Protocolo "anti-piquetes": Todas las fuerzas federales intervendrán en la represión de la protesta
Patricia Bullrich detalló las medidas que forman parte del plan para enfrentar el conflicto social
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, confirmó que las cuatro fuerzas federales y el Servicio Penitenciario Federal “van a intervenir en cortes de calle, piquetes o bloqueos, sean parciales o totales”.
“Es muy importante entender que hemos vivido muchos años bajo un desorden total y absoluto”, comenzó su discuro la funcionaria y aseguró que, por ese motivo y por orden del presidente Javier Milei, se implementará este "Protocolo para el Mantenimiento del Orden Público ante el corte de vías de circulación”.
Bullrich consideró que “la ley no se cumple a medias” y que "las fuerzas van a intervenir de acuerdo a los códigos procesales de manera inmediata” ante cortes de tránsito en el marco de protestas sociales. “No vamos a tomar en cuenta la existencia de vías alternativas al tránsito o a la circulación. Esto quiere decir que si se corta la vía principal, se libera la vía principal”, aclaró.
Además, afirmó que “las fuerzas utilizarán a la mínima fuerza necesaria y será graduada a la resistencia”. Al mismo tiempo, los efectivos de seguridad van a trabajar en las estaciones de tren para “incautar palos” y otros elementos que puedan usarse para cubrir el rostro y “esconder la identidad” de los manifestantes.
A su vez, “los datos de los partícipes u organizadores serán remitidos a las fuerzas de aplicación correspondientes” y que "en caso de ser extranjeros con residencia provisoria, se mandará la información a la Dirección Nacional de Migraciones”.
Por otro lado, señaló que el Estado no se hará cargo del costo del el uso de la fuerza de seguridad, en cambio "lo deberán pagar las organizaciones que tengan personería o los individuos responsables”.
Entre las medidas, explicó que “se procederá a sancionar a aquellos que lleven niños que deben estar en la escuela” y que “se va a crear un registro de las organizaciones que participan en este tipo de hechos y que sistemáticamente son los que hacen de voceros de este tipo de manifestaciones”.
Bullrich también contó que se pondrán en contacto con el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, José Alonso, “para que colabore en el control de las autopistas, en los vehículos y en las entradas y en las estaciones de trenes”.
"Si ellos no actúan, lo haremos nosotros. Creemos que el país entero tiene que colaborar. Hay que entender que todos tenemos que vivir en paz y en orden”, remarcó.
A modo de cierre, la presidenta del PRO aseguró que “las calles no se toman” y que si alguien lo hace “va a haber consecuencias”. "Hay una decisión tomada. La forma de intentar buscar un beneficio social no es por la vía del corte, el corte se termina”, lanzó.
De todas maneras, explicó que “habrá excepciones con respecto a las tradiciones religiosas” como la peregrinación a Luján o “cuestiones deportivas”. “Todo aquel que por una cuestión determinada pida un permiso va a poder utilizar una vía de acuerdo al tipo de manifestación que sea. Tiene que pedir permiso”, concluyó.
Luego de que Unidad Piquetera convocara a un "paro activo” y una movilización a la Plaza de Mayo para el próximo miércoles, el gobierno nacional anunció que implementará un plan “antipiquetes” bajo el nombre de “Protocolo de Orden Público”.
El vocero de Casa Rosada, Manuel Adorni, explicó que las medidas incluyen "sanciones severas a los involucrados en impedir la libre circulación de los argentinos y alcanza al que corta, al que transporta, al que organiza y al que financia”.
Esta tarde, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich brindará detalles sobre el plan que busca eliminar los cortes de calle y desmovilizar a los sectores que usualmente participan de manifestaciones en medio de un clima de tensión social ascendente.
Lo cierto es que desde el gobierno de Javier Milei esperan que el impacto de las medidas anunciadas por Luis Caputo y la disparada inflacionaria que anticipan, generen un fuerte rechazo en la sociedad y resistencia por parte de movimientos sociales, gremios y fuerzas opositoras.
El protocolo está inspirado en un esquema que Patricia Bullrich elaboró en 2017 cuando era ministra de Seguridad de Mauricio Macri. En ese entonces, la ministra había asegurado que no iban “a permitir que la calle sea un caos” y que su objetivo era "cambiar la cultura del corte”.
Bajo esas mismas premisas, el Gobierno implementa un plan de acción similar para enfrentar las protestas sociales que ya anticipan.