ser registradas. Al tomar la información del Observatorio de Femicidios "Adriana Marisel Zambrano"; los datos registran el periodo que va del 1º de enero al 31 de diciembre de 2016.
-1 Femicidio cada 30 horas en nuestro país
-290 Femicidios y Femicidios vinculados de mujeres y niñas
-37 Femicidios Vinculados de hombres y niños
-401 hijas e hijos quedaron sin madres de los cuales 242 son menores de edad
Pese a los números, socialmente no se logra concienciar sobre la lucha feminista. Muchas personas siguen sosteniendo que el feminismo es la contraposición del machismo. El feminismo NO es el machismo al revés, sino la búsqueda de igualdad de derechos. Antes las luchas fueron por igual salario, luego por el voto, posteriormente por la libertad sexual, hoy la máquina del tiempo pone reversa y recuerda que lucha es por una vida plena de derechos.
Parecería, qué el estigma de la mujer feminista de "corte fundamentalista o desbordada emocional", empieza a resquebrajarse y hacer dudar al sentido común de sello mediático, cuando observamos los informes del observatorio.
La banalización, desacreditación, naturalización, son procesos que promueven y perpetúan las violencias diarias y el oscuro regodeo ante las pantallas, dejándonos a la vera del espanto.
La cantidad de mujeres que mueren en Argentina por año, es la misma que los soldados caídos en la guerra de Malvinas. Pero nadie lo piensa en esos términos. La falta de estadísticas no es casual ni ingenua, nadie antes midió lo que a nadie le importaba, nadie registro sistemáticamente, en qué circunstancia morían o cuantas morían. La ausencia de registros es la prueba de la existencia de la historia del "algo habrán hecho".
Por otro lado, las movilizaciones en nuestro país de NI UNA MENOS son la muestra de una mayor conciencia de derechos, además de denunciar la ausencia del registro oficial de femicidios y de políticas efectivas que terminen con el tema por parte del Estado.
Por eso, si estas convencida que es urgente cambiar el modo en que se nos considera a las mujeres, si crees que sin equidad de género no hay justicia social, venite este 8 de marzo, que estaremos todas en la misma vereda.