A pesar de los múltiples viajes al exterior del presidente Javier Milei y sus reuniones con empresarios, lo cierto es que la inversión se desplomó en el último año en Argentina; especialmente en los últimos ocho meses. 

La inversión tuvo una caída interanual de 25,8% en agosto y un derrumbe del 21,5% entre enero y agosto de 2024. 

Según la consultora Orlando Ferreres, en máquinas y equipos la caída fue de 23,7%; debido a una marcada contracción en la importación de bienes de capital. En tanto, en el rubro de la construcción, la disminución de la inversión fue del 27,6%. 

El relevamiento se trata de una medición de volumen físico, que no cuenta el efecto de la inflación. El informe señala que en términos del Producto Bruto, la tasa de inversión en agosto era de 15,6%. 

La cifra es una de las más bajas de los últimos años. Tal es así que incluso en 2021, año en el que todavía afectaba el impacto de la pandemia, ese porcentaje había sido superior al 18% del PBI.

De esta manera, el relato vuelve a quedar en evidencia. Contrario a las promesas de campaña, no llegan las inversiones y a pesar de haberse reunido varias veces con empresarios de Estados Unidos y occidente, Milei no ha podido anunciar ninguna inversión en el país. 

En cambio, el mandatario logró que se caigan millonarias inversiones como era la que iba a hacer Petronas en Bahía Blanca para construir una planta de GNL. 

En ese contexto, el jefe de Estado tuvo que dar un giro de 180 grados en su discurso anti China y ahora habla del gigante asiático como “un socio comercial muy interesante” al que le va a pedir inversiones.