Una característica que bien ha sabido llevar el gobierno de La Libertad Avanza, en la figura del presidente Javier Milei, es la de identificar de una forma discursivamente eficaz a sus “enemigos” e ir a fondo contra ellos en estos más de diez meses de gestión.

No solo se trata del arco político y social opositor que se podría sintetizar en el peronismo/kirchnerismo o la izquierda: hay sectores que a priori concuerdan ideológicamente con el acervo cultural “libertario” pero que se ven en retroceso dentro de la distribución de poder y dinero en la Argentina. Este es el caso del Grupo Clarín.

La ola de tensiones entre el oficialismo y el holding mediático más grande de nuestro país comenzó su nueva escalada cuando Milei fue entrevistado por Franco Mercuriali en la señal TN, del grupo que encabeza Héctor Magnetto.

El Presidente arremetió contra una de sus caras más renombradas, Marcelo Bonelli, por los rumores de despido y “corrupción” del saliente ministro de Salud Mario Russo, que fue reemplazado por quien tenía el control de la gestión de hecho en la cartera, Mario Lugones.  

“Mintió descaradamente sobre el motivo del alejamiento de Mario Russo”, aseguró Milei. Y se explayó: “Por cuestiones personales y de funcionamiento, él decidió renunciar. Es un profesional enorme, honesto, una buena persona, y Bonelli dijo que lo eché por chorro”.

“Cuando Bonelli llamó llorando, como han hecho otros de esta casa también, mintiendo sobre la campaña, dijo que se lo había dicho una ‘alta fuente’. El número uno no, porque el Presidente no le contesta el teléfono. Entonces dijo que se lo había dicho Santiago Caputo. Me resultó raro porque tengo entendido que no habla con él. Lo llamé y le pregunté, y efectivamente no habla con él. Ensució a una persona y generó ruido”, disparó Milei.

Lo que quedó a las claras después del reportaje y un nuevo round de su “batalla cultural” contra el “85 por ciento” de periodistas “mentirosos”, como señaló el jefe de Estado, es que el Gobierno iría a fondo ahora en el plano económico contra la corporación que encabeza Héctor Magnetto.

Con el anuncio del vocero Manuel Adorni sobre el decreto para disolver la actual estructura de la AFIP, y la creación de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), el Gobierno busca desregular la actividad del ente estatal encargado de la recaudación de impuestos.

Lo que a simple vista, parecería un paso hacia adelante para la contaduría del holding de telecomunicaciones y medios, si se tiene en cuenta la relajación de los controles, por los despidos y los pases a retiros voluntarios que involucra a 3155 agentes de la AFIP, también tiene como contracara para Clarín un nombre: el de Andrés Vázquez.

Vázquez será la nueva máxima autoridad de la Dirección General Impositiva (DGI), que tendrá dependencia de la titular de ARCA, Florencia Misrahi. Con una larga trayectoria en el organismo, en el que fue director de Inteligencia Fiscal y director regional, Vázquez lideró en el 2009 un megaoperativo de fiscalización en el Grupo con más de 200 agentes.

Esto se daba en medio de las tensiones entre el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner con los medios de comunicación opositores, mientras se debatía la nueva ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.

El titular de AFIP por ese entonces, Ricardo Echegaray, despidió a Vázquez luego de enterarse tardíamente del operativo. Dos años después, el fallecido fiscal federal Federico Delgado solicitó la indagatoria del saliente funcionario. Se lo investigaba por la transferencia de casi 461 mil dólares a cuentas en Suiza y Luxemburgo a través de una "cueva financiera" sin declarar, vinculada al BNP Paribas.

AL CORAZÓN DE LOS NEGOCIOS

Hay otro nombre propio de relevancia mundial que se asoma por el espejo retrovisor de los negocios de las telecomunicaciones de la megaempresa de Magnetto, que cuenta con Telecom-Personal en esta área, y que, con las nuevas resoluciones, ve el nuevo panorama “libertario” con mucha preocupación: Elon Musk.

El megamagnate, dueño de la empresa de telecomunicaciones satelital Starlink, tiene campo abierto para avanzar dentro de las licitaciones entre operadores privados. Está en juego la disposición de los 100 megahertz (Mh) de espectro que el Estado le había reservado a la empresa pública ARSAT para comunicaciones móviles y que, actualmente, no están en uso.

Además también se licitarán los 50 Mh que están en manos del ENACOM. Desde el Gobierno indicaron que los servicios de 5G permitirán "alentar mayor competencia en las empresas del sector" e ir hacia un "mejor servicio y menor precio". También es una incógnita quien se adjudicará otros activos de ARSAT como Datacenter o la Red Federal de Fibra Óptica.

Clarín ve afectados sus ingresos por otras dos medidas anunciadas por el Gobierno. Una es la eliminación de los beneficios impositivos del IVA a los diarios revistas y publicaciones periódicas, y a las suscripciones de ediciones periodísticas digitales de información en línea.

Esta determinación afecta severamente al multimedio, y también a todos los restantes medios escritos, en formato físico y digital. Principalmente incumbe a los negocios por vía de suscripciones digitales para la lectura exclusiva de contenido informativo de los principales medios online.

Pero además involucra a las empresas que venden otros servicios como la televisión por cable o promociones con un club de descuentos (como Club La Nación o Clarín 365). En el oficialismo estiman que la medida va a "aumentar la recaudación en 264 mil millones de pesos". Es poco lo que ingresa de dinero, rige directamente como medida disciplinadora contra los medios más pequeños, pero el mega holding está directamente involucrado.

El segundo golpe para Clarín por parte del Gobierno se dio a conocer cuando el vocero Adorni informó que, basándose en una auditoría sobre el ENACOM, se supo que "Telecom y Telefónica debían más de 3000 millones de pesos en conceptos de aportes de inversión" de un fideicomiso otorgado durante el último gobierno del Frente de Todos. "Este trabajo dejó en evidencia que el ENACOM omitió intimar a las empresas, falló en el control e incurrió en una demora en la resolución de recursos interpuestos por las empresas", aseguró Adorni.

La respuesta de Telecom no se hizo esperar: “Telecom cumple y ha cumplido siempre con todas sus obligaciones regulatorias, incluidas las relativas al Servicio Universal, efectuando aportes millonarios que la convierten en el principal aportante a dicho fondo. Sólo en lo que va del año 2024, Telecom lleva aportados más de 12.000 millones de pesos”.

Y añadieron: "Respecto a la referencia a una deuda de 3000 millones de pesos al Fondo de Servicio Universal, Telecom ha ejercido en sede administrativa las defensas correspondientes, por entender que ha realizado prestaciones por encima de sus obligaciones regulatorias. Telecom ha sido auditada anualmente respecto de la composición e información contenidas en las declaraciones juradas presentadas ante la autoridad competente y todas las intimaciones recibidas han sido respondidas siempre en tiempo y forma".

El Poder Ejecutivo le dio un premio consuelo a Magnetto. Fue confirmada en el Boletín Oficial la derogación de las normas de las administraciones de Mauricio Macri y de Alberto Fernández que regían para el ordenamiento de señales en la grilla de la TV paga. De esta forma, Cablevisión/Flow puede quitar a la competencia de sus canales de televisión informativos hacia el lugar que dispongan en la oferta de la grilla.

Parece poco en comparación con todo lo que puede perder el principal grupo de telecomunicaciones, que no paró de cerrar negocios con todos los gobiernos de turno desde el menemismo hasta la fecha.