OMS 2.0: Ahora Milei quiere salir del Acuerdo de París porque el cambio climático “es un fraude”
El Presidente dijo que está “en consideración” dejar el programa ambientalista: “La forma en que se habla del calentamiento global es completamente errónea”. Argentina, furgón de cola de Donald Trump.
En Casa Rosada ya avisaron, en cuanto a política internacional concierne, que el último cierre la puerta. No bastó la controversial retirada de la Argentina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) por tratarse de una organización “genocida” – hoy se conoció el segundo paso en el plan de aislamiento internacional del Gobierno Nacional de Javier Milei, seguidor fiel de la doctrina de Donald Trump en Estados Unidos: salir del Acuerdo de París. La posibilidad ya está en “consideración” y la explicación es simple: el cambio climático “es un fraude”.
“Sí, lo estoy considerando”, afirmó lisa y llanamente el jefe de Estado ante la consulta del diario francés Le Point sobre el potencial abandono de la Argentina del acuerdo ecológico que lleva el nombre de la capital europea. No ha de sorprender que las razones esgrimidas por el economista y líder libertario sean tan insólitas como su explicación relativa a la OMS: “Porque no adhiero a la agenda ambientalista, que me parece un verdadero fraude; la forma en que se habla del cambio climático hoy en día es completamente errónea”.
En el fondo, aquí no hay noticia: más allá de sus vaivenes, ya era sabido que el Presidente descree de la protección del medio ambiente y sostiene que no hay pruebas de alteración ecológica alguna en las últimas décadas pese a la vasta evidencia científica. Así lo argumentó en la susodicha entrevista: “El calentamiento global no tiene nada que ver con la presencia humana. Es un problema relacionado con los ciclos de temperatura del planeta. Actualmente estamos viviendo el quinto ciclo de temperaturas elevadas,y en los cuatro anteriores el ser humano no existía”.
Lo que obra aquí es una cuestión de alineamiento externo, aunque es llamativo que, tanto con el Acuerdo de París como con la OMS, el “alineamiento” se vea más bien como aislamiento. No obstante, otro país lidera el séquito anti organizaciones: los Estados Unidos de Trump, quien días después de asumir la Presidencia abandonó numerosos organismos similares. Lo que no está claro es qué pretende lograr Milei siendo furgón de cola de Norteamérica, una estrategia que hasta el momento solo provocó grandes resistencias locales y cosechó escaso éxito internacional.