Polémica: En el Día por las Víctimas del Holocausto, Milei defendió el gesto “nazi” de Elon Musk
El Presidente se presentó en el Museo del Holocausto de Buenos Aires para respaldar al multimillonario tras su escandaloso saludo cuasifascista y despotricar contra “la izquierda de todo el mundo”.
El controversial saludo del empresario Elon Musk en Estados Unidos, con su brazo derecho recto y apuntando a lo alto, generó una ola de fuertes repercusiones a nivel global. En la Argentina, el hecho desencadenó una particular agenda del presidente Javier Milei, quien, tras aclarar en Twitter que el híper multimillonario “no es nazi”, encabezó este lunes un acto en el Día por las Víctimas del Holocausto y, frente a la comunidad judía, aprovechó para defender el polémico gesto de su “amigo”.
“Ojo con los que de forma banal revolean acusaciones y categorizaciones de ‘nazi’ a cualquiera que no coincida con su forma de pensar, tal como lo hicieron expresiones de izquierda en todo el mundo con mi amigo Elon Musk, que es un defensor intachable del Estado de Israel”, disparó el primer mandatario durante su disertación desde el Museo del Holocausto de Buenos Aires, ante un público repleto de personas de la colectividad judía, en el 80° aniversario de la liberación del campo de concentración Auschwitz-Birkenau.
Asimismo, el líder de La Libertad Avanza (LLA) afirmó que las imputaciones de la “izquierda” global “no deberían sorprender, porque hasta hartas veces estas falsas acusaciones vienen de los mismos que defienden a los terroristas de Hamás y despotrican en contra del Estado de Israel”. En este punto, Milei valoró también “el compromiso del presidente de Estados Unidos Donald Trump” ya que “se cargó al hombro las negociaciones que permitirán que los rehenes puedan volver a casa” en el marco del conflicto bélico en Gaza.
La insistencia del economista tanto en su agradecimiento al flamante mandatario nortaemericano como en su defensa del gesto de Elon Musk da cuenta del verdadero trasfondo político de esta cruzada libertaria: las intenciones de Milei parecen trascender la agenda local e intentar fijar a la Argentina y, especialmente, a su Gobierno en alianza y cercanía claves con las mayores figuras de la derecha y la libertad de mercado del mundo – incluso si ellos mismos no comparten esa posición y califican a Latinoamérica como innecesaria para el proyecto estadounidense.