Cambios en la UIF: El ataque “por la espalda” de Santiago Caputo y un Cúneo Libarona cada vez más debilitado

Cuando una de las tres patas del Triángulo de Hierro que conforman el presidente Javier Milei, su hermana y secretaria general de la Presidencia Karina, y el asesor sin-cargo pero todopoderoso Santiago Caputo apuntan contra alguien saben que, aunque les pueda salir mal la jugada, irán a todo o nada. El “Arquitecto” de Milei lo sabe mejor nadie y desde hace algunas semanas busca esmerilar los muros de resistencia que aún le quedan a Mauricio Macri. Y lo hizo al mejor estilo de la serie House of Cards.

Como se señaló en este repaso, Caputo hace varios días que busca tensionar con algunos dirigentes que aún le son leales al expresidente y las campañas de hostigamiento en las redes, vía milicias digitales orquestadas por el propio discípulo de Jaime Durán Barba, finalmente tuvieron eco en movimientos dentro del Gobierno.

El Poder Ejecutivo oficializó la salida de Ignacio Yacobucci, que dejó de ser el presidente de la Unidad de Información Financiera (UIF). Se trata del primer funcionario de La Libertad Avanza despedido en 2025.  

Este movimiento también apunta a otro blanco, del bando del PRO. Una de las contendientes de Caputo que no daba el brazo a torcer luego de sucesivos cruces en las redes sociales era María Eugenia Talerico, que fue junto con Mariano Federici, quienes encabezaron la UIF en la gestión CAMBIEMOS.

La operatoria de la creación, durante el gobierno de Macri, de una presunta lista de 50 empresarios, políticos y familiares “kirchneristas” a ser protegidos por el gobierno “amarillo” en la EXAFIP, fue el haz bajo la manga que utilizó la cuenta atribuida al asesor presidencial para arremeter contra Macri y sus funcionarios.

Además de ir contra la exsubdirectora de la agencia de recaudación Jimena De La Torre, las acusaciones de Caputo fueron principalmente contra Talerico, exvicepresidenta de la UIF.

“La defensa de la banda de Talerico es que las personas que integraban la lista secreta que armó la AFIP durante su gestión terminaron todos presos. No sé si son pelotudos o se hacen”, fustigaba Caputo en una cuenta que él, irónica y eufemísticamente, prefiere que se la nombre como una cuenta de X “atribuida” al asesor del Presidente.

De esta manera, el asesor estrella cambiaba la raíz de las acusaciones, recriminando que la administración macrsta usó el organismo que se dedica a recabar información para prevenir el lavado de activos para perseguir opositores a su gobierno.

Algo ya tenía cocinado Caputo cuando, tres días después de ese twiit, publicó un enigmático. “Lo que me voy a reír de Talerico la semana que viene”, planteaba de forma sintética y amenazante.

JUGADA POR DUPLICADO

Yacobucci hacía rato que estaba en la mira de Caputo, y como suele excusarse el Gobierno, las causas de su despido suelen atribuirse a situaciones “poco decorosas”. Llegó a la entidad de la mano del ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona, y fue el mismo exabogado mediático quien, luego de volver de sus vacaciones en Chile, le pidió que dejara el cargo.

Esta determinación de la Casa Rosada deja aún más aislado a Cúneo, que ve cómo se empodera la figura de su viceministro y, en los hechos, cuasititular del área: Sebastián Amerio, que es el representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura.

Las hipótesis de una eventual salida del ministro chocan con la necesidad del Gobierno de no dejar descubierta el área en momentos en los que se definen los pliegos para dos nuevas vacantes a la Corte Suprema, por las que la Casa Rosada quiere que asuman Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla.

Le recriminan a Yacobucci la utilización de pasajes en primera clases, incluso viajando más veces que el propio Milei, y otros gastos excesivos para su función. También se le criticaba su negativa férrea a no impulsar investigaciones contra exfuncionarios de otros gobiernos, con un presunto criterio “político” de manejo de la UIF.

Pero principalmente, Caputo puso el grito en el cielo cuando se enteró de la idea de Yacobucci de que tanto Federici como Talerico se integraran a la gestión “libertaria”, ejerciendo como asesores de la UIF. De hecho, el nombre de Talerico asomaba como cabeza en la designación del área de Migraciones que finalmente no prosperó.

Quién reemplazará a Yacobucci es nada más ni nada menos que el exmarido de la referente macrista. Se trata de Paul Starc, titular de la Fiscalía Federal en lo Criminal y Correccional de Tres de Febrero. 

Se lo presenta como un experto en gestión de investigaciones complejas y en la colaboración entre agencias del sistema judicial, y cuenta con diversas capacitaciones profesionales y académicas enfocadas en el Derecho Penal y la Inteligencia. Fue subsecretario de Investigaciones e Inteligencia Criminal, bajo la gestión de Carlos Stornelli como ministro de Seguridad bonaerense y tiene en su haber las demoras y las fallas en la investigación de la búsqueda de la familia Pomar, en el 2009, que habían sufrido un accidente automovilístico.

A pesar de todos los antecedentes, esto no deja de ser una mojada oreja de Caputo contra Talerico que de todos los funcionarios judiciales se haya ido a buscar justamente a su expareja.

Luego de darse a conocer la información de la expulsión de Yacobucci de la UIF, Caputo se hizo el desentendido y preguntó socarronamente “¿Qué pasó que todos hablan de Talerico?”. No sin antes retwittear un posteo en el que el Presidente estaba disfrazado de Superman, que decía: “Milei domando a Talerico por enésima vez”.

En línea con la publicación de Federici, Talerico respaldó a Yacobucci y arremetió contra su segundo y contra el propio Caputo: "Qué burda cobertura para la expulsión de un funcionario de lujo de la UIF, su Presidente Ignacio Yacobucci, luego haber infiltrado al organismo, con un Vicepresidente, al que denuncié, González Rodríguez, por no reunir los requisitos legales para el cargo y ser sólo amigo de Santiago Caputo", señaló.

Caputo, fiel a su estilo desafiante, les revoleó con una de las causas que más le preocupan a Mauricio Macri: “Aun si la UIF fuera a ser querellante, estos pelotudos quieren que lo sea de manera arbitraria. De manera tal que sea querellante en la causa ‘Hotesur’ pero no en la causa ‘Correo’, por decir una absolutamente al azar. La UIF no debe querellar. Pero si lo hace debe ser para todos por igual. Estoy bastante seguro que no es lo que quieren”.

Esta batalla palaciega promete seguir dejando nuevos capítulos.