A partir del proyecto de rebaja del mínimo no imponible que el Ejecutivo Nacional envió ayer a la Cámara baja, desde el Frente Renovador, tenemos varios cuestionamientos, dado que con esa iniciativa habrá cerca de medio millón de nuevos contribuyentes, y que el oficialismo parece no animarse a grabar la renta financiera y a tocar intereses concentrados.

La moción macrista eleva el mínimo no imponible un 15%, con lo cual pagarán Ganancias quienes ganen desde $21.712 netos por mes, en los casos de trabajadores solteros sin hijos. Además, según el texto, los asalariados alcanzados por el impuesto no podrán deducir a sus cónyuges ni tampoco a sus padres y abuelos. Los hijos, a su vez, podrán deducirse hasta los 18 años y no hasta los 24 como ocurre hoy.

Al respecto, la propuesta del Gobierno vuelve a quedar otra vez muy alejada de la realidad porque, en primer lugar, consideró que no es lógico hablar de una suba de apenas el 15 % cuando durante el año se registró una inflación del 42 %.

Además, a modo de contrapunto con el proyecto presentado por Sergio Massa, el cual contempla, entre otras modificaciones, el pago a partir de los 48.500 pesos de salario para personas casadas con dos hijos y de 34.000 para solteros; cambiar las escalas para los monotributistas, para los autónomos y para los jubilados y busca poder deducir de ganancias los alquileres y los créditos hipotecarios.

A su vez, desde nuestro espacio no sólo se promueven las modificaciones necesarias, sino que también se le indica al Estado de donde debe realmente obtener esos recursos, ante lo cual instó al Ejecutivo Nacional a que no tenga miedo de grabar la renta financiera para defender los intereses de millones de argentinos.

En ese sentido, el Estado debería cobrarle el impuesto al sector financiero, a quienes obtuvieron ganancias extraordinarias con el dólar futuro; al sector del juego; y a la minería, retornando en este último rubro a la situación previa a la eliminación de las retenciones.

Como Vicepresidente del bloque del Frente Renovador en Diputados veo la necesidad de mostrar una señal para darle el empuje que necesita el mercado interno, dado que gran parte del impuesto que se les va a dejar de cobrar a muchos trabajadores, va a volver al consumo y va a permitir que los pequeños comerciantes puedan recuperar parte de lo que han perdido este año con las deficientes políticas económicas aplicadas por el Gobierno Nacional.

Por eso, finalmente, espero que efectivamente se pueda aprobar la iniciativa de Sergio Massa por sobre la del oficialismo, porque adelantó que beneficiaría a 3 millones de trabajadores en blanco, a 3 millones de monotributistas, a 500 mil autónomos y a 400 mil jubilados esto significaría una mejora del 60 por ciento, en un año, del piso que había planteado el Gobierno.