Tras mantener una deuda que se tornó impagable por parte de las autoridades de la empresa láctea Sancor, la situación es de tensión y además del cierre de cuatro plantas, y de tener 500 trabajadores cesanteados, advierten que peligran 5 mil puestos de trabajo.

La crisis en el sector lechero, que vienen advirtiendo todos los eslabones de la cadena productiva y comercializadora, provoca que desde los productores hasta las fábricas estén en peligro constante de desaparición, incluso la histórica empresa Sancor.

El líder del gremio de Camioneros, Pablo Moyano en medio del paro que realiza el sector que distribuye productos en Argentina sostuvo que "el Estado decidió no darle subsidio o ayuda a esta empresa".

Además, el sindicalista señaló que "hoy le ha tocado a dos mil trabajadores compañeros camioneros a quien los precarizan con la distribucion" y que según él las intenciones del Ejecutivo son traer a una "empresa extranjera a la que le van a dar un subsidio y van a dejar a más trabajadores en la calle".

Desde hace un tiempo que Sancor viene achicando la empresa a través de una restructuración de su personal y producción. La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) aclaró en un comunicado que la empresa confirmó "la necesidad de producir una reestructuración" que implique un "achique en la cantidad de plantas, usando los mismos procedimientos que se han usado en el pasado como son los retiros voluntarios, las jubilaciones y los traslados".

Desde el Ejecutivo nacional analizan una salida con la búsqueda de un grupo empresario interesado en completar la reestructuración de la empresa láctea y volverla productiva y competitiva en el mercado local.

Las primeras plantas que dejarían de producir son las que están ubicadas en las localidades de Brinkman, Charlone, Coronal Moldes y Centeno. Desde horas de la mañana de este miércoles, se registró un paro de la rama láctea de Camioneros y, al mismo tiempo, se desarrolló un corte parcial sobre la autopista Panamericana.