Días atrás, el ex presidente uruguayo Pepe Mujica despertó una polémica que cruzó el Río de La Plata al asegurar que “la vieja Kirchner” está al frente del peronismo “en lugar de ponerse de vieja consejera y dejar nuevas generaciones”. En las últimas horas, el dirigente oriental pidió perdón por los términos que utilizó para referirse a Cristina Fernández de Kirchner y si bien bajó el tono de las críticas, mantuvo sus custionamientos. 

"Kircher es un fenómeno, probablemente en Argentina no hay quien goce de un cariño de las masas de cierto sector, un 30% o 40% de la población argentina, que la quieran tanto. Tiene un peso subliminal tremendo, es una mujer admirable y excepcional”, sostuvo Mujica para calmar tensiones. 

Además, el ex presidente del país vecino admitió que sus palabras “no fueron para nada diplomáticas” y fueron "groseras”. De todas maneras, el mítico dirigente se refirió a la situación actual argentina y ratificó sus dichos sobre la necesidad de un cambio generacional en el peronismo.  

Mujica aseguró que le “duele mucho” la situación que atraviesa la Argentina pero consideró que el momento actual “va a durar”. Frente a ello, opinó que se deben “ambicionar” cambios que hagan “volver a la construcción de una Argentina posible, que reparta un poco mejor”. 

"Creer que se puede llevar adelante una sociedad emitiendo y emitiendo, la historia ha demostrado que es una falsa perspectiva que termina en tragedia las más de las veces. Es probable que el movimiento peronista tenga que aceptar esto. Eso va a llevar tiempo y va a requerir nuevos dirigentes”, advirtió.

En ese contexto, repitió que “los grandes referentes, y no hay otro referente del peronismo más grande que la señora Cristina Kirchner, debería usar su poder para bucear, buscar y empujar que se procesen nuevas generaciones”.